RESUMEN
2017 La
gracia del Espíritu Santo nos confiere la justicia de Dios. El Espíritu,
uniéndonos por medio de la fe y el Bautismo a la Pasión y a la Resurrección de
Cristo, nos hace participar en su vida.
2018 La
justificación, como la conversión, presenta dos aspectos. Bajo la moción de la
gracia, el hombre se vuelve a Dios y se aparta del pecado, acogiendo así el
perdón y la justicia de lo Alto.
2019 La
justificación entraña la remisión de los pecados, la santificación y la
renovación del hombre interior.
2020 La
justificación nos fue merecida por la Pasión de Cristo. Nos es concedida
mediante el Bautismo. Nos conforma con la justicia de Dios que nos hace justos. Tiene como
finalidad la gloria de Dios y de Cristo y el don de la vida eterna. Es la obra
más excelente de la misericordia de Dios.
2021 La gracia es el auxilio que Dios nos da para
responder a nuestra vocación de llegar a ser sus hijos adoptivos. Nos introduce
en la intimidad de la vida trinitaria.
2022 La
iniciativa divina en la obra de la gracia previene, prepara y suscita la
respuesta libre del hombre. La gracia responde a las aspiraciones profundas de
la libertad humana; y la llama a cooperar con ella, y la perfecciona.
2023 La
gracia santificante es el don gratuito que Dios nos hace de su vida, infundida
por el Espíritu Santo en nuestra alma para curarla del pecado y santificarla.
2024 La
gracia santificante nos hace ‘agradables a Dios’. Los carismas, que son gracias
especiales del Espíritu Santo, están ordenados a la gracia santificante y
tienen por fin el bien común de la Iglesia. Dios actúa así mediante gracias actuales múltiples
que se distinguen de la gracia habitual, que es permanente en nosotros.”
2025 El
hombre no tiene, por sí mismo, mérito ante Dios sino como consecuencia del
libre designio divino de asociarlo a la obra de su gracia. El mérito pertenece
a la gracia de Dios en primer lugar, y a la colaboración del hombre en segundo
lugar. El mérito del hombre retorna a Dios.
2026 La
gracia del Espíritu Santo, en virtud de nuestra filiación adoptiva, puede
conferirnos un verdadero mérito según la justicia gratuita de Dios. La caridad
es en nosotros la principal fuente de mérito ante Dios.
2027 Nadie
puede merecer la gracia primera que constituye el inicio de la conversión. Bajo
la moción del Espíritu Santo podemos merecer en favor nuestro y de los demás
todas las gracias útiles para llegar a la vida eterna, como también los
necesarios bienes temporales.”
2028 ‘Todos
los fieles... son llamados a la plenitud de la vida cristiana y a la perfección
de la caridad’ (LG 40). ‘La perfección cristiana sólo tiene un límite: el de no
tener límite’ (San Gregorio de Nisa, v. Mos.).
2029 ‘Si
alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame’
(Mt 16, 24).
|