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Ioannes Paulus PP. II Familiaris Consortio IntraText - Concordancias (Hapax Legomena) |
Parte, Capítulo, Párrafo
501 III, 2,32 | que «cuando se trata de conjugar el amor conyugal con la 502 III, 4,56 | santificación, y, por tanto, conjuntamente, a la glorificación de Dios».(139)~ 503 IV, 4,77 | patria. Esta es una tarea connatural a la Iglesia, dado que es 504 IV, 3,74 | fieles aquel maravilloso connubio, fundado por Dios y que 505 Conclu, 0,86 | Ellos, que mediante la fe conocen plenamente el designio maravilloso 506 III, 0,17 | para la familia, si quiere conocerse y realizarse según la verdad 507 I, 0,6 | entre sí, es decir, según la conocida expresión de san Agustín, 508 IV, 1,66 | paternidad responsable, con los conocimientos médico-biológicos esenciales 509 III, 3,44 | originalidad, que exige se la conozca mejor y se la apoye más 510 III, 2,38 | del matrimonio, que los consagra a la educación propiamente 511 III, 4,56 | están fortificados y como consagrados por un sacramento especial, 512 IV, 4,78 | ejercicio de la misma y a la consecuente obligación de procurar, 513 IV, 4,85 | por razón de sus cargos y consecuentes responsabilidades, así como 514 IV, 3,73 | tanto, su enseñanza y sus consejos deben estar siempre en plena 515 III, 3,44 | ambiente natural que la conserva y la hace crecer. Sobre 516 III, 1,21 | comunión familiar puede ser conservada y perfeccionada sólo con 517 II, 0,11 | Creándola a su imagen y conservándola continuamente en el ser, 518 IV, 4,83 | manera que le sea posible conservar la fidelidad, incluso en 519 II, 0,16 | aún que bienes por todos considerados tales, es ciertamente un 520 III, 2,34 | el futuro, sino que deben considerarla como un mandato de Cristo 521 IV, 4,85 | por voluntad deliberada— considero especialmente cercanas al 522 IV, 3,75 | de ellas... Todo lo que consigáis hacer en apoyo de la familia 523 | consigo 524 IV, 4,80 | amor genuino. Esto no se consigue sin una verdadera educación 525 IV, 4,77 | ideológicamente divididas; las que no consiguen tener fácilmente un contacto 526 II, 0,13 | que no sólo las purifica y consolida, sino que las eleva hasta 527 III, 1,27 | generaciones antes de que se consoliden: ¡Cuántos niños han hallado 528 IV, 3,73 | deben estar siempre en plena consonancia con el Magisterio auténtico 529 IV, 3,73 | apostolado, deben comportarse constantemente, con respecto a las familias, 530 III, 4,52 | situaciones, que la Iglesia constata por desgracia en diversos 531 IV, 1,69 | familias, ya desde hace tiempo constituidas, con su testimonio de vida 532 III, 1,21 | construir tal comunión está constituido por el intercambio educativo 533 IV, 1,69 | ayuda de familia a familia constituirá una de las maneras más sencillas, 534 III, 4,62 | que la oración es parte constitutiva y esencial de la vida cristiana 535 IV, 1,67 | llevarse a cabo de manera que constituya, incluso en su desarrollo 536 III, 4,51 | matrimonio y la familia, constituyéndolos en signo y lugar de la alianza 537 III, 2,34 | un ser histórico, que se construye día a día con sus opciones 538 IV, 3,75 | la Confederación de los Consultores familiares de inspiración 539 III, 2,30 | como son de la mentalidad consumista y con la única preocupación 540 I, 0,6 | bienestar y la mentalidad consumística, paradójicamente unida a 541 IV, 3,76 | las familias «deben poder contar en no pequeña medida con 542 IV, 1,67 | conyugal, con tal de que no contengan algo menos conveniente a 543 IV, 4,81 | una actitud de desprecio, contestación o rechazo de la sociedad, 544 IV, 4,77 | la adolescencia inquieta, contestadora y a veces problematizada 545 III, 4,53 | como sucede con frecuencia, contestan o incluso rechazan la fe 546 IV, 1,68 | caería en el peligro de contestar o de poner en duda la sacramentalidad 547 III, 4,51 | profesión de fe ha de ser continuada en la vida de los esposos 548 III, 1,19 | comunión queda radicalmente contradicha por la poligamia; ésta, 549 IV, 1,68 | con la Iglesia católica, contradiciendo así la tradición eclesial.~ 550 III, 2,31 | muy a menudo es confusa y contradictoria. La aportación de iluminación 551 III, 2,32 | un lenguaje objetivamente contradictorio, es decir, el de no darse 552 IV, 4,84 | una forma de vida que no contradiga la indisolubilidad del matrimonio. 553 III, 2,30 | invade y aflige al mundo, contrapone este «Sí» viviente, defendiendo 554 III, 3,46 | separación e incluso de su contraposición.~En efecto, como el Sínodo 555 III, 1,19 | los orígenes, porque es contraria a la igual dignidad personal 556 III, 2,40 | escuelas se enseñan ideologías contrarias a la fe cristiana, la familia 557 IV, 4,81 | religiosas— en cuanto que, contrayendo matrimonio regular, quedarían 558 III, 2,39 | Cristo (cf. Ef 4, 13), y contribuyan al crecimiento del Cuerpo 559 Intro, 0,3 | promoción humana y cristiana, contribuyendo de este modo a la renovación 560 III, 2,37 | centros educativos elegidos y controlados por ellos. En este sentido 561 IV, 4,82 | intentará hacer lo posible para convencer a estas personas a regular 562 III, 3,45 | Las autoridades públicas, convencidas de que el bien de la familia 563 III, 2,37 | vida sencillo y austero, convencidos de que «el hombre vale más 564 III, 2,30 | nuevamente a todos, con un convencimiento más claro y firme, su voluntad 565 IV, 1,67 | no contengan algo menos conveniente a la fe y a la moral cristiana.~ 566 IV, 1,66 | el esfuerzo de preparar convenientemente a los jóvenes para las reponsabilidades 567 IV, 1,66 | almas a que acepten las convenientes disposiciones, así también 568 IV, 3,76 | insignificantes»,(172) y podrían convertirse en vehículo —a veces hábil 569 III, 4,61 | un encuentro familiar se convierta en tiempo de oración, el 570 II, 0,14 | posible, por la cual se convierten en cooperadores de Dios 571 IV, 4,80 | aceptabilidad, indicando que es poco convincente que se haga un «experimento» 572 III, 4,59 | verdad que si dos de vosotros conviniéreis sobre la tierra en pedir 573 III, 4,49 | reciben» el amor de Cristo, convirtiéndose en comunidad «salvada», 574 III, 2,38 | familia de los bautizados, convocada como iglesia doméstica por 575 III, 2,37 | tiene que observar cuando coopera en la educación sexual, 576 I, 0,5 | responsabilidad propia de cada uno, cooperan para un más hondo conocimiento 577 II, 0,16 | padre y madre de muchos, cooperando a la realización de la familia 578 IV, 1,69 | cónyuges jóvenes sepan acoger cordialmente y valorar inteligentemente 579 IV, 4,77 | forma nueva, la bondad y la cordura acumulada y las energías 580 II, 0,14 | en la que encuentran su coronación.(34)~En su realidad más 581 II, 0,16 | está a la espera, incluso corporalmente, de las bodas escatológicas 582 III, 2,33 | también el conocimiento de la corporeidad y de sus ritmos de fertilidad. 583 IV, 4,81 | iluminación paciente, de corrección caritativa y de testimonio 584 III, 2,33 | del Espíritu, acogido y correspondido por los esposos, les ayuda 585 III, 4,49 | la Iglesia enriquece y corrobora a la familia cristiana con 586 III, 1,19 | a través de la fidelidad cotidana a la promesa matrimonial 587 IV, 1,69 | eventuales dificultades, como las creadas por la adaptación a la vida 588 II, 0,11 | comunión personal de amor. Creándola a su imagen y conservándola 589 III, 2,41 | debe llevar a su incesante «creatividad», fruto maravilloso del 590 IV, 4,78 | Matrimonios mixtos~78. El número creciente de matrimonios entre católicos 591 Conclu, 0,86 | angustiada por las dificultades crecientes, razones de confianza en 592 III, 4,54 | para las familias que no creen todavía y para las familias 593 III, 4,52 | imposible una verdadera creencia religiosa, la Iglesia doméstica 594 III, 3,46 | institución matrimonial; a creer y profesar su propia fe, 595 IV, 4,78 | a ser verdadero testigo creíble dentro de la familia, a 596 III, 4,54 | como ya al principio del cristianismo Aquila y Priscila se presentaban 597 III, 1,22 | los Padres Sinodales, el criterio moral de la autenticidad 598 I, 0,7 | colocarse como conciencia crítica de esta cultura familiar 599 IV, 3,76 | activa en el uso moderado, crítico, vigilante y prudente de 600 I, 0,9 | corazón, siguiendo a Cristo Crucificado en la renuncia al propio 601 III, 2,30 | su existencia en un mundo cruel, cuyos terrores no son ni 602 | cuán 603 | cuánta 604 | Cuántos 605 IV | CUARTA PARTE. ~PASTORAL FAMILIAR:~ 606 Conclu, 0,86 | Universo, del año 1981, cuarto de mi Pontificado.~ ~ 607 III, 0,17 | Sínodo ha puesto de relieve cuatro cometidos generales de la 608 IV, 1,68 | matrimonio, que debieran tener en cuenta el grado de fe de los que 609 III, 2,32 | que implica en resumidas cuentas dos concepciones de la persona 610 III, 2,30 | mentality), como se ve en muchas cuestiones actuales: piénsese, por 611 IV, 1,67 | preparación inteligente y cuidadosa de la «liturgia de la Palabra» 612 IV, 1,67 | inserida en la liturgia, culmen de toda la acción de la 613 III, 4,51 | de Dios que «revela» y «culmina» el proyecto sabio y amoroso 614 IV, 4,84 | injustamente, y los que por culpa grave han destruido un matrimonio 615 III, 2,28 | recíproca de los esposos: «El cultivo auténtico del amor conyugal 616 IV, 4,77 | desarraigadas de su ambiente culturaI y social o en peligro de 617 III, 4,61(155) | VI, Exhort. Ap. Marialis cultus, 52-54: AAS 66 (1974), 160 618 III, 4,53 | de manera que cada uno cumpla en plenitud su cometido, 619 III, 4,59 | tristezas, nacimientos y cumpleaños, aniversarios de la boda 620 III, 1,20 | bien de la indisolubilidad; cumplen así, de manera útil y valiente, 621 Conclu, 0,86 | necesidades de los demás y cumpliendo gozosamente los planes de 622 II, 0,15 | nacida del sacramento, su cuna y el lugar donde puede actuar 623 III, 4,52 | educación en la fe, o donde ha cundido la incredulidad o ha penetrado 624 IV, 1,69 | partida y de llegada de toda cura pastoral. De este modo las 625 Intro, 0,3 | necesidad de su gracia para ser curados de las heridas del pecado(5) 626 I, 0,10 | Dicasterios competentes de la Curia Romana, y en el empeño pastoral 627 III, 3,43 | propiamente humana, en particular custodiando y transmitiendo las virtudes 628 Conclu, 0,86 | trabajador incansable, custodio integérrimo de los tesoros 629 IV, 3,76 | evitar todo lo que pueda dañar a la familia en su existencia, 630 II, 0,16 | de Cristo con la Iglesia, dándose totalmente a la Iglesia 631 IV, 4,81 | regular, quedarían expuestos a daños, a la pérdida de ventajas 632 III, 2,41 | infunde ánimo para asumirlas y darles respuesta. En este marco 633 III, 2,32 | parejas de esposos y de los datos de las diversas ciencias 634 IV, 4,84(180) | Homilía para la clausura dd VI Sínodo de los Obispos, 635 IV, 1,66 | las dificultades en que se debaten tantos matrimonios, y más 636 I, 0,9 | derechos fundamentales, debemos oponernos todos con una 637 IV, 1,66 | celebrado y vivido con las debidas disposiciones morales y 638 IV, 4,81 | veces por condicionamientos debidos a situaciones de verdadera 639 IV, 1,68 | eclesial del matrimonio, que debieran tener en cuenta el grado 640 III, 1,24 | esclavitud, la opresión de los débiles, la pornografía, la prostitución — 641 IV, 1,66 | particular con sus fuerzas y debilidades. Es el período en que se 642 IV, 4,77 | enfermedad, por el progresivo decaimiento de las fuerzas, por la humillación 643 I, 0,8 | las opciones politicas que deciden su dirección de investigación 644 III, 3,44 | mejor y se la apoye más decididamente, sobre todo a medida que 645 II, 0,11 | algo o la posibilidad de decidir de otra manera en orden 646 III, 1,21 | también por esto puede y debe decirse «Iglesia doméstica».(58)~ 647 III, 2,35 | femenina y alienta a una más decisiva y amplia extensión de tales 648 III, 4,59 | elecciones importantes y decisivas, muerte de personas queridas, 649 III, 2,35 | un compromiso más amplio, decisivo y sistemático en hacer conocer, 650 II, 0,12 | el hombre y la mujer se declaran su amor conyugal.~Su vínculo 651 III, 2,29 | Sinodales, en su última asamblea declararon textualmente: «Este Sagrado 652 IV, 3,74 | las familias, con especial dedicación a los niños, especialmente 653 III, 3,48 | modos, a las asociaciones dedicadas específicamente a los problemas 654 III, 2,34 | religiosos y laicos que están dedicados a la pastoral familiar; 655 IV, 3,76 | parte de la Iglesia se siga dedicando toda atención a estas categorías 656 IV, 3,73 | de la pastoral. A él debe dedicar interés, atención, tiempo, 657 III, 1,23 | dignamente, aunque ellas se dediquen totalmente a la propia familia.~ 658 I, 0,6 | peligro del que hay que defenderse.~La situación histórica 659 II, 0,16 | durante toda su historia, ha defendido siempre la superioridad 660 III, 2,30 | contrapone este «Sí» viviente, defendiendo de este modo al hombre y 661 III, 0,17 | llamada imborrable, que define a la vez su dignidad y su 662 III, 0,17 | cometido de la familia son definidos en última instancia por 663 III, 2,32 | contexto de una cultura que deforma gravemente o incluso pierde 664 IV, 3,76 | disgregadoras y de visiones deformadas de la vida, de la familia, 665 Intro, 0,3 | que tratan de destruirla o deformarla, la Iglesia, consciente 666 I, 0,6 | embargo, signos de preocupante degradación de algunos valores fundamentales: 667 III, 1,26 | centro del Reino de Dios: «Dejad que los niños vengan a mí, ... 668 IV, 4,79 | religiosa, el Sínodo no ha dejado de considerar atentamente 669 III, 4,60 | el corazón de sus hijos, dejando huellas que los posteriores 670 Conclu, 0,86 | incomparablemente alta y pura, no dejará de ayudar a las familias 671 III, 3,45 | también que la sociedad no deje de cumplir su deber fundamental 672 III, 2,36 | no puede ser totalmente delegado o usurpado por otros.~Por 673 IV, 4,85 | a menudo no por voluntad deliberada— considero especialmente 674 IV, 3,76 | cualidades para trabajar en estos delicados sectores.~ 675 III, 2,30 | ecólogos y futurólogos sobre la demografía, que a veces exageran el 676 IV, 4,78 | y de la calidad del amor demostrado al otro cónyuge y a los 677 IV, 4,85 | a las familias que deben demostrar gran comprensión y voluntad 678 III, 1,27 | continuidad de las generaciones y demuestra maravillosamente la interdependencia 679 IV, 4,82 | del Estado, tales parejas demuestran una disposición a asumir, 680 III, 3,46 | efecto, como el Sínodo ha denunciado continuamente, la situación 681 IV, 4,77 | humillación de tener que depender de otros, por la amargura 682 III, 1,24 | discriminaciones han sido deploradas con toda la fuerza posible 683 IV, 4,80 | ulteriores y originales derivados de la fe. En efecto, por 684 III, 4,57 | entregado» y en la Sangre «derramada» de Cristo se hace fuente 685 III, 4,63 | el amor de Dios se ha derramado en nuestros corazones por 686 III, 1,21 | ignora que el egoísmo, el desacuerdo, las tensiones, los conflictos 687 Intro, 0,1 | Otras se sienten inciertas y desanimadas de cara a su cometido, e 688 III, 4,58 | sorprendiese todavía, no se desanimen, sino que recurran con humilde 689 Conclu, 0,86 | frecuencia tentada por el desánimo y angustiada por las dificultades 690 III, 2,32 | sexualidad humana, porque la desarraiga de su referencia a la persona, 691 IV, 4,77 | familias de alcoholizados; las desarraigadas de su ambiente culturaI 692 IV, 2,71 | ministerios.~Este apostolado se desarrollará sobre todo dentro de la 693 IV, 3,74 | individualmente o asociados, desarrollen su servicio a las familias, 694 IV, 3,76 | menudo a que las familias se descarguen de sus responsabilidades 695 III, 3,46 | negativa: instituciones y leyes desconocen injustamente los derechos 696 IV, 1,66 | preparación matrimonial —descritas anteriormente sólo a grandes 697 III, 4,58 | mientras mediante la fe descubren cómo el pecado contradice 698 I, 0,8 | humanizar todos los nuevos descubrimientos de la humanidad. El destino 699 IV, 1,66 | a conducir a los niños a descubrirse a sí mismos como seres dotados 700 IV, 4,77 | Igualmente no puede ser descuidado por la Iglesia el período 701 IV, 4,77 | diversas situaciones no se descuide jamás la oración, fuente 702 III, 4,63 | los fieles laicos el Señor desea dilatar su reino: reino 703 III, 1,23 | resultará más fácil si, como ha deseado el Sínodo, una renovada « 704 IV, 3,74 | especialmente a los abandonados, no deseados, huérfanos, pobres o minusválidos; 705 III, 4,61 | rezar. Nos queremos pensar y deseamos vivamente que cuando un 706 III, 2,35 | ayudas concretas a quienes desean vivir la paternidad y la 707 III, 1,26 | eso, ¿qué más se podría desear a cada nación y a toda la 708 III, 2,33 | expertos. El conocimiento debe desembocar además en la educación al 709 III, 0,17 | vocación de Dios está llamada a desempeñar en la historia, brota de 710 III, 1,25 | ausencia del padre provoca desequilibrios psicológicos y morales, 711 IV, 2,71 | sienten la tentación de deshacerse del fruto de su seno, etc.~ 712 III, 2,32 | excluir, como intrínsecamente deshonesta, «toda acción que, o en 713 III, 3,43 | y por tanto inhumana y deshumanizadora, con los resultados negativos 714 I, 0,4 | situación~4. Dado que los designios de Dios sobre el matrimonio 715 III, 2,37 | solicitud sincera y servicio desinteresado hacia los demás, especialmente 716 II, 0,12 | infidelidad es adulterio, la desobediencia a la ley es abandono del 717 III, 1,27 | como consecuencia de un desordenado desarrollo industrial y 718 III, 3,43 | peligro de ser cada vez más despersonalizada y masificada, y por tanto 719 III, 4,54 | actividad misionera puede ser desplegada ya en el interior de la 720 I, 0,5 | defiende a los pobres y despreciados. La Iglesia puede recurrir 721 III, 3,44 | En especial hay que destacar la importancia cada vez 722 IV, 3,75 | apoyo de la familia está destinado a tener una eficacia que, 723 III, 2,29(83) | humanam procreandam per se destinatus permaneat »): AAS 60 (1968), 724 Intro, 0,1 | hombre preocupado por los destinos del matrimonio y de la familia.(1)~ 725 IV, 4,81 | consecuencias sociales (destrucción del concepto de familia, 726 Intro, 0,3 | muchas fuerzas que tratan de destruirla o deformarla, la Iglesia, 727 II, 0,12 | infidelidad de Israel no destruye la fidelidad eterna del 728 II, 0,13 | Iglesia. En este sacrificio se desvela enteramente el designio 729 III, 4,62 | plegaria no es una evasión que desvía del compromiso cotidiano, 730 III, 3,46 | se encargará de estudiar detenidamente estas sugerencias, elaborando 731 IV, 3,75 | finalidades que persigue, y determinantes para el bien de la sociedad 732 III, 2,32 | los motivos, sino que debe determinarse con criterios objetivos, 733 Intro, 0,3 | heridas del pecado(5) y ser devueltos «a su principio»,(6) es 734 III, 1,25 | esclava, sino como mujer... Devuélvele sus atenciones hacia ti 735 IV, 3,73 | ministerio.~El sacerdote o el diácono preparados adecuada y seriamente 736 IV, 3,73 | mismo se diga de aquellos diáconos a los que eventualmente 737 III, 2,28 | ellos aumenta y enriquece diariamente su propia familia».(82)~ 738 I, 0,10 | Conferencias Episcopales y de los Dicasterios competentes de la Curia 739 III, 2,38 | educativa, basada como se ha dicho en su participación en la 740 III, 3,44 | caridad de Cristo: «El que diere de beber a uno de estos 741 IV, 4,82 | rechazando o, por lo menos, diferiendo el religioso. Su situación 742 III, 2,36 | transcendencia que, cuando falta, difícilmente puede suplirse. Es, pues, 743 IV, 3,76 | que, por el contrario, se difundan programas aptos para presentar 744 III, 3,48 | energía interior que origina, difunde y desarrolla justicia, reconciliación, 745 III, 1,23 | específicamente familiar una amplia y difundida tradición social y cultural 746 IV, 4,79 | transformaciones culturales— se van difundiendo por desgracia también entre 747 III, 4,54 | confirmación de defender y difundir la fe,(130) constituye a 748 III, 3,46 | profesar su propia fe, y a difundirla; a educar a sus hijos de 749 IV, 3,73 | la familia. Lo mismo se diga de aquellos diáconos a los 750 III, 4,56 | santificado: «El Señor se ha dignado sanar este amor, perfeccionarlo 751 III, 3,45(111) | sobre la libertad religiosa Dignitatis humanae, 5.~ 752 IV, 1,67 | último debe ser sencillo y digno, según las normas de las 753 III, 1,26 | Repito nuevamente lo que dije en la Asamblea General de 754 III, 2,28 | Y bendíjolos Dios y les dijo: " Sed fecundos y multiplicaos 755 III, 3,48 | sociales, la familia ve que se dilata de una manera totalmente 756 III, 4,63 | fieles laicos el Señor desea dilatar su reino: reino de verdad 757 IV, 3,76 | cuidadosamente. Con la misma diligencia la familia debería buscar 758 IV, 2 | pastoral es siempre expresión dinámica de la realidad de la Iglesia, 759 IV, 3,73 | las diversas estructuras diocesanas, le ayudan en la pastoral 760 III, 1,22 | Señor Jesús hacia la mujer. Dirá el Apóstol Pablo: «Todos, 761 III, 1,19 | ésta, en efecto, niega directamente el designio de Dios tal 762 IV, 1,66 | procuren que se publique un directorio para la pastoral de la familia. 763 III, 4,61 | cristiana de los hijos. Las directrices conciliares han abierto 764 III, 2,40 | aquellos que en la sociedad dirigen las escuelas, no deben olvidar 765 IV, 3,75 | aplicarse las exhortaciones que dirigí a la Confederación de los 766 III, 2,31 | Sínodo, siento el deber de dirigir una acuciante invitación 767 III, 3,44 | agua fresca porque es mi discípulo, en verdad os digo que no 768 IV, 1,69 | inteligentemente la ayuda discreta, delicada y valiente de 769 IV, 4,77 | peligro de perderlo; las discriminadas por motivos políticos o 770 IV, 1,68 | pronunciar juicios infundados y discriminatorios; el riesgo además de suscitar 771 III, 1,25 | esposa,(74) un trabajo que no disgregue nunca la familia, sino que 772 IV, 1,66 | lo cual sucedería si se dispensase fácilmente de ella— , sin 773 IV, 3,74 | cielos, les hace cada vez más disponibles para dedicarse generosamente 774 Intro, 0,2 | Consejo para la Familia, disponiendo que haga un estudio profundo 775 IV, 1,68 | quien está imperfectamente dispuesto.~El sacramento del matrimonio 776 IV, 4,84 | Cristo, están sinceramente dispuestos a una forma de vida que 777 IV, 2,70 | menores entre las que se distingue, por su peculiar importancia, 778 III, 4,50 | realidades cotidianas que tocan y distinguen su condición de vida. Es 779 IV, 4,77 | por otras exigencias de distinta naturaleza— tienen que afrontar 780 III, 1,26 | constituir siempre una nota distintiva e irrenunciable de los cristianos, 781 IV, 3,76 | propios hijos también otras diversiones más sanas, más útiles y 782 III, 4,51 | en cuanto son por título diverso protagonistas y celebrantes, 783 III, 4,58(148) | Pablo II, Cart. Encíclica Dives in misericordia, 13: AAS 784 IV, 2,70 | la comunidad diocesana, dividida pastoralmente en comunidades 785 III, 1,24 | viudas, las separadas, las divorciadas, las madres solteras.~Estas 786 I, 0,6 | número cada vez mayor de divorcios, la plaga del aborto, el 787 IV, 2,71 | exigencia de obediencia dócil a Cristo Señor. Él, en efecto, 788 IV, 1,66 | ellos los diversos aspectos —doctrinales, pedagógicos, legales y 789 IV, 4,78 | contenidas en los recientes documentos de la Santa Sede y en los 790 III, 4,59 | a su llamada: alegrías y dolores, esperanzas y tristezas, 791 IV, 4,83 | interpersonales, etc., pueden conducir dolorosamente el matrimonio válido a una 792 III, 4,49 | en miniatura» (Ecclesia domestica)(114) de modo que sea, a 793 III, 4,61 | cristianas, de las Iglesias domésticas.~ 794 III, 4,60 | al interior de los muros domésticos: "Pax huic domui". Recordad: 795 IV, 4,80 | Cristo y no por temor— a dominar la concupiscencia naciente 796 III, 4,61 | Eucaristía, sobre todo los domingos y días festivos, y en los 797 III, 4,60 | muros domésticos: "Pax huic domui". Recordad: así edificáis 798 II, 0,13 | caridad de Cristo que se dona sobre la cruz.~En una página 799 III, 1,19 | nueva comunión de amor, donada por la gracia de Cristo.~ 800 II, 0,16 | considera un gran valor donado por el Creador, pierde significado 801 II, 0,11 | orden al futuro, ya no se donaría totalmente.~Esta totalidad, 802 I, 0,5 | constituye sus testigos y les dota del sentido de la fe y de 803 IV, 1,66 | descubrirse a sí mismos como seres dotados de una rica y compleja psicología 804 IV, 1,65 | sus dificultades a veces dramáticas; ofrecerá a todos su ayuda 805 III, 3,48 | y resolver los enormes y dramáticos problemas de la justicia 806 IV, 3,76 | productores, directores, dramaturgos, informadores, comentaristas 807 III, 3,43 | ejemplo, el alcoholismo, la droga y el mismo terrorismo—, 808 IV, 4,77 | con hijos minusválidos o drogados; las familias de alcoholizados; 809 III, 2,30 | sería mejor no haber nacido; dudan de si es lícito llamar a 810 III, 2,36 | enriqueciéndola con los valores de dulzura, constancia, bondad, servicio, 811 IV, 4,77 | energías que quedan; la dura soledad, a menudo más psicológica 812 IV, 1,66 | minimos de contenido, de duración y de método de los «cursos 813 III, 2,41 | social y cultural, que afecta duramente a los ancianos, a los enfermos, 814 III, 4,49 | Iglesia en miniatura» (Ecclesia domestica)(114) de modo 815 I, 0,5(13) | Fe, Declaración Mysterium Ecclesiae, 2: AAS 65 (1973), 398-400.~ 816 III, 2,30 | derivado de los estudios de los ecólogos y futurólogos sobre la demografía, 817 IV, 4,78 | evidencia la importancia ecuménica de este matrimonio mixto, 818 III, 4,60 | huic domui". Recordad: así edificáis la Iglesia».(152)~ 819 II, 0,15 | matrimonio y la familia cristiana edifican la Iglesia; en efecto, dentro 820 III, 1,21 | fundamento sobre el cual se va edificando la más amplia comunión de 821 IV, 3,76 | profesionales de los mass-media: editores, escritores, productores, 822 IV, 4,80 | persona humana no ha sido educada —ya desde la infancia, con 823 IV, 4,78 | hijos sean bautizados y educados católicamente. El cónyuge 824 III, 2,38 | para engendrar la prole y educarla en el culto a Dios».(101)~ 825 IV, 1,69 | específica con el fin de educarlas a vivir responsablemente 826 IV, 4,84 | pretexto incluso pastoral— efectuar ceremonias de cualquier 827 III, 2,37 | diversos individualismos y egoísmos, los hijos deben enriquecerse 828 II, 0,12(24) | Cfr. por ej. Os, 2, 21; Jer 3, 6-13; 829 III, 2,30 | energía cualquier violencia ejercida por tales autoridades en 830 IV, 4,78 | de la Santa Sede y en los elaborados por las Conferencias Episcopales, 831 III, 3,46 | detenidamente estas sugerencias, elaborando una «Carta de los derechos 832 III, 4,59 | alejamientos y regresos, elecciones importantes y decisivas, 833 III, 2,37 | en los centros educativos elegidos y controlados por ellos. 834 I, 0,6 | bien sea las libertades más elementales. En cambio, en los países 835 IV, 4,77 | comprender y vivir los aspectos elevados de la espiritualidad matrimonial 836 III, 4,56 | este amor, perfeccionarlo y elevarlo con el don especial de la 837 III, 1,23 | educativa; en efecto, se elimina la raíz misma de la posible 838 IV, 1,66 | preparación al matrimonio, para eliminar lo más posible las dificultades 839 IV, 4,81 | garantizando el salario familiar, emanando disposiciones para una vivienda 840 I, 0,8 | la nueva cultura que está emergiendo sea íntimamente evangelizada, 841 III, 3,46 | muerte dignas; el derecho a emigrar como familia, para buscar 842 IV, 3,76 | conciencia de los hijos para emitir juicios serenos y objetivos, 843 III, 4,50 | la colaboración que los empeña en las obras de servicio 844 III, 1,23 | en todos los sectores se empeñan con idéntico derecho e idéntica 845 IV, 4,83 | implicar en una nueva unión, empeñándose en cambio en el cumplimiento 846 IV, 4,81 | discreción y respeto; se empeñarán en una acción de iluminación 847 IV, 2,72 | las familias cristianas se empeñen activamente, a todos los 848 III, 2,37 | vive de manera reductiva y empobrecida, relacionándola únicamente 849 Intro, 0,1 | los jóvenes que están para emprender su camino hacia el matrimonio 850 IV, 4,81 | Otros, finalmente, son empujados por la extrema ignorancia 851 III, 4,62 | sino que constituye el empuje más fuerte para que la familia 852 IV, 4,78 | adecuadas medidas pastorales, encaminadas a garantizar la defensa 853 IV, 1,66 | conexión con ella y los encamine a la familiaridad con rectos 854 III, 2,39 | episcopales han sido invitadas encarecidamente a comprometerse en la realización 855 III, 3,46 | explícita del Sínodo, se encargará de estudiar detenidamente 856 II, 0,13 | representa el misterio de la Encarnación de Cristo y su misterio 857 II, 0,11 | humano.~En cuanto espíritu encarnado, es decir, alma que se expresa 858 III, 2,34 | voluntad recta y generosa de encarnarlos en sus opciones concretas.~ 859 II, 0,16 | corazón del hombre,(40) «hasta encenderlo mayormente de caridad hacia 860 III, 3,42 | naturaleza y vocación, lejos de encerrarse en sí misma, se abre a las 861 III, 4,64 | tal modo que ella no se encierre en sí misma, sino que permanezca 862 Intro, 0,2 | apostólico que se me ha encomendado, quiero expresar mi gratitud 863 Conclu, 0,86 | Cristo, a María y a José encomiendo cada familia. En sus manos 864 III, 1,21 | de la unidad nuevamente encontrada. En particular la participación 865 IV, 1,69 | familias jóvenes, las cuales, encontrándose en un contexto de nuevos 866 III, 2,30 | de desarrollo en que se encuentre.~Por esto la Iglesia condena, 867 IV, 4,77 | política, para que los obreros encuentren trabajo en su propia región 868 III, 2,33 | ayudando a superar el egoísmo, enemigo del verdadero amor, y enraizando 869 III, 1,24 | pastoral específica más enérgica e incisiva, a fin de que 870 III, 2,30 | vida humana, aunque débil y enferma, es siempre un don espléndido 871 IV, 4,77 | el sufrimiento a causa de enfermedad, por el progresivo decaimiento 872 III, 1,26 | y necesita de todo, está enfermo, delicado o es minusválido.~ 873 II, 0,11 | donación física total sería un engaño si no fuese signo y fruto 874 III, 4,49 | la Iglesia Madre la que engendra, educa, edifica la familia 875 II, 0,15 | persona humana no sólo es engendrada y progresivamente introducida, 876 III, 2,39 | plenamente padres, es decir engendradores no sólo de la vida corporal, 877 III, 2,36 | creadora de Dios; ellos, engendrando en el amor y por amor una 878 Conclu, 0,86 | alivie los sufrimientos y enjugue las lágrimas de cuantos 879 IV, 4,77 | cada vez más purificado y ennoblecido por una larga e ininterrumpida 880 IV, 4,85 | viven en condiciones de enorme pobreza, donde la promiscuidad, 881 III, 2,41 | De este modo se ensancha enormemente el horizonte de la paternidad 882 III, 3,48 | afrontar y resolver los enormes y dramáticos problemas de 883 III, 3,48 | las familias cristianas, enraizadas en la fe y esperanza común 884 III, 2,33 | enemigo del verdadero amor, y enraizando más su sentido de responsabilidad. 885 III, 2,41 | vida, la familia entera se enriquecerá con los valores espirituales 886 III, 3,43 | su dignidad personal, de enriquecerlo con profunda humanidad y 887 III, 2,37 | egoísmos, los hijos deben enriquecerse no sólo con el sentido de 888 III, 2,36 | acción educativa concreta, enriqueciéndola con los valores de dulzura, 889 III, 1,22 | al hombre y a la mujer, enriqueciéndolos con los derechos inalienables 890 III, 2,33 | integralmente su personalidad, enriqueciéndose de valores espirituales: 891 IV, 1,69 | ayudadas así, serán fuente de enriquecimiento para las otras familias, 892 III, 2,41 | excarcelados, etc.~De este modo se ensancha enormemente el horizonte 893 III, 2,41 | padres cristianos podrán así ensanchar su amor más allá de los 894 III, 4,60 | a los padres: «Madres, ¿enseñáis a vuestros niños las oraciones 895 IV, 4,81 | sobre todo, adelántense enseñándoles a cultivar el sentido de 896 III, 2,28 | de los hijos, aunque sea entendida en su dimensión específicamente 897 III, 3,48 | hacia el cual el mundo entero está en camino.~Las familias 898 II, 0,13 | una totalidad en la que entran todos los elementos de la 899 III, 1,23 | Mujer y sociedad~23. Sin entrar ahora a tratar de los diferentes 900 III, 4,57 | participación en el Cuerpo «entregado» y en la Sangre «derramada» 901 III, 2,32 | amor conyugal, llamado a entregarse en plenitud personal.~En 902 III, 4,56 | mismo amó a la Iglesia y se entregó por ella... Por ello los 903 III, 2,32 | de la humana procreación, entretejidos con el amor verdadero; esto 904 IV, 1,67 | principios anteriormente enunciados.~ 905 III, 2,38 | Dios que los llama y los envía a edificar la Iglesia en 906 IV, 2,71 | peculiar misión de apóstoles, enviándolos como obreros a su viña, 907 III, 2,32 | designio divino y «manipulan» y envilecen la sexualidad humana, y 908 IV, 1,66 | cursos de preparación», equilibrando entre ellos los diversos 909 IV, 3,76 | en su estabilidad, en su equilibrio y en su felicidad. Toda 910 IV, 4,82 | religioso. Su situación no puede equipararse sin más a la de los que 911 III, 4,63 | hermanos al Rey, cuyo servicio equivale a reinar. También por medio 912 I, 0,6 | valores fundamentales: una equivocada concepción teórica y práctica 913 IV, 3,76 | la familia —se trate de erotismo o de violencia, de apología 914 III, 2,31 | propone la Iglesia. Dudas o errores en el ámbito matrimonial 915 III, 1,27 | ancianos ayuda a clarificar la escala de valores humanos; hace 916 IV, 4,81 | gracia del sacramento, grave escándalo), así como también por las 917 III, 1,24 | hombre y de la mujer, la esclavitud, la opresión de los débiles, 918 IV, 3,76 | hijos, pero al mismo tiempo esconden también «insidias y peligros 919 III, 2,33 | hombres de buena voluntad, sin esconder las exigencias de radicalidad 920 Conclu, 0,86 | designio de Dios, en ella vivió escondido largos años el Hijo de Dios: 921 III, 1,25 | mujer: «No eres su amo —escribe san Ambrosio— sino su marido; 922 IV, 3,76 | los mass-media: editores, escritores, productores, directores, 923 IV, 4,84 | fundándose en la Sagrada Escritura reafirma su práxis de no 924 III, 0,17 | realidad, hay que decir que la esencia y el cometido de la familia 925 IV, 4,78 | compartir su unidad en la esfera de los valores morales y 926 IV, 4,84 | que sinceramente se han esforzado por salvar el primer matrimonio 927 III, 3,46 | para cumplir adecuada y esmeradamente su misión; a proteger a 928 III, 4,52 | la Iglesia, debe ser un espacio donde el Evangelio es transmitido 929 III, 1,26 | reservarse una atención especialísima al niño, desarrollando una 930 III, 4,56 | matrimonio, que presupone y especifica la gracia santificadora 931 III, 4,56 | cristianos. Para ellos está especificada por el sacramento celebrado 932 II, 0,11 | cristiana conoce dos modos específicos de realizar integralmente 933 II, 0,16 | virginidad el hombre está a la espera, incluso corporalmente, 934 II, 0,16 | tienen pues el derecho de esperar de las personas vírgenes 935 III, 1,23 | responsabilidad. Aparecerá así más espléndida la imagen de Dios en el 936 III, 2,30 | enferma, es siempre un don espléndido del Dios de la bondad. Contra 937 II, 0,12 | alianza esponsal que se establece entre el hombre y la mujer.~ 938 III, 3,42 | 42. «El Creador del mundo estableció la sociedad conyugal como 939 I, 0,5 | investigación sociológica y estadística, cuando se revele útil para 940 III, 4,62(158) | XII Región Pastoral de los Estados Unidos de América (21 de 941 IV, 1,69 | y específico, la Iglesia estará aún más cercana a los padres 942 I, 0,8 | como las familias de hoy estarán en condiciones de influir 943 III, 1,26 | crecen «en sabiduría, en estatura y en gracia ante Dios y 944 III, 1,23 | sea reconocido por todos y estimado por su valor insustituible. 945 III, 1,23 | esto exige que los hombres estimen y amen verdaderamente a 946 III, 1,19 | al mismo tiempo impulso estimulante, a fin de que cada día progresen 947 IV, 3,73 | de la Iglesia saca nuevos estímulos y energías espirituales 948 III, 4,59 | congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos».(150)~ 949 III, 2,41 | la carne y de la sangre, estrechando esos lazos que se basan 950 III, 2,37 | humana.~Por los vínculos estrechos que hay entre la dimensión 951 IV, 1,66 | interesan al matrimonio, y estructurándolos de manera que cuantos se 952 III, 1,23 | sociedad debe sin embargo estructurarse de manera tal que las esposas 953 IV, 4,84 | Padres Sinodales lo han estudiado expresamente. La Iglesia, 954 III, 3,46 | Sínodo, se encargará de estudiar detenidamente estas sugerencias, 955 III, 4,51 | Señor que les revela la estupenda novedad —la Buena Nueva— 956 IV, 4,80 | experimentum», sino fiel eternamente; por tanto, entre dos bautizados 957 III, 3,44 | Vaticano II a superar la ética individualista vale también 958 III, 2,31 | bíblicos, las motivaciones éticas y las razones personalistas 959 III, 2,35(97) | la Familia de Africa y de Europa, 1 s. (15 de enero de 1981): 960 III, 1,22 | Dios, llamándola la nueva Eva y proponiéndola como modelo 961 IV, 4,78 | tal fin, aun para poner en evidencia la importancia ecuménica 962 III, 1,23 | sociedad y de la Iglesia.~Es evidente sin embargo que todo esto 963 IV, 3,74 | consagración a Dios: «De este modo evocan ellos ante todos los fieles 964 III, 1,23 | sí, si se quiere que la evolución social y cultural sea verdadera 965 IV, 3,73 | este diálogo, explicando exactamente el contenido del Magisterio 966 III, 2,30 | demografía, que a veces exageran el peligro que representa 967 IV, 1,66 | y forma nueva al llamado examen prematrimonial exigido por 968 III, 1,25(69) | S. Ambrosio, Exameron, V, 7, 19: CSEL 32, I, 154.~ 969 III, 4,49 | tal participación, hay que examinar a fondo los múltiples y 970 III, 2,41 | a los drogadictos, a los excarcelados, etc.~De este modo se ensancha 971 III, 4,61 | considerado como una de las más excelentes y eficaces oraciones comunes 972 III, 2,34 | en el matrimonio, y esta excelsa vocación se realiza en la 973 III, 1,24 | todos los seres humanos sin excepción alguna.~ 974 I, 0,6 | los países más ricos, el excesivo bienestar y la mentalidad 975 III, 1,25 | adecuada»,(67) y hace suya la exclamación de Adán, el primer esposo: « 976 III, 2,40 | primera, pero no la única y exclusiva, comunidad educadora; la 977 II, 0,11 | con los actos propios y exclusivos de los esposos, no es algo 978 III, 2,30 | ventajas de la técnica y excluyen a los demás, a los cuales 979 III, 1,23(66) | Pablo II, Cart. Enc. Laborem exercens, 19 AAS 73 (1981), 625.~ 980 IV, 3,75 | ellos pueden aplicarse las exhortaciones que dirigí a la Confederación 981 IV, 4,84 | participar en su vida. Se les exhorte a escuchar la Palabra de 982 IV, 4,84 | En unión con el Sínodo exhorto vivamente a los pastores 983 Conclu, 0,86 | una consigna concreta y exigente.~Amar a la familia significa 984 IV, 1,66 | llamado examen prematrimonial exigido por el derecho canónico. 985 III, 2,29(83) | afirma: «La Iglesia, al exigir que los hombres observen 986 I, 0,9 | permanente, que, aunque exija el alejamiento interior 987 IV, 4,77 | de los prófugos y de los exiliados; las familias que en las 988 Conclu, 0,86 | pobreza, la persecución y el exilio; que glorificó a Dios de 989 IV, 4,83 | amor y de ayuda, sin que exista obstáculo alguno para la 990 III, 0,17 | su desarrollo dinámico y existencial. Toda familia descubre y 991 III, 4,57 | relieve la especial relación existente entre la Eucaristía y el 992 IV, 4,80 | matrimonio a prueba» o experimental, que muchos quieren hoy 993 IV, 4,80 | convincente que se haga un «experimento» tratándose de personas 994 IV, 4,80 | unión no temporal o «ad experimentum», sino fiel eternamente; 995 IV, 3,73 | gran ayuda en este diálogo, explicando exactamente el contenido 996 II, 0,13 | en Cristo: «¿Cómo lograré exponer la felicidad de ese matrimonio 997 III, 2,31 | posible, en el contexto de una exposición orgánica, hacer que la doctrina 998 IV, 1,67 | creyentes. El empeño pastoral se expresará aquí con la preparación 999 III, 1,23 | humanidad femenina tal como debe expresarse en su comportamiento, tanto 1000 IV, 1,67 | celebración litúrgica, que exprese de manera social y comunitaria