Parte. Capítulo

 1      I.    35|         gigante! ¡Ciertos son los toros: mi condado está de molde!~ ~ ¿
 2     II.    14|          piedras de los valientes Toros de Guisando, empresa más
 3     II.    14| movimiento a la Giralda, pesé los Toros de Guisando, despeñéme en
 4     II.    14|           por ver sin peligro los toros.~ ~ -La verdad que diga -
 5     II.    22|           de Córdoba, quiénes los Toros de Guisando, la Sierra Morena,
 6     II.    49|      Cuando oía decir que corrían toros y jugaban cañas, y se representaban
 7     II.    58|        que te harán pedazos estos toros!~ ~ -¡Ea, canalla -respondió
 8     II.    58|        Quijote - , para mí no hay toros que valgan, aunque sean
 9     II.    58|           y así, el tropel de los toros bravos y el de los mansos
10     II.    59|        del descomedimiento de los toros socorrió una fuente clara
11     II.    67|        fueron atropellados de los toros. Reconocióle don Quijote;