Parte. Capítulo

 1     II.    28| lágrimas a los ojos, y con voz dolorida y enferma, le dijo:~ ~ -
 2     II.    36| imaginada aventura de la dueña dolorida, alias de la Condesa Trifaldi,
 3     II.    36|        nombre llamada la Dueña Dolorida, de parte de la cual traigo
 4     II.    36|       la hacen llamar la Dueña Dolorida; bien podéis, estupendo
 5     II.    37|    famosa aventura de la dueña Dolorida~ ~ En extremo se holgaron
 6     II.    37|       entendieron que la Dueña Dolorida entraba. Preguntó la Duquesa
 7     II.    38|       su mala andanza la Dueña Dolorida~ ~ Detrás de los tristes
 8     II.    38|        por medio de la cual la Dolorida se adelantó, sin dejarla
 9     II.    38|    criada; porque según soy de dolorida, no acertaré a responder
10     II.    38|      de romper, y fue la Dueña Dolorida, con estas palabras:~ ~ -
11     II.    38|   encaminando sus razones a la Dolorida Dueña, dijo:~ ~ -Si vuestras
12     II.    38|   dellos.~ ~ Oyendo lo cual la Dolorida Dueña hizo señal de querer
13     II.    39|     mandándole que callase, la Dolorida prosiguió diciendo:~ ~ -
14     II.    39|        pase adelante la señora Dolorida; que a mí se me trasluce
15     II.    39|    ahora veréis.~ ~ Y luego la Dolorida y las demás dueñas alzaron
16     II.    40|      Sancho vio desmayada a la Dolorida, dijo:~ ~ -Por la fe de
17     II.    40|       Es el caso -respondió la Dolorida - que desde aquí al reino
18     II.    40|           Riéronse todos, y la Dolorida prosiguió:~ ~ -Y este tal
19     II.    40|         preguntó Sancho.~ ~ La Dolorida respondió:~ ~ -Dos personas,
20     II.    40|       Querría yo saber, señora Dolorida -dijo Sancho - , qué nombre
21     II.    40|        El nombre -respondió la Dolorida - no es como el caballo
22     II.    40|      Ay! -dijo a esta sazón la Dolorida - .Con benignos ojos miren
23     II.    41|        donde habían venido. La Dolorida, así como vio al caballo,
24     II.    41|        faldriquera, pidió a la Dolorida que le cubriese muy bien
25     II.    41|       No hay para qué -dijo la Dolorida - ; que yo le fío y sé que
26     II.    41|        nombre llamada la dueña Dolorida, y compañía, con sólo intentarla.»~ ~ «
27     II.    41|   Sancho andaba mirando por la Dolorida, por ver qué rostro tenía
28     II.    41|        la aventura de la Dueña Dolorida, que dio que reír a los
29     II.    42|    suceso de la aventura de la Dolorida quedaron tan contentos los
30     II.    44|        está, es el mesmo de la Dolorida.~ ~ Miró don Quijote atentamente
31     II.    44|    decir); que el rostro de la Dolorida es el del mayordomo, pero
32     II.    44|     por eso el mayordomo es la Dolorida; que a serlo, implicaría
33     II.    52|   aventura de la segunda dueña dolorida, o angustiada, llamada por