negrita = Texto principal
Parte, Capítulo, Tema, Parrafo, Número gris = Texto de comentario
1 Sig,II | formación y de la promoción del catequista en tierras de misión que
2 II, I, 0, 17,98 | Iglesia, y en su nombre todo catequista, puede decir con verdad: «
3 II, I, 0, 23,110 | eficaz de esta tarea, es el catequista que, junto a un sentido
4 II,II, 2, 2,132 | no oficiales, guías del catequista...).~– Todo catecismo es,
5 II,II, 2, 2,132(455)| decisivos: la persona del catequista, el método de transmisión,
6 II,II, 2, 2,132(455)| relación que se establece entre catequista y catequizando, el respeto
7 III, 0, 2, 7,138 | escuela de Jesús Maestro, el catequista une estrechamente su acción
8 III, I, 0, 8,139 | con Dios, que es tarea del catequista, significa poner en el centro
9 III, I, 0, 10,141 | comunidad y en el quehacer del catequista.~
10 III, I, 0, 16,147 | la pedagogía de la fe, el catequista configura un servicio a
11 III, I, 0, 16,147 | Jesucristo.~A este fin, el catequista conoce y se sirve, desde
12 III,II, 0, 18,149 | correlación e interacción. El catequista reconoce que el método está
13 III,II, 0, 18,149 | de él. Por otra parte, el catequista sabe que el contenido de
14 III,II, 0, 20,152 | su gracia y lo salva. El catequista debe ayudar a la persona
15 III,II, 0, 21 | Función del catequista ~(528)~
16 III,II, 0, 21,156 | experimentado que sea, exime al catequista del trabajo personal en
17 III,II, 0, 21,156 | de vida cristiana en el catequista constituyen el alma de todo
18 III,II, 0, 21,156 | instrumentos de trabajo.~El catequista es intrínsecamente un mediador
19 III,II, 0, 21,156 | acogido y profundizado.~El catequista no debe olvidar que la adhesión
20 III,II, 0, 21,156 | la relación personal del catequista con el catecúmeno y el catequizando.
21 III,II, 0, 21,156 | sabio acompañamiento, el catequista realiza un servicio de los
22 III,II, 0, 24,159 | corresponsabilidad cristiana.~El catequista, que participa en la vida
23 IV, 0, 0, 27,163 | necesitados. De hecho El se hace catequista del Reino de Dios para toda
24 IV, I, 0, 31,169 | creatividad y originalidad del catequista.~
25 IV,II, 1, 2,173 | figura y la identidad del catequista de adultos y su formación;
26 IV,II, 4, 1,186 | la presencia cordial del catequista y de la comunidad creyente.
27 IV,II, 4, 3,188 | cierto modo lo convierte en « catequista » natural de la comunidad.
28 V, I, 0, 29,219 | evangelización. La tarea del catequista, como educador de la fe,
29 V, I, 0, 32,225 | servicio catequético y, como catequista de catequistas, cuidar la
30 V, I, 0, 35,231 | verdadero motor de la acción del catequista. « De este conocimiento
31 V, I, 0, 35,231 | Sentirse llamado a ser catequista y recibir de la Iglesia
32 V, I, 0, 35,231 | de cada uno. A veces, el catequista sólo puede ejercer este
33 V, I, 0, 36 | Diversos tipos de catequista, hoy especialmente necesarios~
34 V, I, 0, 36,232 | 232. El tipo o figura del catequista en la Iglesia presenta modalidades
35 V, I, 0, 36,232 | excelencia el título de catequista: « sin ellos no se habrían
36 V, I, 0, 36,232 | cierto modo análoga a la del catequista de tierras de misión. Se
37 V, I, 0, 36,232 | evangelización », (106) la figura del catequista de jóvenes y la del catequista
38 V, I, 0, 36,232 | catequista de jóvenes y la del catequista de adultos se hacen imprescindibles
39 V, I, 0, 36,232 | siendo básica la figura del catequista de niños y adolescentes,
40 V, I, 0, 36,232 | conveniente ». (108)~– Un tipo de catequista que conviene promover es
41 V, I, 0, 36,232 | conviene promover es el del catequista para encuentros presacramentales, (109)
42 V, I, 0, 36,232 | urgentemente de otros tipos de catequista. Dichos sectores son: las
43 V, I, 0, 36,232 | Otras figuras de catequista pueden ser igualmente aconsejables.
44 V, I, 0, 36,232 | con realismo, los tipos de catequista que necesita. Es una tarea
45 V,II, 0, 39,235 | busca, por tanto, que el catequista sea lo más apto posible
46 V,II, 0, 39,235 | otra cosa que lograr que el catequista pueda animar eficazmente
47 V,II, 0, 39,235(118)| de la espiritualidad del catequista y de su formación.~
48 V,II, 0, 39,235 | catequesis permanente, el catequista no hace sino ahondar en
49 V,II, 0, 39,235 | directamente en la identidad del catequista y en su preparación. « La
50 V,II, 0, 39,235 | La unidad y armonía del catequista se deben leer desde esta
51 V,II, 0, 39,236 | formación busque capacitar al catequista para transmitir el Evangelio
52 V,II, 0, 39,236 | nombre.~Más en concreto, el catequista —en su formación— entra
53 V,II, 0, 40,237 | global de la formación del catequista y la pedagogía propia de
54 V,II, 0, 40,237 | proceso catequético. Al catequista le sería muy difícil improvisar,
55 V,II, 0, 41,238 | hace referencia al ser del catequista, a su dimensión humana y
56 V,II, 0, 41,238 | Después está lo que el catequista debe saber para desempeñar
57 V,II, 0, 41,238 | humana, requiere que el catequista conozca bien el mensaje
58 V,II, 0, 41,238 | formación tiende a hacer del catequista un educador del hombre y
59 V,II, 0, 42,239 | y evaluado, permitirá al catequista crecer en equilibrio afectivo,
60 V,II, 0, 42,239 | alimente y nutra la fe del catequista, haciéndole crecer como
61 V,II, 0, 42,239 | espiritualidad del propio catequista, (131) de modo que su acción
62 V,II, 0, 42,239 | lugar, la fe del propio catequista. En verdad, uno catequiza
63 V,II, 0, 42,239 | conciencia apostólica del catequista, su sentido evangelizador.
64 V,II, 0, 42,239 | vocación apostólica del catequista, alimentada con una formación
65 V,II, 0, 43 | formación bíblico-teológica del catequista~
66 V,II, 0, 43,240 | 240. Además de testigo, el catequista debe ser maestro que enseña
67 V,II, 0, 43,240 | doctrinal de la formación de un catequista es el mismo que el que la
68 V,II, 0, 43,241 | de ser tal que ayude al catequista a madurar en su propia fe,
69 V,II, 0, 43,241 | Finalmente ha de ser tal que el catequista « pueda no sólo transmitir
70 V,II, 0, 44,242 | 242. El catequista adquiere el conocimiento
71 V,II, 0, 44,242 | Es necesario que el catequista entre en contacto al menos
72 V,II, 0, 46,244 | también la del saber hacer. El catequista es un educador que facilita
73 V,II, 0, 46,244 | de la fe. En efecto, el catequista se prepara para facilitar
74 V,II, 0, 46,244 | de la mujer. La tarea del catequista es solo cultivar ese don,
75 V,II, 0, 46,244 | tratará de que madure en el catequista la capacidad educativa,
76 V,II, 0, 46,244 | más importante es que el catequista adquiera su estilo propio
77 V,II, 0, 46,245 | 245. Más en concreto: el catequista, particularmente el dedicado
78 V,II, 0, 47,246 | cristiana. Es en ella donde el catequista experimenta su vocación
79 V,II, 0, 47,247 | al trabajo personal del catequista, aparecen como muy convenientes. (150)~
80 V,II, 0, 48,248 | proceso formativo de un catequista. En muchos lugares tales
81 V,II, 0, 48,248(152)| La expresión « catequista de base » es utilizada en
82 Conclu, 0, 3, 4,288 | avanzadas, ni siquiera un catequista con la personalidad humana
83 Conclu, 0, 3, 4,288 | El es el principal catequista; El es el « maestro interior »
84 Conclu, 0, 3, 4,289 | de la espiritualidad del catequista están la paciencia y la
|