Parte. Capítulo

 1      I.    Pr|    libro; que, puesto que a la clara se vea la mentira, por la
 2      I.     3| menester escrebir una cosa tan clara y tan necesaria de traerse
 3      I.    13|  redonda, y él, leyendo en voz clara, vio que así decía:~ ~ ~ ~
 4      I.    26|     para qué enturbiar el agua clara destos arroyos, los cuales
 5      I.    28|     venían, con voz reposada y clara comenzó la historia de su
 6      I.    34|       para ver desde allí a la clara la poca lealtad que ella
 7      I.    36|    estas razones Cardenio bien clara y distintamente, como quien
 8      I.    39| quedaron vivos, señal cierta y clara de su esfuerzo y valor,
 9      I.    41|     una pequeña esquila, señal clara que por allí cerca había
10      I.    42|        a cuyo lado dormía doña Clara de Viedma, que ansí se llamaba
11      I.    43|        verla procuro.~ ~ ~ ¡Oh clara y luciente estrella~ ~ ~ ~
12      I.    43|       no sería bien que dejase Clara de oír una tan buena voz;
13      I.    43|       oído en toda tu vida.~ ~ Clara despertó toda soñolienta,
14      I.    43|      por lo cual estuvo atenta Clara; pero apenas hubo oído dos
15      I.    43|    señor de lugares -respondió Clara - , y el que le tiene en
16      I.    43|        Habláis de modo, señora Clara, que no puedo entenderos:
17      I.    43|        en buen hora -respondió Clara.~ ~ Y por no oílle, se tapó
18      I.    43|    principio a nuevos sollozos Clara; todo lo cual encendía el
19      I.    43|       decir denantes. Entonces Clara, temerosa de que Luscinda
20      I.    43|        digáis más, señora doña Clara -dijo a esta sazón Dorotea,
21      I.    43|          Ay señora! -dijo doña Clara - , ¿qué fin se puede esperar,
22      I.    43|    cuán como niña hablaba doña Clara, a quien dijo:~ ~ -Reposemos,
23      I.    44|        traía el amante de doña Clara. El ventero respondió que
24      I.    44| levantaban, especialmente doña Clara y Dorotea, que la una con
25      I.    44|     aposento, y tras ella doña Clara, toda turbada; y llamando
26      I.    44|  historia del músico y de doña Clara; a quien él también dijo
27      I.    44| callando, que lo dejase de oír Clara; de lo que quedó tan fuera
28      I.    44|      yo viese a mi señora doña Clara, hija vuestra y señora mía,
29      I.    44|  Porque vean vuestras mercedes clara y manifiestamente el error
30      I.    45|        resultare daré entera y clara noticia.~ ~ Para aquellos
31      I.    45|     Luscinda, suspensa; y doña Clara, desmayada. El barbero aporreaba
32      I.    46|    recibió tanto contento doña Clara, que ninguno en aquella
33     II.     1|    adivinos. Véese esta verdad clara, porque después acá un famoso
34     II.     3|       Sansón - ; porque es tan clara, que no hay cosa que dificultar
35     II.     7|      por el orín y el moho que clara y limpia por el terso acero.
36     II.    18|     cristiana ley que profesa, clara y distintamente, adonde
37     II.    32|     más limpias, con lejía mas clara y con manos no tan sucias;
38     II.    34|        vino la noche, y no tan clara ni tan sesga como la sazón
39     II.    47|        de una doncella llamada Clara Perlerina, hija de Andrés
40     II.    59|      toros socorrió una fuente clara y limpia que entre una fresca
41     II.    62|      mover los labios, con voz clara y distinta, de modo, que
42     II.    69|  tocaba, cantó con suavísima y clara voz estas dos estancias:~ ~ ~ -
43     II.    70|   Agora sí que vengo a conocer clara y distintamente que hay