Parte. Capítulo

 1      I.    19|     jumento, y tendidos sobre la verde yerba, con la salsa de su
 2      I.    19|        estaban estaba colmado de verde y menuda yerba, lo que se
 3      I.    20|          dormir un poco sobre la verde yerba, a uso de caballeros
 4      I.    24|    hicieron, y él los llevó a un verde pradecillo que a la vuelta
 5      I.    25|         su redondez un prado tan verde y vicioso que daba contento
 6      I.    27|      unos corpiños de terciopelo verde guarnecidos con unos ribetes
 7      I.    29|  mantellina de otra vistosa tela verde, y de una cajita, un collar
 8      I.    49|         a sus anchuras por aquel verde y apacible sitio, cuya frescura
 9      I.    49|      haberse sentado todos en la verde yerba para esperar el repuesto
10      I.    50|          de una alhombra y de la verde yerba del prado, a la sombra
11     II.     1|    vestida una almilla de bayeta verde, con un bonete colorado
12     II.     2|       las medias negras con seda verde.~ ~ -Eso -dijo don Quijote -
13     II.     8|    sentaron a labrar en el prado verde aquellas ricas telas que
14     II.    11|       paso se detenía a pacer la verde yerba de que aquellos campos
15     II.    13|          sino para ser ninfa del verde bosque. ¡Oh hi de puta,
16     II.    16|    vestido un gabán de paño fino verde, jironado de terciopelo
17     II.    16|     jineta, asimismo de morado y verde; traía un alfanje morisco
18     II.    16|  pendiente de un ancho tahalí de verde y oro, y los borceguíes
19     II.    16|         sino dadas con un barniz verde; tan tersas y bruñidas,
20     II.    16|         si mucho miraba el de lo verde a don Quijote, mucho más
21     II.    16|      miraba don Quijote al de lo verde, pareciéndole hombre de
22     II.    16|    Quijote de la Mancha el de lo verde fue que semejante manera
23     II.    16|          don Quijote, y el de lo verde, según se tardaba en responderle,
24     II.    16|         quien dude -respondió el Verde - que no son falsas las
25     II.    16|          lo que respondió el del Verde Gabán:~ ~ -Yo, señor Caballero
26     II.    16|            Admirado quedó el del Verde Gabán del razonamiento de
27     II.    17|       tomar mis armas.~ ~ El del Verde Gabán, que esto oyó, tendió
28     II.    17|         intento. Quisiera el del Verde Gabán oponérsele; pero viose
29     II.    17|         Quijote, Sancho y el del Verde Gabán prosiguieron el suyo.~ ~
30     II.    17|         llamaba el Caballero del Verde Gabán.~ ~ ~ ~
31     II.    18|         o casa del Caballero del Verde Gabán, con otras cosas extravagantes~ ~
32     II.    19|           en un lienzo de bocací verde envuelto, al parecer, un
33     II.    20|       vestidas todas de palmilla verde, los cabellos parte tranzados
34     II.    20|      yedra y de cáñamo teñido de verde, tan al natural, que por
35     II.    20|        corta así la seca como la verde yerba; y no parece que masca,
36     II.    21|     ricos corales, y la palmilla verde de Cuenca es terciopelo
37     II.    22|     arpillera del primo sobre la verde yerba, acudieron a la despensa
38     II.    23|        beca de colegial, de raso verde; cubríale la cabeza una
39     II.    25|         con un parche de tafetán verde, señal que todo aquel lado
40     II.    25|    pariría tres perricos, el uno verde, el otro encarnado y el
41     II.    30|          Quijote la vista por un verde prado, y en lo último dél
42     II.    30|       señora asimismo vestida de verde, tan bizarra y ricamente,
43     II.    31|       púsose una montera de raso verde que las doncellas le dieron,
44     II.    34|         de monte y a Sancho otro verde, de finísimo paño; pero
45     II.    34|      viéndose así, y que el sayo verde se le rasgaba, y pareciéndole
46     II.    35|          de pena por ver mi sayo verde roto, y vienen a pedirme
47     II.    36|          Ahí te envío un vestido verde de cazador, que me dio mi
48     II.    41|      salvajes, vestidos todos de verde yedra, que sobre sus hombros
49     II.    41|      hombre verídico.~ ~ -No soy verde, sino moreno -dijo Sancho - ;
50     II.    41|          de dos cordones de seda verde un pergamino liso y blanco,
51     II.    44|     tener allí un adarme de seda verde una onza de plata; digo
52     II.    44|         onza de plata; digo seda verde porque las medias eran verdes.~ ~
53     II.    46|        una montera de terciopelo verde, guarnecida de pasamanos
54     II.    47|          son jaspeados de azul y verde y aberenjenado; y perdóneme
55     II.    49|          redecilla de oro y seda verde, hermosa como mil perlas.
56     II.    58|          la yerba de un pradillo verde, encima de sus capas, estaban
57     II.    58|         entre unas redes de hilo verde, que desde unos árboles
58     II.    58|          como son hechas de hilo verde fueran de durísimos diamantes,
59     II.    58| coronaban con dos guirnaldas, de verde laurel y de rojo amaranto
60     II.    58|          camino que no lejos del verde prado estaba. Siguióle Sancho
61     II.    60|         años, vestido de damasco verde, con pasamanos de oro, gregüescos
62     II.    66|          sentaron sobre la yerba verde, y en buena paz compaña
63     II.    71|     rucio, se tendieron sobre la verde yerba, y cenaron del repuesto
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