Parte. Capítulo

 1      I.    Pr|           disparando en una larga risa, me dijo:~ ~ -Por Dios,
 2      I.    Pr|         el melancólico se mueva a risa, el risueño la acreciente,
 3      I.     2|   profesión, no pudieron tener la risa, y fue de manera que don
 4      I.     2|          mucha sandez, además, la risa que de leve causa procede;
 5      I.     2|           acrecentaba en ellas la risa, y en él el enojo, y pasara
 6      I.     2|        pero era materia de grande risa verle comer, porque, como
 7      I.     3|          poca para no reventar de risa a cada punto de las ceremonias;
 8      I.     3|           caballero les tenían la risa a raya. Al ceñirle la espada,
 9      I.     6|    echándolos del mundo.~ ~ Causó risa al Licenciado la simplicidad
10      I.     9|         dijese y él, sin dejar la risa, dijo:~ ~ -Está, como he
11      I.    14|        despojos.~ ~ ~ ~Antes, con risa en la ocasión funesta~ ~ ~ ~
12      I.    15|    pedagogo del alegre Dios de la risa, cuando entró en la Ciudad
13      I.    17|          esto cesaban ellos de su risa y de su obra, ni el volador
14      I.    20|     hinchados, y la boca llena de risa, con evidentes señales de
15      I.    20|          otras tantas volvió a su risa, con el mismo ímpetu que
16      I.    20|     sucedido no sea cosa digna de risa, pero no es digna de contarse;
17      I.    21|           celada no pudo tener la risa; mas vínosele a las mientes
18      I.    26|      Toboso.~ ~ ~ ~ No causó poca risa en los que hallaron los
19      I.    27|      aquel traje no pudo tener la risa. En efeto, el Barbero vino
20      I.    29|       gran cuenta de disimular la risa, y de que no se le cayese
21      I.    30|           palabras, que renovó la risa en todos.~ ~ -Ésta, señores -
22      I.    37|       donaire y brío, y con tanta risa como fuerza; y donde interviene
23      I.    43|        otra se fueron, muertas de risa, y le dejaron asido de manera,
24      I.    45|        esto materia de grandísima risa; pero para los que le ignoraban
25      I.    45|          no.~ ~ No menos causaban risa las necedades que decía
26      I.    52|           del suyo. Reventaban de risa el Canónigo y el Cura, saltaban
27      I.    52|           otras circunstancias de risa que notó y descubrió en
28      I.    52|          a reír muy de gana; cuya risa fue poner pólvora a la cólera
29     II.     1|           los presentes, por cuya risa se medio corrió el capellán;
30     II.    10|         de Sancho en disimular la risa, oyendo las sandeces de
31     II.    16|        habiendo sacado a plaza la risa de la profunda malencolía
32     II.    23|           el juicio, o morirse de risa; que como él sabía la verdad
33     II.    27|        por cosas que antes son de risa y pasatiempo que de afrenta,
34     II.    31|          servían con disimular la risa (que fue una de las precisas
35     II.    31|        los señores disimularon la risa, porque don Quijote no acabase
36     II.    32|        dijo mucho, impedido de la risa que su impertinente cólera
37     II.    32|          sus manos!~ ~ Perecía de risa la Duquesa en oyendo hablar
38     II.    32|     discreción poder disimular la risa; las doncellas de la burla
39     II.    32|           retozaba la cólera y la risa en el cuerpo, y no sabían
40     II.    32|         huéspedes.~ ~ Perecida de risa estaba la Duquesa viendo
41     II.    32|          esta sazón, sin dejar la risa, dijo la Duquesa:~ ~ -Sancho
42     II.    33|          pudo la Duquesa tener la risa oyendo la simplicidad de
43     II.    33|        renovaron en la Duquesa la risa y el contento; y enviándole
44     II.    38|    entenderemos.~ ~ Reventaban de risa con estas cosas los Duques,
45     II.    38|           almas, el retozar de la risa, el desasosiego de los cuerpos,
46     II.    44|           y espera dos fanegas de risa, que te ha de causar el
47     II.    44|        desplegarás los labios con risa de jimia, porque los sucesos
48     II.    44|    celebrar con admiración, o con risa. Cuéntase, pues, que apenas
49     II.    45| circunstantes, ésta les provocó a risa; pero, en fin, se hizo lo
50     II.    49|               Todo eso es cosa de risa -respondió el mozo - . El
51     II.    54|          Di!, y disparaba con una risa que le duraba un hora, sin
52     II.    56|         oyó, estuvo por romper en risa toda su cólera, y dijo:~ ~ -
53     II.    70|         los enamorados es cosa de risa: bien lo pueden ellos decir;