Parte. Capítulo

 1      I.     1| imaginación, al fin le vino a llamar Rocinante, nombre, a su
 2      I.     1|     días, y al cabo se vino a llamar don Quijote; de donde, como
 3      I.     1|    que, sin duda, se debía de llamar Quijada, y no Quesada, como
 4      I.     2|  encubría; mas como se oyeron llamar doncellas, cosa tan fuera
 5      I.     4|       voz:~ ~ -Bien te puedes llamar dichosa sobre cuantas hoy
 6      I.     5|  Quijana -que así se debía de llamar cuando él tenía juicio y
 7      I.     5|    que otro día hizo, que fue llamar a su amigo el barbero maese
 8      I.    16| fermosa señora, que os podéis llamar venturosa por haber alojado
 9      I.    17|     las estacas, le comenzó a llamar, diciendo:~ ~ -Sancho amigo, ¿
10      I.    21|   mitad.~ ~ Cuando Sancho oyó llamar a la bacía celada no pudo
11      I.    21|      a buena fe que te han de llamar señoría, mal que les pese.~ ~ -
12      I.    23|      El otro, a quien podemos llamar el Roto de la Mala Figura (
13      I.    25|    del campanario del aldea a llamar unos zagales suyos que andaban
14      I.    26|     esto, y en suspirar, y en llamar a los faunos y silvanos
15      I.    29|  claro está que ella se ha de llamar así.~ ~ -No hay duda en
16      I.    30|    reino; el cual se había de llamar, si mal no me acuerdo, don
17      I.    33|     concertó que le enviase a llamar con muchas veras, para tener
18      I.    34|    Por qué no vas, Leonela, a llamar al más leal amigo de amigo
19      I.    34|   Leonela antes que saliese a llamar a Lotario; pero, en fin,
20      I.    43|       del Toboso; allí fue el llamar a su buen escudero Sancho
21      I.    43|     seáis, no tenéis para qué llamar a las puertas deste castillo;
22      I.    43|       que decís disparates en llamar castillo a esta venta.~ ~ -
23      I.    43|     pasaba, y así, tornaron a llamar con grande furia; y fue
24      I.    52|     aun te admirarás de oírte llamar Señoría de todos tus vasallos.~ ~ -¿
25     II.     3|  punto Sancho Panza - he oído llamar con don a mi señora Dulcinea,
26     II.     5|      buena razón me habían de llamar Teresa Cascajo, pero allá
27     II.     5|   ignorante (que así te puedo llamar, pues no entiendes mis razones
28     II.     7|       sorda, y cuando llega a llamar a las puertas de nuestra
29     II.     9|     gente? ¿Vamos por dicha a llamar a la casa de nuestras mancebas,
30     II.    13|    conozco que no es deshonra llamar hijo de puta a nadie, cuando
31     II.    14|   veinte pasos, cuando se oyó llamar del de los Espejos, y partiendo
32     II.    16|    Poesía (si es que se puede llamar ciencia), que no es posible
33     II.    16|      El cual Sancho, oyéndose llamar, dejó a los pastores, y
34     II.    17|     los requesones, comenzó a llamar a los que no dejaban de
35     II.    20|   sartén, si es que se podían llamar sartenes las tan orondas
36     II.    21|      y puesta la que se podía llamar empuñadura en el suelo,
37     II.    22|         No se pueden ni deben llamar engaños -dijo don Quijote -
38     II.    22|  tengo también, a quien he de llamar Metamorfóseos, o Ovidio
39     II.    27|      pueblo, y así, se pueden llamar con entrambos títulos; cuanto
40     II.    30|    Duquesa; la cual, haciendo llamar al Duque su marido, le contó,
41     II.    32|     pecado que se reprehende, llamar al pecador, sin más ni más,
42     II.    33|     con este nombre, le suelo llamar el rucio; y a esta señora
43     II.    36|     los encantadores la hacen llamar la Dueña Dolorida; bien
44     II.    38| miraron que por ella se debía llamar la Condesa Trifaldi, como
45     II.    50|  espérenme aquí; que yo iré a llamar quien la lea, ora sea el
46     II.    54|    que es tanto, que se puede llamar tesoro), y te daré con que
47     II.    55|    porque por lo que se podía llamar techo entraba un rayo de
48     II.    56|     ceguezuelo a quien suelen llamar de ordinario Amor por esas
49     II.    58|      ha sucedido hoy se puede llamar aventura, ello ha sido de
50     II.    58|       esto que el vulgo suele llamar comúnmente agüeros, que
51     II.    59|       sacó de lo que él solía llamar condumio; enjuagóse la boca,
52     II.    59|    fuera del uso que tenía de llamar a todas las ventas castillos.~ ~
53     II.    67|      barbero Nicolás se podrá llamar Niculoso, como ya el antiguo
54     II.    73|    Quijote que él se había de llamar el pastor Quijotiz; y el
Best viewed with any browser at 800x600 or 768x1024 on Tablet PC
IntraText® (VA2) - Some rights reserved by EuloTech SRL - 1996-2010. Content in this page is licensed under a Creative Commons License