Parte. Capítulo

 1      I.    11|         tenían. Sentáronse a la redonda de las pieles seis dellos,
 2      I.    11|      cuerno, porque andaba a la redonda tan a menudo (ya lleno,
 3      I.    12|       los de muchas leguas a la redonda, y de los mejores dellos,
 4      I.    13|      los caballeros de la Tabla Redonda, y pasaron, sin faltar un
 5      I.    13|      deseo, se le pusieron a la redonda, y él, leyendo en voz clara,
 6      I.    17| caballeros andantes de la Tabla Redonda, no le estimaran en dos
 7      I.    20|       resucitar los de la Tabla Redonda, los Doce de Francia y los
 8      I.    22|       uno se dé una vuelta a la redonda, y no hará poco.~ ~ -Hable
 9      I.    22|       se le pusieron todos a la redonda para ver lo que les mandaba,
10      I.    33|        es el que pudo hacer una redonda bala de artillería, cuando,
11      I.    37|      tinelo, porque no la había redonda ni cuadrada en la venta,
12     II.     8|      por mejor decir, claraboya redonda que está en su cima, desde
13     II.    18|   portal, y muchas tinajas a la redonda, que, por ser del Toboso,
14     II.    19|        otras muchas leguas a la redonda.~ ~ Preguntóle don Quijote
15     II.    32|         duda eran blancas), una redonda pella de jabón napolitano.
16     II.    42|         ínsula hecha y derecha, redonda y bien proporcionada, y
17     II.    45|          ni en seis leguas a la redonda, so pena de docientos azotes. ¡
18     II.    53|     todo en redondo, digo, a la redonda: la primavera sigue al verano,