Índice | Palabras: Alfabética - Frecuencia - Inverso - Longitud - Estadísticas | Ayuda | Biblioteca IntraText
Ioannes Paulus PP. II
Ecclesia in Africa

IntraText CT - Texto

Anterior - Siguiente

Pulse aquí para desactivar los vínculos a las concordancias

82. La dignidad del hombre y de la mujer deriva del hecho de que, al crear Dios el ser humano, « a imagen de Dios le creó, varón y mujer los creó » (Gn 1, 27). Tanto el hombre como la mujer han sido creados « a imagen de Dios », es decir, dotados de inteligencia y voluntad y, consecuentemente, de libertad. Lo demuestra el relato del pecado de los primeros padres (cf. Gn 3). El salmista canta así la dignidad incomparable del hombre: « Lo hiciste poco inferior a los ángeles, lo coronaste de gloria y dignidad, le diste el mando sobre las obras de tus manos, todo lo sometiste bajo sus pies » (Sal 8, 6-7).

Creados el uno y el otro a imagen de Dios, el hombre y la mujer, aunque diferentes, son esencialmente iguales desde el punto de vista de su humanidad. « Ambos desde el comienzo son personas, a diferencia de los demás seres vivientes del mundo que los circunda. La mujer es otro "yo" en la humanidad común » 159 y cada uno es una ayuda para el otro (cf. Gn 2, 18-25).

« Creando al hombre "varón y mujer", Dios da la dignidad personal de igual modo al hombre y a la mujer, enriqueciéndolos con los derechos inalienables y con las responsabilidades que son propias de la persona humana ».160 El Sínodo ha deplorado las costumbres africanas y las prácticas « que privan a las mujeres de sus derechos y del respeto que les es debido »,161 y ha pedido que la Iglesia en el continente se esfuerce en promover la salvaguardia de tales derechos.

 

Dignidad y papel del Matrimonio




Anterior - Siguiente

Índice | Palabras: Alfabética - Frecuencia - Inverso - Longitud - Estadísticas | Ayuda | Biblioteca IntraText

IntraText® (V89) Copyright 1996-2007 EuloTech SRL