Parte. Capítulo

 1      I.     4|   muestre que es tuerta de un ojo y que del otro le mana bermellón
 2      I.    12|     consentimiento, sin tener ojo a la ganancia y granjería
 3      I.    16| cogote, de nariz roma, del un ojo tuerta y del otro no muy
 4      I.    22|      que al mirar metía el un ojo en el otro un poco. Venía
 5      I.    22|      aquella manera, hizo del ojo a los compañeros, y apartándose
 6     II.     5|       y sé que no mira de mal ojo a la mochacha; y con éste,
 7     II.     6|      poderosos navíos, y cada ojo como una gran rueda de molino
 8     II.    19|    punta de una espada por el ojo de una aguja.~ ~ -Yo me
 9     II.    21|     cada una debe de valer un ojo de la cara. ¡Oh, hi de puta,
10     II.    23|   ellos, ninguno ha pegado el ojo, ni yo tampoco.~ ~ -Aquí
11     II.    25|       Pedro traía cubierto el ojo izquierdo y casi medio carrillo
12     II.    26|     que está sin narices y un ojo menos, que es de la hermosa
13     II.    27|       de Aragón y cubrirse el ojo izquierdo, acomodándose
14     II.    33|      vino, si dan por ella un ojo.~ ~ -Yo lo creo así -respondió
15     II.    43|      el que vee la mota en el ojo ajeno, vea la viga en el
16     II.    45|   antípodas, hacha del mundo, ojo del cielo, meneo dulce de
17     II.    47|     vuestro ingenio; abrid el ojo y mirad quién llega a hablaros,
18     II.    47|  tanto, porque le falta aquel ojo, que se le saltó de viruelas;
19     II.    49|       todo el mundo traiga el ojo alerta y mire por el virote;