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| Ioannes Paulus PP. II Familiaris Consortio IntraText - Concordancias (Hapax Legomena) |
Parte, Capítulo, Párrafo
1 III, 2,35(97) | Paolo II, II, 2 (1979), 1035, cfr. también Discurso a 2 IV, 3,76(172) | Paolo II, III, I (1980), 1042.~ 3 IV, 3,76(177) | Paolo II, III, 1 (1980), 1044.~ 4 IV, 4,84(180) | de 1980): AAS 72 (1980), 1082.~ 5 III, 2,34(95) | de 1980): AAS 72 (1980), 1083.~ 6 III, 1,26(76) | del 1979): AAS 71(1979), 1159.~ 7 III, 4,58(148) | misericordia, 13: AAS 72 (1980), 1218 s.~ 8 III, 4,52(126) | tradendae, 68: AAS 71 (1979), 1334.~ 9 IV, 3,75(170) | Paolo II, III, 2 (1980), 1453 s.~ 10 II, 0,13(30) | Amplissima Collectio, 33, 149 s.~ 11 III, 1,25(69) | Exameron, V, 7, 19: CSEL 32, I, 154.~ 12 III, 4,61(155) | cultus, 52-54: AAS 66 (1974), 160 s.~ 13 II, 0,16(42) | virginitas, II: AAS 46 (1954), 174 ss.~ 14 II, 0,16(42) | virginitas, II: AAS 46 (1954), 174 ss.~ 15 IV, 4,78(178) | Matrimonia mixta, 4-5: AAS 62 (1970), 257 ss. Juan Pablo II, 16 III, 4,61(155) | Marialis cultus, 52-54: AAS 66 (1974), 160 s.~ 17 III, 1,26 | plena en las dimensiones del 2000 que se acerca?».(76)~La 18 IV, 4,78(178) | mixta, 4-5: AAS 62 (1970), 257 ss. Juan Pablo II, Discurso 19 III, 1,25(72) | de 1981): AAS 73 (1981), 268-271.~ 20 III, 1,25(72) | 1981): AAS 73 (1981), 268-271.~ 21 III, 1,18(45) | hominis, 10: AAS 71 (1979) 274.~ 22 III, 2,37 | esenciales de la vida humana~37. Aun en medio de las dificultades, 23 III, 2,38 | sacramento del matrimonio~38. Para los padres cristianos 24 II, 0,13(29) | II, VIII, 6-8: CCL, I, 393.~ 25 I, 0,5(13) | Ecclesiae, 2: AAS 65 (1973), 398-400.~ 26 I, 0,5(13) | Ecclesiae, 2: AAS 65 (1973), 398-400.~ 27 II, 0,16(43) | de 1979): AAS 71 (1979), 410 s.~ 28 III, 1,19(47) | de 1980): AAS 72 (1980), 426 s.~ 29 III, 3,43 | comunión y participación~43. La misma experiencia de 30 IV, 3,76(171) | de 1969): AAS 61 (1969), 455.~ 31 IV, 3,76(175) | Sociales: AAS 61 (1969), 456.~ 32 I, 0,4(8) | Paolo II, III, 1 (1980), 472-476.~ 33 I, 0,4(8) | Paolo II, III, 1 (1980), 472-476.~ 34 III, 2,32(87) | vitae, 7: AAS 60 (1968), 485.~ 35 III, 2,33(94) | Ibid., 21: l.c., 496.~ 36 IV, 4,78(179) | de 1972): AAS 64 (1972), 518-525; Nota del 17 de octubre 37 IV, 4,78(179) | 1972): AAS 64 (1972), 518-525; Nota del 17 de octubre 38 III, 4,53 | Un servicio eclesial~53. El ministerio de evangelización 39 III, 1,27(79) | Paolo II, III, 2 (1980), 539.~ 40 II, 0,16(38) | La Virginidad, X: PG 48, 540.~ 41 III, 4,55 | doméstico de la Iglesia~55. El anuncio del Evangelio 42 III, 4,57 | Matrimonio y Eucaristía~57. El deber de santificación 43 IV, 4,78(179) | de 1973: AAS 65 (1973), 616-619.~ 44 IV, 4,78(179) | 1973: AAS 65 (1973), 616-619.~ 45 III, 1,23(66) | exercens, 19 AAS 73 (1981), 625.~ 46 III, 4,63 | nuevo mandamiento del amor~63. La Iglesia, pueblo profético, 47 III, 4,60(152) | di Paolo VI, XIV (1976), 640.~ 48 IV, 1,67 | Celebración~67. El matrimonio cristiano 49 IV, 1,69 | Pastoral postmatrimonial~69. El cuidado pastoral de 50 IV, 3,74 | Religiosos y religiosas~74. La ayuda que los religiosos, 51 IV, 3,75 | Laicos especializados~75. No poca ayuda pueden prestar 52 IV, 3,76 | de la comunicación social~76. Una palabra aparte se ha 53 III, 4,62(158) | de 1978): AAS 70 (1978), 767.~ 54 IV, 4,77 | Circunstancias particulares~77. Es necesario un empeño 55 IV, 4,79 | situaciones irregulares~79. En su solicitud por tutelar 56 IV, 4,80 | a) Matrimonio a prueba~80. Una primera situación irregular 57 IV, 4,81 | Uniones libres de hecho~81. Se trata de uniones sin 58 IV, 4,82 | con mero matrimonio civil~82. Es cada vez más frecuente 59 IV, 4,83 | divorciados no casados de nuevo~83. Motivos diversos, como 60 IV, 4,84 | Divorciados casados de nuevo~84. La experiencia diaria enseña, 61 IV, 4,85 | Los privados de familia~85. Deseo añadir una palabra 62 Conclu, 0,86 | 86. A vosotros esposos, a vosotros 63 IV, 4,84 | los bautizados, no puede abandonar a sí mismos a quienes —unidos 64 III, 1,20 | matrimonial y que se mofa abiertamente del compromiso de los esposos 65 IV, 2,70 | sostenidas, multiplicadas y estén abiertas, naturalmente, también a 66 III, 4,63 | soberana libertad, y por su abnegación y santa vida venzan en sí 67 Intro, 0,2 | cierto sentido, con el que abordó el tema del sacerdocio ministerial 68 IV, 3,74 | por medio de la castidad abrazada por el Reino de los cielos, 69 Conclu, 0,86 | tribulaciones de la vida, abriéndose generosamente a las necesidades 70 III, 3,44 | todas sus formas, desde el abrir la puerta de la propia casa, 71 IV, 4,84 | de la penitencia —que les abriría el camino al sacramento 72 III, 1,23 | tarea de esposa y madre, sin abrirla adecuadamente a las funciones 73 IV, 4,83 | recíprocas, incapacidad de abrise a las relaciones interpersonales, 74 IV, 4,84 | plena continencia, o sea de abstenerse de los actos propios de 75 I, 0,10 | privadas de tecnología, abundan en sabiduría humana y están 76 III, 1,25 | o sea, la superioridad abusiva de las prerrogativas masculinas 77 IV, 3,76 | para asegurarse que no sean abusivamente olvidados o expresamente 78 III, 2,30 | aumento de bienes materiales, acaban por no comprender, y por 79 II, 0,13 | para la Iglesia, de lo que acaeció en la cruz; son el uno para 80 IV, 1,68 | menos de manera implicita— acatan lo que la Iglesia tiene 81 III, 1,23 | los hombres, el derecho de acceder a las diversas funciones 82 III, 1,23 | justifican plenamente el acceso de la mujer a las funciones 83 III, 2,30 | hombre y al mundo de cuantos acechan y rebajan la vida.~La Iglesia 84 IV, 4,80 | humana insinúa ya su no aceptabilidad, indicando que es poco convincente 85 II, 0,11 | que el hombre y la mujer aceptan la comunidad íntima de vida 86 IV, 1,66 | pastores de almas a que acepten las convenientes disposiciones, 87 IV, 3,73 | dificultades y sufrimientos, acercándose a sus miembros, ayudándoles 88 IV, 4,81 | concretas, caso por caso; se acercarán a los que conviven, con 89 III, 4,52 | que la familia cristiana acoge el Evangelio y madura en 90 III, 4,51 | esta manera reconocen y acogen libremente la vocación a 91 III, 2,33 | sexualidad: el don del Espíritu, acogido y correspondido por los 92 IV, 1,69 | cercana a los padres para que acojan a sus hijos y los amen como 93 Intro, 0,1 | ninguna otra institución, la acometida de las transformaciones 94 III, 2,34 | gracia de Cristo, ayudados y acompañados por los pastores de almas 95 IV, 1,65 | debe seguir a la familia, acompañándola paso a paso en las diversas 96 III, 4,53 | catequesis de los padres debe acompañar la vida de los hijos también 97 IV, 1,68 | también las razones que aconsejan a la Iglesia admitir a la 98 IV, 3,76 | manipulado, como desgraciadamente acontece en diversos países del mundo— 99 III, 4,60 | comunión, confirmación? ¿Los acostumbráis, si están enfermos, a pensar 100 III, 2,39 | además, de su vocación, acostúmbrense a dar testimonio de la esperanza 101 III, 2,30 | el hombre contemporáneo acrecienta continuamente en su dominio 102 III, 1,27(79) | International Forum on Active Aging», 5 (5 de septiembre 103 I, 0,7 | familiar y como sujetos activos de la construcción de un 104 IV, 3,76 | informadores, comentaristas y actores».(177) Por consiguiente, 105 I | SOMBRAS DE LA FAMILIA~EN LA ACTUALIDAD~ 106 IV, 4,84 | la Iglesia, significada y actualizada en la Eucaristía. Hay además 107 II, 0,15 | cuna y el lugar donde puede actuar la propia inserción en las 108 IV, 1,69 | familias cristianas— se actuará un mutuo intercambio de 109 IV, 4,77 | la bondad y la cordura acumulada y las energías que quedan; 110 III, 1,21 | comunión sobrenatural que acumuna y vincula a los creyentes 111 III, 1,25 | hace suya la exclamación de Adán, el primer esposo: «Esta 112 III, 4,61 | la plegaria cristiana, se adapta a las diversas exigencias 113 IV, 1,69 | como las creadas por la adaptación a la vida en común o por 114 III, 2,39 | que se prepare un texto adecuado de catecismo para las familias 115 IV, 4,81 | situación. Pero, sobre todo, adelántense enseñándoles a cultivar 116 IV, 1,66 | disponibilidad financiera, sabia administración, nociones de economía doméstica, 117 II, 0,16 | hace la virginidad más admirable y luminosa. Lo que aparece 118 III, 4,51 | La fe, descubrimiento y admiración del plan de Dios sobre la 119 III, 4,51 | ellos pueden descubrir y admirar con gozosa gratitud a qué 120 IV, 4,84 | ellos los que no pueden ser admitidos, dado que su estado y situación 121 IV, 4,84 | otro motivo pastoral: si se admitieran estas personas a la Eucaristía, 122 IV, 4,82 | de la Iglesia no podrán admitirles al uso de los sacramentos.~ 123 IV, 1,68 | pastor de almas no puede admitirlos a la celebración. Y, aunque 124 IV, 3,76 | valorizar el tiempo libre de los adolescentes y orientar sus energías».(174)~ 125 III, 4,56 | También los laicos, como adoradores que en todo lugar actúan 126 IV, 1,65 | la pastoral de la familia adquiera consistencia y se desarrolle, 127 III, 2,33 | responsabilidad. Los padres adquieren así la capacidad de un influjo 128 IV, 1,66 | los hijos, favoreciendo la adquisición de los elementos de base 129 III, 1,25 | testimonio de vida cristiana adulta, que introduzca más eficazmente 130 II, 0,12 | prostitución,(25) la infidelidad es adulterio, la desobediencia a la ley 131 IV, 1,69 | sociedad humana. Cuando, por el advenimiento de los hijos, la pareja 132 IV, 4,78 | de la Declaración Nostra aetate del Concilio Ecuménico Vaticano 133 III, 4,54 | animada interiormente por el afán misionero, ya que es de 134 IV, 1,68 | es un acontecimiento que afecte solamente a quien se casa. 135 IV, 4,77 | menudo más psicológica y afectiva que física, por el eventual 136 III, 2,33 | que las manifestaciones afectivas de la vida conyugal estén 137 IV, 4,85 | Corazón de Cristo, dignas del afecto y solicitud activa de la 138 III, 2,39 | cristianos en su tarea de afianzar en el alma de los hijos 139 III, 2,29(83) | Encíclica Humanae vitae afirma: «La Iglesia, al exigir 140 IV, 4,81 | psicológicos en los hijos y afirmación del egoísmo).~Los pastores 141 III, 1,22 | vivientes de Dios. Como han afirmado justamente los Padres Sinodales, 142 III, 2,30 | Al «no» que invade y aflige al mundo, contrapone este « 143 III, 2,35(97) | Internacional de la Familia de Africa y de Europa, 1 s. (15 de 144 IV, 4,84 | católicos, el problema debe afrontarse con atención improrrogable. 145 III, 1,27(79) | International Forum on Active Aging», 5 (5 de septiembre de 146 III, 1,25 | hacia ti y sé para con ella agradecido por su amor».(69) El hombre 147 III, 1,27 | mayor no ha subscrito con agrado las palabras inspiradas " 148 III, 2,37 | dificultades, hoy a menudo agravadas, de la acción educativa, 149 IV, 3,76 | niños y muchachos de las "agresiones" que sufren también por 150 III, 2,33 | peligros del egoísmo y de la agresividad, y sabe promoverlo hacia 151 IV, 2,72 | que recordar las diversas agrupaciones de fieles, en las que se 152 III, 1,27 | que son fuente a la vez de agudos sufrimientos para ellos 153 II, 0,16 | gloria; en cambio, quien lo alaba, hace la virginidad más 154 III, 1,20 | el Sínodo de los Obispos, alabo y aliento a las numerosas 155 III, 2,35 | alegra de los resultados alcanzados por las investigaciones 156 III, 2,34 | mero ideal que se puede alcanzar en el futuro, sino que deben 157 IV, 4,77 | drogados; las familias de alcoholizados; las desarraigadas de su 158 III, 2,35 | mientras la Iglesia se alegra de los resultados alcanzados 159 IV, 4,84 | que también quienes se han alejado del mandato del Señor y 160 III, 4,54 | su amor incluso para los «alejados», para las familias que 161 I, 0,9 | permanente, que, aunque exija el alejamiento interior de todo mal y la 162 III, 4,59 | de los padres, partidas, alejamientos y regresos, elecciones importantes 163 III, 2,40 | ayudar a los jóvenes a no alejarse de la fe. En este caso la 164 IV, 2,70 | Estas iniciativas sean alentadas, sostenidas, multiplicadas 165 III, 4,58 | miembros de la familia son alentados al encuentro con Dios «rico 166 III, 2,39 | un miembro de la Iglesia, alentará a los padres cristianos 167 I, 0,8 | ciencia está llamada a ser aliada de la sabiduría.~Por tanto 168 III, 2,35 | de fertilidad femenina y alienta a una más decisiva y amplia 169 III, 1,20 | de los Obispos, alabo y aliento a las numerosas parejas 170 III, 4,61 | medio privilegiado para alimentar la comunión de amor de la 171 Conclu, 0,86 | pies de la Cruz, la que alivie los sufrimientos y enjugue 172 IV, 4,81 | familiar cristiano que pueda allanarles el camino hacia la regularización 173 III, 2,31 | representa un servicio singular, altamente meritorio, a la familia 174 III, 2,32 | sin manipulaciones ni alteraciones.(90)~A la luz de la misma 175 III, 2,32 | propia persona del cónyuge, alterando su valor de donación «total». 176 III, 2,40 | tanto a los padres de los alumnos como a la formación de una 177 III, 1,20 | con la Iglesia su esposa, amada por Él hasta el fin.(54)~ 178 Conclu, 0,86 | vosotros, venerables Hermanos y amadísimos hijos, y abran vuestros 179 III, 1,20 | con que Dios y Jesucristo aman a todos los hombres y a 180 III, 2,41 | familias, sosteniéndoles y amándoles no como extraños, sino como 181 III, 1,24 | mentalidad produce frutos muy amargos, como el desprecio del hombre 182 IV, 4,77 | depender de otros, por la amargura de sentirse como un peso 183 II, 0,13 | y a la mujer capaces de amarse como Cristo nos amó. El 184 I, 0,6 | cónyuges entre sí; las graves ambigüedades acerca de la relación de 185 III, 2,30 | de aquel «Sí», de aquel «Amén» que es Cristo mismo.(84) 186 IV, 2,71 | los que a menudo se ven amenazados, con su gradual y responsable 187 Conclu, 0,86 | peligros y males que la amenazan, para poder superarlos. 188 III, 1,25 | de la mujer: «No eres su amo —escribe san Ambrosio— sino 189 I, 0,6 | un conflicto entre dos amores: el amor de Dios llevado 190 III, 4,50 | esposos, ya por la cooperación amorosa de todos sus miembros».(119)~ 191 III, 2,28 | específicamente humana: se amplía y se enriquece con todos 192 IV, 1,65 | más cercanas, sino que, ampliando los propios horizontes en 193 II, 0,13(30) | Sacrorum Conciliorum Nova et Amplissima Collectio, 33, 149 s.~ 194 IV, 1,66 | comunicar en este camino de fe, análogo al catecumenado, debe haber 195 IV, 1,67 | las culturas o tradiciones ancestrales, se sigan los principios 196 IV, 4,77 | Iglesia el período de la ancianidad, con todos sus contenidos 197 II, 0,13 | bendición sella, que los ángeles anuncian y que el Padre 198 Conclu, 0,86 | tentada por el desánimo y angustiada por las dificultades crecientes, 199 Conclu, 0,86 | la familia, se dirige con anhelante solicitud mi pensamiento 200 IV, 3,76 | categorías de personas, animando y sosteniendo al mismo tiempo 201 III, 2,33 | cesa nunca de invitar y animar, a fin de que las eventuales 202 IV, 4,84 | Iglesia rece por ellos, los anime, se presente como madre 203 III, 4,59 | nacimientos y cumpleaños, aniversarios de la boda de los padres, 204 Conclu, 0,86 | transcurrió una existencia anónima y silenciosa en un pequeño 205 III, 3,43 | capaces de sacar al hombre del anonimato, de mantenerlo consciente 206 IV, 3,73 | Evangelio. No es superfluo anotar que de esta misión, si se 207 Intro, 0,1 | la incertidumbre o de la ansiedad, busca la verdad y a todo 208 IV, 4,83 | eventualmente la vida conyugal anterior.~Parecido es el caso del 209 III, 2,30 | mentalidad contra la vida (anti-life mentality), como se ve en 210 II, 0,16 | eterna. La persona virgen anticipa así en su carne el mundo 211 III, 1,26 | niños, primavera de la vida, anticipo de la historia futura de 212 I, 0,6 | verdadera y propia mentalidad anticoncepcional.~En la base de estos fenómenos 213 III, 2,30 | los cuales imponen medios anticonceptivos o métodos aún peores. Otros 214 IV, 1,66 | familias mismas las que, según antiguas usanzas, transmiten a los 215 III, 4,52 | lugares donde una legislación antirreligiosa pretende incluso impedir 216 IV, 3,76 | divorcio o de actitudes antisociales por parte de los jóvenes— 217 III, 2,32 | profundizar la diferencia antropológica y al mismo tiempo moral, 218 II, 0,13 | bendición sella, que los ángeles anuncian y que el Padre ratifica? ... ¡ 219 III, 4,51 | cometido profético acogiendo y anunciando la Palabra de Dios. Se hace 220 III, 1,23 | idéntica responsabilidad. Aparecerá así más espléndida la imagen 221 III, 4,64 | verdaderamente irreprochable y aparezca como tal, es necesario ver 222 III, 1,22 | seguimiento y amistad, su aparición la mañana de Pascua a una 223 III, 1,27 | el anciano; lejos de ser apartado de la familia o de ser soportado 224 IV, 4,78 | pueden reducirse a tres apartados principales.~Hay que considerar 225 I, 0,8 | el «nuevo humanismo» no apartará a los hombres de su relación 226 IV, 3,76 | comunicación social~76. Una palabra aparte se ha de reservar a esta 227 III, 2,35 | estudios, no puede menos de apelar, con renovado vigor, a la 228 III, 4,56 | que los caracterizan, se aplican las palabras del Concilio: « 229 IV, 3,76 | erotismo o de violencia, de apología del divorcio o de actitudes 230 III, 1,21 | a los padres, los hijos aportan su específica e insustituible 231 III, 2,33 | de valores espirituales: aportando a la vida familiar frutos 232 IV, 4,85 | base o en los movimientos apostólicos. Nadie se sienta sin familia 233 III, 4,60 | pensamiento y de la acción, apoyado por alguna oración común 234 III, 3,44 | la conozca mejor y se la apoye más decididamente, sobre 235 III, 2,32 | de la sincera intención y apreciación de los motivos, sino que 236 IV, 4,77 | de la propia voluntad, o apremiados por otras exigencias de 237 Conclu, 0,86 | camino, que la Iglesia ha aprendido en la escuela de Cristo 238 III, 3,46 | mediante instituciones y leyes apropiadas, contra los medicamentos 239 III, 3,46 | y a tener los recursos apropiados para mantenerla; a ejercer 240 IV, 4,81 | disposiciones para una vivienda apta a la vida familiar y creando 241 IV, 3,76 | contrario, se difundan programas aptos para presentar en su justa 242 | aquello 243 II, 0,16 | edificar la fidelidad de aquéllos.(43)~Estas reflexiones sobre 244 III, 4,54 | principio del cristianismo Aquila y Priscila se presentaban 245 III, 2,33 | ciertamente ni la autora ni el árbitro. En obediencia a la verdad 246 III, 2,32 | sexual, se comportan como «árbitros» del designio divino y « 247 III, 2,33 | situación, a menudo muy ardua y a veces verdaderamente 248 III, 2,34 | llamadas sin embargo a una armonía de mentalidad y de comportamiento. 249 II, 0,11 | personales, para cuyo crecimiento armonioso es necesaria la contribución 250 III, 3,43 | una mayor sabiduría y a armonizar los derechos de las personas 251 III, 4,53 | íntima comunión y ha de armonizarse responsablemente con los 252 III, 4,54 | con nueva fuerza el deber arraigado en el bautismo y en la confirmación 253 III, 1,20 | la vida y a cuantos son arrastrados por una cultura que rechaza 254 IV, 4,84 | darse únicamente a los que, arrepentidos de haber violado el signo 255 III, 4,58 | sacramento del matrimonio.~El arrepentimiento y perdón mutuo dentro de 256 III, 2,40 | una acción más amplia y articulada, fruto de la colaboración 257 III, 2,33 | ningún género de duda una ascética, para que las manifestaciones 258 III, 2,34 | unidad debe ser buscada y asegurada cuidadosamente, para que 259 Intro, 0,3 | matrimonio y la familia, asegurando su plena vitalidad, así 260 Conclu, 0,86 | irradia sobre cada familia.~Asegurándoos mi constante recuerdo en 261 IV, 3,74 | colaboración en la enseñanza y asesoramiento para la preparación de los 262 III, 2,39 | que pueda ser fácilmente asimilado por todos. Las conferencias 263 III, 4,61 | Oficio divino.(154) Pondrán asimismo cuidado las familias cristianas 264 IV, 4,78 | varias partes del mundo se asiste hoy al aumento del número 265 IV, 3,75 | médicos, juristas, psicólogos, asistentes sociales, consejeros, etc.) 266 IV, 4,77 | cuanto sea posible estén asistidos por sacerdotes de su mismo 267 III, 2,40 | posible mediante formas de asociación familiar, debe con todas 268 IV, 3,74 | perfección, individualmente o asociados, desarrollen su servicio 269 II, 0,13 | sentimiento y de la afectividad, aspiración del espíritu y de la voluntad—; 270 III, 1,26 | de los deberes y de las aspiraciones de la nación a la que pertenecen, 271 III, 4,62 | que la familia cristiana asuma y ponga en práctica plenamente 272 II, 0,13 | Creador,(31) es elevada y asumida en la caridad esponsal de 273 III, 2,41 | y que infunde ánimo para asumirlas y darles respuesta. En este 274 III, 3,44 | llamada «política familiar», y asumirse la responsabilidad de transformar 275 III, 3,47 | de Dios gestionando los asuntos temporales y ordenándolos 276 III, 3,46 | servicio de la familia, la ataca con violencia en sus valores 277 III, 1,21 | tensiones, los conflictos atacan con violencia y a veces 278 IV, 4,81 | incertidumbre o el temor de atarse con un vínculo estable y 279 III, 1,25 | mujer... Devuélvele sus atenciones hacia ti y sé para con ella 280 III, 3,45 | están gravemente obligados a atenerse al principio de subsidiaridad.~ 281 IV, 4,79 | ha dejado de considerar atentamente algunas situaciones irregulares, 282 II, 0,12 | El mismo pecado que puede atentar contra el pacto conyugal 283 IV, 4,81 | del concepto de familia, atenuación del sentido de fidelidad 284 III, 2,41 | solícita paternidad de Dios, atestiguada por los padres cristianos, 285 III, 2,33 | y a veces verdaderamente atormentada por dificultades de todo 286 Conclu, 0,86 | el cometido pesado pero atractivo de la familia cristiana, 287 IV, 4,80 | quieren hoy justificar, atribuyéndole un cierto valor. La misma 288 IV, 3,73 | de la importancia que yo atribuyo a la pastoral de la familia 289 III, 4,60(152) | Discurso en la Audiencia general (11 de agosto de 290 IV, 4,77 | están obligados a largas ausencias, como los militares, los 291 III, 2,37 | estilo de vida sencillo y austero, convencidos de que «el 292 Conclu, 0,86 | cada vez mejor las palabras auténticas que le revelan su identidad, 293 III, 1,22 | el criterio moral de la autenticidad de las relaciones conyugales 294 I, 0,6 | como una fuerza autónoma de autoafirmación, no raramente contra los 295 III, 2,33 | además en la educación al autocontrol; de ahí la absoluta necesidad 296 I, 0,6 | familia, sino como una fuerza autónoma de autoafirmación, no raramente 297 III, 1,27 | aun debiendo respetar la autonomía de la nueva familia— y sobre 298 III, 2,35 | cooperación al amor de Dios, autor de la vida humana».(98)~ 299 III, 2,33 | no es ciertamente ni la autora ni el árbitro. En obediencia 300 I, 0,9 | un proceso dinámico, que avanza gradualmente con la progresiva 301 III, 3,47 | marginados. Por eso la familia, avanzando en el seguimiento del Señor 302 IV, 4,78 | sea fortalecida en su fe y ayudada positivamente a madurar 303 IV, 1,69 | recibir, sino que a su vez, ayudadas así, serán fuente de enriquecimiento 304 IV, 4,78 | católico debe además ser ayudado con todos los medios en 305 IV, 3,73 | hermano, pastor y maestro, ayudándolas con los recursos de la gracia 306 III, 2,38 | sacramento del matrimonio ayudará a los padres cristianos 307 III, 2,36 | eso mismo la obligación de ayudarla eficazmente a vivir una 308 IV, 4,83 | en la que se encuentra; ayudarle a cultivar la exigencia 309 IV, 4,85 | nivel político, que permitan ayudarles a superar esta condición 310 IV, 3,73 | de la Iglesia de modo que ayude al pueblo de Dios a formarse 311 IV, 4,84 | comunidad de los fieles para que ayuden a los divorciados, procurando 312 IV, 4,81 | b) Uniones libres de hecho~ 313 III, 2,37 | delicada. Ante una cultura que «banaliza» en gran parte la sexualidad 314 III, 1,21 | la reconciliación y en el banquete del único Cuerpo de Cristo 315 III, 1,27 | el carisma de romper las barreras entre las generaciones antes 316 III, 2,38 | cristianos la misión educativa, basada como se ha dicho en su participación 317 III, 2,41 | estrechando esos lazos que se basan en el espíritu y que se 318 III, 2,37 | educativo de los padres debe basarse sobre una cultura sexual 319 III, 3,46 | planes de Dios, es célula básica de la sociedad, sujeto de 320 IV, 4,78 | secularizadas, la persona no bautizada no profesa religión alguna. 321 IV, 4,78 | de ellos, el cónyuge no bautizado profesa otra religión, y 322 IV, 4,78 | las propias posibilidades, bautizar y educar los hijos en la 323 III, 3,44 | Cristo: «El que diere de beber a uno de estos pequeños 324 III, 2,28 | don de la vida humana: «Y bendíjolos Dios y les dijo: " Sed fecundos 325 III, 4,64 | todo en el interior y en beneficio de la pareja y la familia, 326 I, 0,9 | de ejercer una influencia beneficiosa y renovadora incluso en 327 III, 2,33 | en virtud de su influjo beneficioso, los cónyuges desarrollan 328 IV, 3,76 | pueden ejercer un influjo benéfico en la vida y las costumbres 329 III, 2,31 | vez mejor los fundamentos bíblicos, las motivaciones éticas 330 III, 4,52 | la esperanza de la vida bienaventurada».(125)~La absoluta necesidad 331 II, 0,16 | incluso corporalmente, de las bodas escatológicas de Cristo 332 III, 4,60 | acontecimientos de la vida no lograrán borrar. Escuchemos de nuevo la 333 III, 2,39 | para las familias claro, breve y que pueda ser fácilmente 334 I, 0,5 | la virtud del evangelio brille en la vida diaria familiar 335 III, 4,56 | recibida, del mismo sacramento brotan también la gracia y el compromiso 336 III, 2,34 | sacerdotes: tal unidad debe ser buscada y asegurada cuidadosamente, 337 III, 4,54 | testimonio» a iluminar «a los que buscan la verdad».(133)~Así como 338 IV, 4,82 | de un eventual divorcio. Buscando el reconocimiento público 339 II, 0,16 | grande, es más, que hay que buscarlo como el único valor definitivo. 340 III, 4,61 | Rosario en familia .... no cabe duda de que el Rosario a 341 IV, 1,68 | conciencia de los esposos; se caería en el peligro de contestar 342 III, 4,60 | propio sacerdocio real, calan profundamente en el corazón 343 IV, 3,76 | prudente de tales medios, calculando el influjo que ejercen sobre 344 IV, 3,75 | compromiso que bien merece la calificación de misión, por lo noble 345 III, 2,41 | esos niños, encontrando el calor afectivo de una familia, 346 IV, 1,66 | educación o iniciación. Pero los cambios que han sobrevenido en casi 347 I, 0,10 | inculturación» como se camina hacia la reconstitución 348 Conclu, 0,86 | hacia el cual está caminando la historia.~A Cristo, a 349 IV, 4,77 | tratándose de obreros y campesinos, deben tener la posibilidad 350 II, 0,13(30) | Trident., Sessio XXIV, can. 1: I. D. Mansi, Sacrorum 351 Conclu, 0,86 | familias, esté presente como en Caná, en cada hogar cristiano 352 IV, 4,84 | destruido un matrimonio canónicamente válido. Finalmente están 353 IV, 1,66 | prematrimonial exigido por el derecho canónico. De todos modos, siendo 354 III, 2,33 | Madre.~Como Maestra, no se cansa de proclamar la norma moral 355 III, 3,47 | todas sus implicaciones, capacita y compromete a los esposos 356 III, 2,28 | del matrimonio, tienden a capacitar a los esposos para cooperar 357 I, 0,4 | frecuencia por una potente y capilar organización de los medios 358 IV, 1,69 | de todos para transfundir capilarmente aquellos valores cristianos, 359 III, 2,31 | Iglesia en este importante capítulo sea verdaderamente accesible 360 III, 4,56 | terrenas y temporales que los caracterizan, se aplican las palabras 361 III, 3,43 | participación, que debe caracterizar la vida diaria de la familia, 362 IV, 4,85 | de relaciones y la grave carencia de cultura no permiten poder 363 IV, 1,66 | prometidos que presenten aún carencias y dificultades en la doctrina 364 IV, 4,85 | cuantos están fatigados y cargados.(181)~ 365 IV, 4,85 | autoridades, por razón de sus cargos y consecuentes responsabilidades, 366 III, 1,27 | en los ojos, palabras y caricias de los ancianos! y ¡cuánta 367 III, 2,41 | pueden experimentar la cariñosa y solícita paternidad de 368 I, 0,5 | de los diferentes dones y carismas que junto y según la responsabilidad 369 IV, 4,81 | paciente, de corrección caritativa y de testimonio familiar 370 IV, 1,66 | cambios que han sobrevenido en casi todas las sociedades modernas 371 IV, 1,66 | camino de fe, análogo al catecumenado, debe haber también un conocimiento 372 IV, 1,66 | catequesis, como en un camino catecumenal— una preparación más específica 373 IV, 1,66 | sólida formación espiritual y catequística, que sepa mostrar en el 374 IV, 4,78 | sean bautizados y educados católicamente. El cónyuge católico debe 375 IV, 4,77 | Aunque la parte fiel al catolicismo no puede ceder, no obstante, 376 III, 2,30 | aún peores. Otros todavía, cautivos como son de la mentalidad 377 II, 0,13(29) | Ad uxorem, II, VIII, 6-8: CCL, I, 393.~ 378 IV, 4,77 | al catolicismo no puede ceder, no obstante, hay que mantener 379 IV, 4,84 | dar la impresión de que se celebran nuevas nupcias sacramentalmente 380 IV, 1,67(167) | Cfr. Ordo celebrandi matrimonium, 17.~ 381 III, 4,56 | Jesucristo y en la Iglesia. Celebrándolo, los cónyuges cristianos 382 III, 4,51 | diverso protagonistas y celebrantes, debe ser una «profesión 383 III, 4,61 | las familias cristianas en celebrar, incluso en casa y de manera 384 III, 4,63 | fe la Palabra de Dios, a celebrarla y profesarla en los sacramentos 385 III, 4,57 | que habitualmente éste se celebre «dentro de la Misa».(144) 386 IV, 1,68 | toda mujer que se casan, celebren el sacramento del matrimonio 387 II, 0,16 | virginidad~16. La virginidad y el celibato por el Reino de Dios no 388 II, 0,12 | Por esta razón, la palabra central de la Revelación, «Dios 389 III, 1,26 | querido poner al niño en el centro del Reino de Dios: «Dejad 390 III, 2,37 | tanto en casa como en los centros educativos elegidos y controlados 391 III, 2,33 | Por esto, la Iglesia no cesa nunca de invitar y animar, 392 III, 3,46 | la familia y la sociedad choca a menudo, y en medida bastante 393 III, 2,37 | y conflictos a causa del choque entre los diversos individualismos 394 II, 0,14 | proviene toda paternidad en el cielo y en la tierra».(36)~Sin 395 III, 2,32 | los datos de las diversas ciencias humanas, la reflexión teológica 396 III, 2,35 | por las investigaciones científicas para un conocimiento más 397 III, 2,30 | En efecto, el progreso científico-técnico, que el hombre contemporáneo 398 | ciertas 399 III, 4,64 | desarrollarse luego dentro del círculo más amplio de la comunidad 400 IV, 4,78(179) | Instr. In quibus rerum circumstantiis (15 de junio de 1972): AAS 401 Conclu, 0,86 | importancia de su misión en la Ciudad de los hombres y en la de 402 IV, 4,77 | familias que en las grandes ciudades viven prácticamente marginadas; 403 I, 0,9 | pueblos, es más, la misma civilización, partiendo de lo que han 404 I, 0,6(16) | Cfr. S. Agustín, De Civitate Dei, XIV, 28: CSEL 40 II, 405 IV, 3,73 | Magisterio jerárquico. Relaciones claras entre los teólogos, los 406 III, 2,29 | reafirma y propone de nuevo con claridad la doctrina y la norma siempre 407 III, 1,27 | de los ancianos ayuda a clarificar la escala de valores humanos; 408 IV, 1,65 | Hay que llevar a cabo toda clase de esfuerzos para que la 409 III, 3,43 | comunitarias más amplias en un clima de respeto, justicia, diálogo 410 III, 4,63 | encuentra su ley no en un código escrito, sino en la acción 411 IV, 4,81 | después de un período de cohabitación y después del nacimiento 412 III, 4,58 | Tampoco la familia es siempre coherente con la ley de la gracia 413 III, 4,54 | cristianas que no viven coherentemente la fe recibida. Está llamada « 414 III, 1,25 | sino que la promueva en su cohesión y estabilidad, un testimonio 415 I, 0,5 | la verdad que no siempre coincide con la opinión de la mayoría. 416 III, 3,43 | las distintas generaciones coinciden y se ayudan mutuamente a 417 III, 1,21(60) | Cfr. Ef 6, 1-4; Col 3, 20 s.~ 418 III, 3,43 | personalización de la sociedad: colabora de manera original y profunda 419 II, 0,13(30) | Conciliorum Nova et Amplissima Collectio, 33, 149 s.~ 420 III, 4,61 | familia cristiana, que ha sido colocada entre los grupos a los que 421 I, 0,7 | valores fundamentales y colocarse como conciencia crítica 422 III, 4,60 | del misterio de Dios y del coloquio personal con Él: «Sobre 423 I, 0,6 | de libertad, más aún, un combate entre libertades que se 424 IV, 3,76 | dramaturgos, informadores, comentaristas y actores».(177) Por consiguiente, 425 II, 0,16 | aparece un bien solamente en comparación con un mal, no es un gran 426 III, 2,38 | que santo Tomás no duda en compararlo con el ministerio de los 427 IV, 1,69 | servicio recíproco, en la comparticipación activa a la vida de familia.~ 428 III, 1,25 | educativo más solícito y compartido con la propia esposa,(74) 429 III, 2,41 | Señor Jesús sigue teniendo «compasión» de las multitudes.~ 430 I, 0,10 | el doble principio de la compatibilidad con el Evangelio de las 431 III, 3,47 | social propia de cada familia compete, por un título nuevo y original, 432 IV, 1,66 | seres dotados de una rica y compleja psicología y de una personalidad 433 III, 1,23 | diferentes aspectos del amplio y complejo tema de las relaciones mujer-sociedad, 434 III, 2,31 | también de los múltiples y complejos problemas que hoy, en muchos 435 III, 3,45 | sociedad tienen una función complementaria en la defensa y en la promoción 436 III, 2,40 | todo inalienable.~Pero como complementario al derecho, se pone el grave 437 III, 1,19 | conyugal hunde sus raíces en el complemento natural que existe entre 438 III, 1,21 | escuela de humanidad más completa y más rica»:(59) es lo que 439 IV, 2,72 | otras instituciones que completan la educación de los hijos, 440 IV, 1,68 | preparación a la misma pueden completar y llevar a cabo, dada la 441 I, 0,10 | conocimiento cada día más completo y profundo de la verdad, 442 IV, 1,69 | todos los elementos que componen la comunidad eclesial local 443 III, 4,54 | sucede cuando alguno de los componentes de la misma no tiene fe 444 IV, 3,73 | para este apostolado, deben comportarse constantemente, con respecto 445 III, 1,24 | como cosa, como objeto de compraventa, al servicio del interés 446 III, 2,34 | En semejante contexto se comprende cómo no se puede quitar 447 IV, 3,73 | familia. De esta manera se comprenden mejor las enseñanzas del 448 IV, 2 | realidad de la Iglesia, comprometida en su misión de salvación. 449 IV, 1,66 | indicativos— deben sentirse comprometidas la familia cristiana y toda 450 IV, 2,72 | eclesiales, grupos y movimientos comprometidos de distintas maneras, por 451 III, 4,61 | excelentes y eficaces oraciones comunes que la familia cristiana 452 III, 3,43 | terrorismo—, la familia posee y comunica todavía hoy energías formidables 453 III, 4,52 | evangelizados. Los padres no sólo comunican a los hijos el Evangelio, 454 III, 4,63 | al hombre: «Este poder lo comunicó a sus discípulos, para que 455 III, 1,25 | y padre~25. Dentro de la comunión-comunidad conyugal y familiar, el 456 III, 3,43 | estímulo para las relaciones comunitarias más amplias en un clima 457 III, 4,58 | misericordia de Dios, que se concede en el Sacramento de la Penitencia».(146)~ 458 III, 2,32 | en resumidas cuentas dos concepciones de la persona y de la sexualidad 459 IV, 4,81 | sociales (destrucción del concepto de familia, atenuación del 460 IV, 4,78 | derivan de la fe, en lo concerniente al libre ejercicio de la 461 IV, 2,72 | de la Iglesia, formar las conciencias según los valores cristianos 462 III, 4,61 | los hijos. Las directrices conciliares han abierto una nueva posibilidad 463 II, 0,13(30) | 1: I. D. Mansi, Sacrorum Conciliorum Nova et Amplissima Collectio, 464 III, 2,32 | significado procreador».(88) Y concluyó recalcando que hay que excluir, 465 III, 4,53 | estar, de amor, sencillez, concreción y testimonio cotidiano.(127)~ 466 II, 0,11 | su forma propia, son una concretización de la verdad más profunda 467 IV, 3,73 | de fe genuina y lo que no concuerda con ella; la familia, como 468 IV, 3,76 | olvidados o expresamente conculcados aquellos valores humanos 469 IV, 4,80 | por temor— a dominar la concupiscencia naciente e instaurar con 470 III, 2,30 | Por consiguiente, hay que condenar totalmente y rechazar con 471 III, 2,30 | promoción de los pueblos esté condicionada a programas de anticoncepcionismo, 472 IV, 4,81 | ignorancia y pobreza, a veces por condicionamientos debidos a situaciones de 473 IV, 1,66 | de base para una ordenada conducción de la familia (trabajo estable, 474 I, 0,9 | misterio de Cristo, sean conducidos pacientemente más allá hasta 475 III, 1,19 | la purifica y la eleva conduciéndola a perfección con el sacramento 476 I, 0,8 | relación con Dios, sino que los conducirá a ella de manera más plena.~ 477 Intro, 0,2 | humana en desarrollo y a conducirla a la plena madurez humana 478 III, 4,63 | Cristo también en los demás, conduzcan con humildad y paciencia 479 Intro, 0,2 | más, el reciente Sínodo conecta idealmente, en cierto sentido, 480 IV, 3,75 | exhortaciones que dirigí a la Confederación de los Consultores familiares 481 III, 4,60 | sacramentos de la primera edad: confesión, comunión, confirmación? ¿ 482 III, 2,39 | conciencia de que el Señor confía a ellos el crecimiento de 483 III, 1,22 | otros discípulos, la misión confiada a las mujeres de llevar 484 Conclu, 0,86 | integérrimo de los tesoros a él confiados, las guarde, proteja e ilumine 485 III, 2,34 | divino con ánimo sereno, confiando en la gracia divina y en 486 III, 2,40 | el derecho inviolable de confiar sus hijos a la comunidad 487 IV, 3,73 | los que eventualmente se confíe el cuidado de este sector 488 III, 4,57 | raíz de la que brota, que configura interiormente y vivifica 489 III, 2,39 | Pe 3, 15) y a ayudar a la configuración cristiana del mundo».(102)~ 490 III, 4,54 | Cristo «hasta los últimos confines de la tierra»,(131) como 491 III, 1,19 | La unidad matrimonial confirmada por el Señor aparece de 492 III, 4,61 | uno de los fieles, como ha confirmado claramente el Concilio Vaticano 493 I, 0,6 | expresión de san Agustín, un conflicto entre dos amores: el amor 494 IV, 2,72 | según los métodos naturales conformes con la dignidad humana y 495 III, 2,33 | de la reconciliación.(93) Confortados así, los esposos cristianos 496 III, 2,31 | cultural que muy a menudo es confusa y contradictoria. La aportación 497 IV, 4,84 | serían inducidos a error y confusión acerca de la doctrina de 498 I, 0,5(13) | Lumen gentium, 12; Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe, 499 III, 4,59 | Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy 500 III, 2,35(97) | los Participantes en el Congreso Internacional de la Familia