Capítulo,  Parrafo

 1 Intro,1  |            que Jesús es el Hijo de Dios, a fin de que, mediante
 2 Intro,3  |       habían dirigido al pueblo de Dios,(7) y sobre todo la serie
 3 Intro,3  |       podía contar en el pueblo de Dios con una gran disponibilidad
 4 Intro,4  |    inesperadamente fue llamado por Dios. A todos nosotros él nos
 5  I,5     |      llenos de toda la plenitud de Dios».(11) Se trata por lo tanto
 6  I,5     |       Cristo el designio eterno de Dios que se realiza en Él. Se
 7  I,6     |          Verbo encarnado e Hijo de Dios y todo lo demás en referencia
 8  I,6     |           asiduo con la Palabra de Dios transmitida por el Magisterio
 9  I,7     |  comunicación del Misterio vivo de Dios. La calidad de Aquel que
10  I,8     |           como Maestro de parte de Dios».(26)~Esta imagen de Cristo
11  I,9     |            el Maestro que revela a Dios a los hombres y al hombre
12 II,10    |           más razonable obedecer a Dios que a los hombres.(34) ~
13 II,12(40)|        hace aumentar la familia de Dios; es «educadora», porque
14 II,13    |         dos mil años, el Pueblo de Dios no ha cesado de educarse
15 II,13    | correspondencia con el designio de Dios, dependen esencialmente
16 II,15    |           este final del siglo XX, Dios y los acontecimientos, que
17 II,15    |           siempre a la fidelidad a Dios, que nunca deja de responder.~
18 II,17    |           El «Mensaje al pueblo de Dios» subrayó justamente que,
19 III,20   |       desarrollar, con la ayuda de Dios, una fe aún inicial, en
20 III,20   |             misterio», el Reino de Dios que anuncia, las exigencias
21 III,20   |         entregarse a la Palabra de Dios y apoyarse en ella, pero
22 III,21   |            presentar la Palabra de Dios».(50)~Frente a las dificultades
23 III,22   |    sistemática a la Revelación que Dios mismo ha hecho al hombre,
24 III,25   |           conocimiento del Hijo de Dios y a formar al hombre perfecto,
25 IV,27    |       fuente viva de la Palabra de Dios, transmitida mediante la
26 IV,27    |           sagrado de la Palabra de Dios, confiado a la Iglesia»,
27 IV,28    |            el «Credo del Pueblo de Dios» proclamado al cumplirse
28 IV,29    |          lo que puede conocerse de Dios»;(63) de poderles decir,
29 IV,29    |           el misterio del Verbo de Dios hecho hombre y que realiza
30 IV,29    |           más bien como el Hijo de Dios, el mediador que nos da
31 IV,29    |          constituyen la familia de Dios reunida por el Señor bajo
32 IV,29    |            apacentar la Iglesia de Dios»!(67)~Es importante explicar
33 IV,29    |            miseria, es asumida por Dios en su Hijo Jesucristo y «
34 IV,29    |           que claman venganza ante Dios, el hecho de oprimir a los
35 IV,30    |           plan redentor de nuestro Dios y su larga y amorosa preparación
36 IV,30    |            Encarnación del Hijo de Dios, para María —la Inmaculada,
37 IV,30    |            Inmaculada, la Madre de Dios, siempre Virgen, elevada
38 IV,30    |           vidas(79) y la virtud de Dios que nos libera, para la
39  V,35    |            y jóvenes a Jesucristo, Dios hecho hombre? ¿Cómo revelarlo
40  V,35    |            su mensaje, del Plan de Dios que él quiso revelar, del
41  V,36    |           diálogo cariñoso con ese Dios oculto, cuya Palabra comenzará
42  V,36    |          en una relación vital con Dios: obra capital que exige
43  V,40    |           y a los jóvenes? ¡Quiera Dios que la atención así despertada
44 VI,47    |          hacer vivir la Palabra de Dios; las reuniones de las comunidades
45 VI,47    |            del Sínodo al Pueblo de Dios ha puesto en evidencia.(92)~
46 VI,49    |          conforme con el querer de Dios.
47 VI,50    |        responder, con la gracia de Dios, a las exigencias complejas
48 VII,52   |        Esta Revelación es la de un Dios creador y redentor, cuyo
49 VII,54   |          amor y la misericordia de Dios, la Encarnación de Cristo,
50 VII,55   |            Iglesia: la fidelidad a Dios y la fidelidad al hombre,
51 VIII,57  |           que ampliamente ignora a Dios o que, en materia religiosa,
52 VIII,57  |     fundamental, la de buscador de Dios, tenemos necesidad de una
53 VIII,57  |          tal manera al absoluto de Dios que puedan dar testimonio
54 VIII,58  |        integridad la Revelación de Dios. Ahora bien, Dios mismo,
55 VIII,58  |    Revelación de Dios. Ahora bien, Dios mismo, a lo largo de toda
56 VIII,60  |          obscuramente»,(103) y que Dios habita una luz inaccessible.(104)
57 VIII,60  |          se funda en la Palabra de Dios que ni se engaña ni engaña,
58 IX,67    |          un solo bautismo, un solo Dios y Padre...».(116) Por esto,
59 IX,67    |        conciencia de ser pueblo de Dios. Allí, el pan de la buena
60 IX,69    |       comprender que la llamada de Dios a servirle en espíritu y
61 IX,69    |          según los mandamientos de Dios y los preceptos de la Iglesia,
62 Conclu,72|         vida nueva de los hijos de Dios. Sólo el Espíritu nos permite
63 Conclu,72|      Espíritu nos permite llamar a Dios: «Abba, Padre».(127) Sin
64 Conclu,73|           historia del designio de Dios sobre su Pueblo, en la adoración
65 Conclu,73|         nadie ha sido enseñado por Dios(136) con tanta profundidad. «