Parte. Capítulo

 1     II.    35|       que tuvo don Quijote del desencanto de Dulcinea, con otros admirables
 2     II.    35| diligencias necesarias para su desencanto; pero ¿azotarme yo...? Abernuncio.~ ~
 3     II.    35|      mejor decir, esperando su desencanto, que aún le falta la cola
 4     II.    36|      que había de hacer por el desencanto de Dulcinea. Dijo que sí,
 5     II.    36|      echado mano de mí para el desencanto de Dulcinea del Toboso,
 6     II.    40|     barbas como lo soy para el desencanto de mi señora Dulcinea.~ ~ -
 7     II.    41|         claro entendió que del desencanto de Dulcinea hablaban; y
 8     II.    50| Dulcinea en el concierto de su desencanto (que tenía bien olvidado
 9     II.    59|       que te has de dar por el desencanto de Dulcinea; que es lástima
10     II.    60|  habían de hacer y tener en el desencanto de Dulcinea. Desesperábase
11     II.    60|     podría suceder ahora en el desencanto de Dulcinea, si yo azotase
12     II.    62|     escudero? ¿Tendrá efeto el desencanto de Dulcinea?~ ~ -A lo de
13     II.    62|     Sancho irán de espacio; el desencanto de Dulcinea llegará a debida
14     II.    63|        él tuvo por cierta, del desencanto de Dulcinea. Allí iba y
15     II.    63|       señores, y acabar con el desencanto de Dulcinea! Pues con la
16     II.    63|    azotes eran aquéllos, o qué desencanto de Dulcinea, cuando dijo
17     II.    67|     pensamientos: unos iban al desencanto de Dulcinea, y otros a la
18     II.    68|        buena cuenta de los del desencanto de Dulcinea; y esto rogando
19     II.    69|    estás obligado a dar por el desencanto de Dulcinea. Ahora, digo,
20     II.    70|   había hecho con la traza del desencanto de Dulcinea, que había de
21     II.    71|        paga por los azotes del desencanto de Dulcinea, ya te la hubiera
22     II.    72|      al cielo que estuviera su desencanto de vuesa merced en darme
23     II.    74|      su deseo en la libertad y desencanto de Dulcinea le tenía de