Parte. Capítulo

 1     II.    18|          de entrar en la cueva de Montesinos, de quien tantas y tan admirables
 2     II.    22|           aventura de la cueva de Montesinos, que está en el corazón
 3     II.    22|          encaminase a la cueva de Montesinos, porque tenía gran deseo
 4     II.    22|     derrota de la famosa cueva de Montesinos.~ ~ En el camino preguntó
 5     II.    22|          desde allí a la cueva de Montesinos no había más de dos leguas,
 6     II.    22|         del campo. ¡Oh desdichado Montesinos! ¡Oh mal ferido Durandarte! ¡
 7     II.    23|           en la profunda cueva de Montesinos, cuya imposibilidad y grandeza
 8     II.    23|     oyentes lo que en la cueva de Montesinos había visto, y comenzó en
 9     II.    23|      entrado, llamada la cueva de Montesinos: hazaña sólo guardada para
10     II.    23|     perpetua, porque soy el mismo Montesinos, de quien la cueva toma
11     II.    23|            Apenas me dijo que era Montesinos, cuando le pregunté si fue
12     II.    23|        así, digo que el venerable Montesinos me metió en el cristalino
13     II.    23|       antes que preguntase nada a Montesinos, viéndome suspenso mirando
14     II.    23|          dijo:~ ~ «-¡Oh, mi primo Montesinos!~ ~ ~ ~Lo postrero que os
15     II.    23|       Oyendo lo cual el venerable Montesinos, se puso de rodillas ante
16     II.    23|          seco y amojamado. Díjome Montesinos como toda aquella gente
17     II.    23|         yo entonces - , señor don Montesinos: cuente vuesa merced su
18     II.    23|    satisfación que me dio el gran Montesinos se quietó mi corazón del
19     II.    23|          maravillas que me mostró Montesinos (las cuales despacio y a
20     II.    23|     salida del Toboso? Pregunté a Montesinos si las conocía; respondióme
21     II.    23|          se encontró con el señor Montesinos, que tal nos le ha vuelto.
22     II.    23|      hiciera, si no me aconsejara Montesinos que no me cansase en ello,
23     II.    23|        fue que estándome diciendo Montesinos estas razones, se llegó
24     II.    23|            y volviéndome al señor Montesinos, le pregunté: «-¿Es posible,
25     II.    23|    pregunté: «-¿Es posible, señor Montesinos, que los encantados principales
26     II.    24|           aventura de la cueva de Montesinos, en el margen dél estaban
27     II.    24|         encierra en esta cueva de Montesinos, con las mutaciones de Guadiana
28     II.    24|        que estuvo hablando con él Montesinos, él despertó diciendo: «
29     II.    24|         que cuenta de la cueva de Montesinos? Ahora bien, ello dirá.»~ ~
30     II.    25|     merced le pasó en la cueva de Montesinos; que yo para mí tengo, con
31     II.    25|       había pasado en la cueva de Montesinos habían sido soñadas, o verdaderas;
32     II.    25|           en una cueva llamada de Montesinos, si fueron falsas, o verdaderas.~ ~
33     II.    29|        había visto en la cueva de Montesinos; que, puesto que el mono
34     II.    33|         lo que vio en la cueva de Montesinos, donde dice que vio a la
35     II.    33|           que dice de la cueva de Montesinos, que gustaría saberlo.~ ~
36     II.    34|      había contado de la cueva de Montesinos, para hacerle una que fuese
37     II.    34|           con el gallardo francés Montesinos, a dar orden a don Quijote
38     II.    34|           pero valiente caballero Montesinos, mandándome que de su parte
39     II.    34|       había pasado en la cueva de Montesinos. Y estando elevado en estos
40     II.    35|    Dulcinea volverá a la cueva de Montesinos y a su prístino estado de
41     II.    35|           amo un recado del señor Montesinos, mandándole de su parte
42     II.    35|      hasta agora no hemos visto a Montesinos, ni a sus semejas.~ ~ A
43     II.    35|        amo, pero no con recado de Montesinos, sino mío; porque Montesinos
44     II.    35|      Montesinos, sino mío; porque Montesinos se está en su cueva entendiendo,
45     II.    36|       Hemos estado en la cueva de Montesinos, y el sabio Merlín ha echado
46     II.    41|          lo que vi en la cueva de Montesinos. Y no os digo más.~ ~ ~ ~
47     II.    48| compuestas, ora te tenga Merlín o Montesinos donde ellos quisieren; que
48     II.    55|          cueva de aquel encantado Montesinos, donde halló quien le regalase
49     II.    59|           sucedido en la cueva de Montesinos, con la orden que el sabio
50     II.    60|           hallarse en la cueva de Montesinos; ya ver brincar y subir
51     II.    62|        que me pasó en la cueva de Montesinos? ¿Serán ciertos los azotes
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