Parte,  Sección, Capítulo, Párrafo

 1   1,     2,   1, 312 |       vosotros pensasteis hacerme daño, Dios lo pensó para bien,
 2   2,     2,   2, 1459|        1459 Muchos pecados causan daño al prójimo. Es preciso hacer
 3   2,     2,   2, 1475|           los otros, más allá del daño que el pecado de uno pudo
 4   2,     2,   2, 1494|      penitencia", para reparar el daño causado por el pecado y
 5   3,     2,   2, 2272|           del crimen cometido, el daño irreparable causado al inocente
 6   3,     2,   2, 2303|          desea deliberadamente un daño grave. ‘Pues yo os digo:
 7   3,     2,   2, 2309|        preciso a la vez:~– Que el daño causado por el agresor a
 8   3,     2,   2, 2321|          un injusto agresor cause daño. La legítima defensa es
 9   3,     2,   2, 2356|        física y moral. Produce un daño grave que puede marcar a
10   3,     2,   2, 2409|       Infligir voluntariamente un daño a las propiedades privadas
11   3,     2,   2, 2413|    materia grave, a no ser que el daño infligido sea tan leve que
12   3,     2,   2, 2436| equilibrio de la vida. Además del daño personal padecido, de esa
13   3,     2,   2, 2477|      susceptibles de causarles un daño injusto (cf CIC can. 220).
14   3,     2,   2, 2487|           es imposible reparar un daño públicamente, es preciso
15   3,     2,   2, 2487|    apreciarse según la medida del daño causado. Obliga en conciencia~ ~