Parte. Capítulo

 1      I.     3|           su huésped a sus pies y oyó semejantes razones, estaba
 2      I.    17|         Cuando el cuadrillero tal oyó, túvole por hombre falto
 3      I.    20|   llamarse suyo.~ ~ Cuando Sancho oyó las palabras de su amo comenzó
 4      I.    20|          Quijote, y más cuando le oyó decir, como por modo de
 5      I.    21|           mitad.~ ~ Cuando Sancho oyó llamar a la bacía celada
 6      I.    23|           despertó a las voces, y oyó que en ellas decía:~ ~ -¡
 7      I.    24|         Bosque, que de tal manera oyó hablar al de la Triste Figura,
 8      I.    24|        Cardenio estaba loco, y se oyó tratar de mentís y de bellaco,
 9      I.    27|         algún tanto, y más cuando oyó que le habían hablado en
10      I.    28|                Cuando Cardenio le oyó decir que se llamaba Dorotea,
11      I.    28|           también que mi doncella oyó entonces las palabras que
12      I.    28|          dignas de admiración.~ ~ Oyó Cardenio el nombre de Luscinda,
13      I.    29|     Admirada quedó Dorotea cuando oyó el nombre de su padre, y
14      I.    30|            la primera parte donde oyó nuevas de vuestra merced
15      I.    30|     Quijote, que tales blasfemias oyó decir contra su señora Dulcinea,
16      I.    36|         ser falso y mentiroso.~ ~ Oyó estas razones Cardenio bien
17      I.    36|          en medio; y así como las oyó, dando una gran voz dijo:~ ~ -¡
18      I.    36|         la había conocido a ella. Oyó asimesmo Cardenio el ¡ay!
19      I.    37|          Zoraida; y así como esto oyó ella, entendió lo que le
20      I.    44|         que entre los dos pasaban oyó el mozo de mulas junto a
21      I.    44|       acometer tan de improviso y oyó los vituperios que le decían,
22      I.    46|         al salir del aposento, se oyó una voz temerosa, todo cuanto
23      I.    47|        nosotros no lo sabemos.~ ~ Oyó don Quijote la plática,
24      I.    47| ocultarlos.~ ~ Cuando el Canónigo oyó hablar al preso y al libre
25      I.    50|       Casi estas últimas palabras oyó Sancho a su amo, a quien
26      I.    52|           señora enlutada, que no oyó palabra; y aunque la oyera,
27     II.     1|         pensar en ella.~ ~ Apenas oyó esto el Cura, cuando dijo
28     II.     7|        como vos.~ ~ Cuando Sancho oyó la firme resolución de su
29     II.    14|           veinte pasos, cuando se oyó llamar del de los Espejos,
30     II.    17|         del Verde Gabán, que esto oyó, tendió la vista por todas
31     II.    23|               Cuando Sancho Panza oyó decir esto a su amo, pensó
32     II.    24|          a beber un trago. Apenas oyó esto Sancho Panza, cuando
33     II.    27|    tercero, al subir de una loma, oyó un gran rumor de atambores,
34     II.    31|           en voz tan alta, que lo oyó la Duquesa; y volviendo
35     II.    31|              El eclesiástico, que oyó decir de gigantes, de follones
36     II.    34|         de sus ruedas; y luego se oyó otro, no ruido, sino un
37     II.    36|           de Sancho, a deshora se oyó el son tristísimo de un
38     II.    41|       carro del Sol, su padre!~ ~ Oyó Sancho las voces, y apretándose
39     II.    44|            y al abrirla, sintió y oyó que andaba y hablaba gente
40     II.    48|             La brumada dueña, que oyó conjurarse, por su temor
41     II.    50|         dentro hablaban; y cuando oyó la Duquesa que Rodríguez
42     II.    50|           el cura de modo que las oyó Sansón Carrasco, y Sansón
43     II.    51|       Quijote de la Mancha.»~ ~ ~ Oyó Sancho la carta con mucha
44     II.    53|  comenzaba a cerrar los párpados, oyó tan gran ruido de campanas
45     II.    53|           desta grande angustia!» Oyó el cielo su petición, y
46     II.    53|         cuando menos lo esperaba, oyó voces que decían:~ ~ -¡Vitoria,
47     II.    55|       mucho, especialmente cuando oyó que el rucio se quejaba
48     II.    55|     hondura; y estándola mirando, oyó grandes voces dentro; y
49     II.    56|          peligro de la muerte.~ ~ Oyó esto el valeroso don Quijote,
50     II.    56|     esposo.~ ~ El Duque, que esto oyó, estuvo por romper en risa
51     II.    59|         más que un sutil tabique, oyó decir don Quijote:~ ~ -Por
52     II.    59|           de la Mancha.~ ~ Apenas oyó su nombre don Quijote, cuando
53     II.    59|    escuchó lo que dél trataban, y oyó que el tal don Jerónimo
54     II.    63|    prudente y prevenido, así como oyó el primer bando de nuestro