Parte. Capítulo

 1      I.     2|        Mirábanle las mozas, y andaban con los ojos buscándole
 2      I.     9|    doncellas, de aquéllas que andaban con sus azotes y palafrenes,
 3      I.    11|      poseían. Entonces sí que andaban las simples y hermosas zagalejas
 4      I.    11|     doncellas y la honestidad andaban, como tengo dicho, por dondequiera,
 5      I.    15|      todas veces duerme), que andaban por aquel valle paciendo
 6      I.    22|       todos los galeotes, que andaban alborotados y habían despojado
 7      I.    23|     otras fieras que por allí andaban. Respondióle Sancho que
 8      I.    25| llamar unos zagales suyos que andaban en un barbecho de su padre,
 9      I.    26|      faldas de la camisa, que andaban colgando, y diole once ñudos,
10      I.    27|    que por aquellas soledades andaban, no dejó de admirarse algún
11      I.    28|  Fernando supo que mis padres andaban por darme estado, por quitalle
12      I.    28|   aquellos que de su parte me andaban buscando. Con este deseo
13      I.    32|    tiempo, cuando se dice que andaban por el mundo estos famosos
14      I.    33|      Anselmo; y desta manera, andaban tan a una sus voluntades,
15      I.    33|        que uno que los dos se andaban paseando por un prado fuera
16      I.    41|      saltado cuatro turcos, y andaban cogiendo la fruta, aunque
17      I.    44| puerta de la venta, y en ella andaban las puñadas y mojicones
18     II.    19|     por aquel agradable sitio andaban, unos bailando, y otros
19     II.    19|     el contento. Otros muchos andaban ocupados en levantar andamios,
20     II.    41|    mostaza, y los hombres que andaban sobre ella, poco mayores
21     II.    41|  tierra, sino los hombres que andaban sobre ella; y está claro
22     II.    46|      en el aposento ardían, y andaban buscando por do escaparse.
23     II.    46|   volviéndose a los gatos que andaban por el aposento, les tiró
24     II.    51|    como de sus dichos: porque andaban mezcladas sus palabras y
25     II.    62| fueron tantos, que de su boca andaban como colgados todos los
26     II.    63| pareció que todos los diablos andaban allí trabajando; pero esto