Parte. Capítulo

 1      I.     2|               parecieron dos hermosas doncellas o dos graciosas damas que
 2      I.     2|                cuanto más a tan altas doncellas como vuestras presencias
 3      I.     2|             mas como se oyeron llamar doncellas, cosa tan fuera de su profesión,
 4      I.     2|               nada en acompañar a las doncellas en las muestras de su contento.
 5      I.     2|           cual estaban desarmando las doncellas, que ya se habían reconciliado
 6      I.     2|               de su aldea vino:~ ~ ~ ~Doncellas curaban dél;~ ~ ~ ~Princesas,
 7      I.     3|           viudas, deshaciendo algunas doncellas y engañando a algunos pupilos,
 8      I.     3|               y con las dos ya dichas doncellas, se vino adonde don Quijote
 9      I.     9|              socorrer viudas, amparar doncellas, de aquéllas que andaban
10      I.    11|              quién fuese juzgado. Las doncellas y la honestidad andaban,
11      I.    11|           andantes, para defender las doncellas, amparar las viudas y socorrer
12      I.    14|         caballería, socorriendo a las doncellas menesterosas, puesta la
13      I.    19|           Unicornio; aquél, el de las Doncellas; aquéste, el del Ave Fénix;
14      I.    21|               más fermosas y acabadas doncellas que en gran parte de lo
15      I.    27|       acompañada de su madre y de dos doncellas suyas, tan bien aderezada
16      I.    28|              ejercicios que son a las doncellas tan lícitos como necesarios,
17      I.    29|              el estilo que tenían las doncellas cuitadas cuando pedían sus
18      I.    31|         andantes dar a los escuderos, doncellas o enanos que les llevan
19      I.    32|           cosas, y no está bien a las doncellas saber ni hablar tanto.~ ~ -
20      I.    50|            castillo un buen número de doncellas, cuyos galanos y vistosos
21      I.    50|            Qué verle servir todas las doncellas, guardando un maravilloso
22      I.    52|             tuertos, el amparo de las doncellas, el asombro de los gigantes
23     II.     1|              reinos, el amparo de las doncellas, el socorro de los huérfanos
24     II.     3| menospreciando reinas, emperatrices y doncellas de todas calidades, teniendo
25     II.     6|               grande amparador de las doncellas; mas tal te pudiera haber
26     II.     7|            huérfanos, la honra de las doncellas, el favor de las viudas
27     II.     9|           solazándose a solas con sus doncellas, como es uso y costumbre
28     II.    10|             Toboso, que con otras dos doncellas suyas viene a ver a vuesa
29     II.    10|               como quien ella es. Sus doncellas y ella todas son una ascua
30     II.    10|               Y no le van en zaga sus doncellas; que todas corren como el
31     II.    16|         socorriendo viudas, amparando doncellas y favoreciendo casadas,
32     II.    16|              favorezca viudas, ampare doncellas, ni honre casadas, ni socorra
33     II.    16|          pulir y adornar otras muchas doncellas, que son todas las otras
34     II.    20|        pareció bien otra que entró de doncellas hermosísimas, tan mozas,
35     II.    23|               hileras de hermosísimas doncellas, todas vestidas de luto,
36     II.    23|              Belerma, la cual con sus doncellas cuatro días en la semana
37     II.    26|        Melisendra, sino alguna de las doncellas que la servían; y así, con
38     II.    31|          patio, llegaron dos hermosas doncellas y echaron sobre los hombros
39     II.    31|             de oro y de brocado; seis doncellas le desarmaron y sirvieron
40     II.    31|            que, a no tener cuenta las doncellas que le servían con disimular
41     II.    31|         montera de raso verde que las doncellas le dieron, y con este adorno
42     II.    31|              sala, adonde halló a las doncellas puestas en ala, tantas a
43     II.    32|             manteles, llegaron cuatro doncellas, la una con una fuente de
44     II.    32|          poder disimular la risa; las doncellas de la burla tenían los ojos
45     II.    32|                   que yo haré que mis doncellas os laven, y aun os metan
46     II.    32|              tarde con ella y con sus doncellas en una muy fresca sala.
47     II.    33|          plática que la Duquesa y sus doncellas pasaron con Sancho Panza,
48     II.    33|       obedeció y sentóse, y todas las doncellas y dueñas de la Duquesa le
49     II.    35|             lágrimas de las afligidas doncellas, ni a los ruegos de discretos,
50     II.    36|         necesidades, el amparo de las doncellas, el consuelo de las viudas,
51     II.    37|               y más de las antiguas y doncellas; que aunque yo no lo soy,
52     II.    40|        caridad se hiciera por algunas doncellas recogidas, o por algunas
53     II.    44|               que escuderos, dueñas y doncellas había en su casa, que le
54     II.    44|               le han de servir cuatro doncellas de las mías, hermosas como
55     II.    44|              no poco se alegraron las doncellas, que otra cosa no deseaban
56     II.    44|   emperatrices? ¿Para qué la acosáis, doncellas de a catorce a quince años?
57     II.    45|              huérfanas menesterosas y doncellas, con esto se salió del juzgado,
58     II.    46|       concertó con el Duque y con sus doncellas de hacerle una burla que
59     II.    46|            amorosas ansias.~ ~ ~ ~Las doncellas recogidas~ ~ ~ ~Que aspiran
60     II.    48|             conciencia que de cuantas doncellas tiene mi señora, que no
61     II.    49|         contra el buen decoro que las doncellas principales deben guardar
62     II.    57|              entre las otras dueñas y doncellas de la Duquesa, que le miraban,
63     II.    57|            fuego en los pechos de las doncellas que os miran; y a la mía
64     II.    58|              fue además defendedor de doncellas. Veamos esta otra.~ ~ Descubrióla
65     II.    58|             vergüenza y recato de las doncellas se despuntan y embotan las
66     II.    58|             Arcadia, vistiéndonos las doncellas de zagalas y los mancebos
67     II.    58|            están son las más hermosas doncellas, y más corteses, que hay
68     II.    59|              príncipes, solicitado de doncellas; al cabo al cabo, cuando
69     II.    70|           principales y las recatadas doncellas atropellan por la honra,
70     II.    70|               se haya muerto; que las doncellas ocupadas más ponen sus pensamientos
71     II.    72|             viudas, el matador de las doncellas, el que tiene por única
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