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 1 DeiVerbum,    6, 24        |                                     24. La Sagrada Teología se
 2 LumenGentium,    1, 6      |      alimenta y abriga" (cf. Ef., 5,24), a la que, por fin, enriqueció
 3 LumenGentium,    1, 7      |       sujeta a su Cabeza (Ef., 5,23-24). "Porque en El habita corporalmente
 4 LumenGentium,    1, 8      |             que la apacentara (Jn., 24,17), confiándole a él y
 5 LumenGentium,    2, 11     |         Cristo (Rom., 8,17; Col., 1 24; 2Tim., 2,11-12; 1Pe., 4,
 6 LumenGentium,    2, 13     |            10; Is., 60,4-7; Ap., 21,24). Este carácter de universalidad,
 7 LumenGentium,    2, 16     |            del Criador (cf. Rom., 1,24-25), o viviendo y muriendo
 8 LumenGentium,    3, 19     |             16-20; Mc., 16,15; Lc., 24,45-48; Jn., 20,21-23) y
 9 LumenGentium,    3, 21     |            cf. Rom. 15,16; Act., 20,24) y la administración del
10 LumenGentium,    3, 24     |                                     24. Los Obispos, en su calidad
11 LumenGentium,    3, 28     |         Sacerdote (Hebr., 5,1-10; 7,24; 9,11-28), para predicar
12 LumenGentium,    3, 28     |             y en verdad (cf. Jn., 4,24). Se afanan finalmente en
13 LumenGentium,    7, 49     |  tribulaciones de Cristo (cf. Col 1,24). Su fraterna solicitud
14 LumenGentium,    7, 51     |          será el Cordero (cf. Ap 21,24). Entonces toda la Iglesia
15 SacrosConcil,    1, 6      |            toda la Escritura" (Lc., 24,27), celebrando la Eucaristía,
16 SacrosConcil,    1, 24     |                                     24. En la celebración litúrgica
17 GaudiumSpes,    3, 24      |                                     24. Dios, que cuida de todos
18 AdGentes,    1, 3          |             por Jerusalén (Cf. Lc., 24,47), de suerte que lo que
19 AdGentes,    2, 12         |        creado según Dios (Cf. Ef.,4,24), y en quien se revela el
20 AdGentes,    4, 24         |                                     24. El hombre debe responder
21 PresbyterOrd,    1, 2(15)  |                     Cf. 1 Cor., 15, 24. ~
22 PresbyterOrd,    2, 4(24)  |              1, 23; Act., 6, 7; 12, 24; S. Agustín, In Ps., 44,
23 PresbyterOrd,    2, 7(65)  |      Jerónimo, In Isaiam, II, 3: PL 24, 61 A: "También nosotros
24 PresbyterOrd,    3, 12(95) |                            Cf. Lc., 24, 26. ~
25 PresbyterOrd,    3, 16(132)|    catholici sacerdotii, l. c., pp. 24-28; Pío XII, Encícl. Sacra
26 ApostActuos,    1, 4       |             cruz y sígame" (Mt., 16,24). Cultivando entre sí la
27 ApostActuos,    4, 16      |           Cf. 2 Cor., 4,10; Col., 1,24), pueden llegar a todos
28 ApostActuos,    5, 24      |                                     24. Es deber de la Jerarquía
29 PerfectCarit,    0, 24     |                                     24. Los sacerdotes y los educadores
30 ChristusDom,    2, 24      |                                     24. En cuanto se refiere a
31 ChristusDom,    3, 40      | establecidas ya en los números 23 y 24 de la demarcación de las
32 UnitatRedin,  Conc, 24     |                                     24. Expuestas brevemente las
33 OrientEccles,  Pro, 24     |                                     24. Corresponde a las Iglesias
34 InterMirific,    3, 24     |                                     24. Por lo demás, este santo