Doc., Cap.,  Párrafo

 1 DeiVerbum,    2, 8    |   habla sin intermisión con la Esposa de su amado Hijo; y el Espíritu
 2 DeiVerbum,    6, 23   |                         23. La esposa del Verbo Encarnado, es
 3 LumenGentium,    1, 4 |  Esposo. Pues el Espíritu y la Esposa dicen al Señor Jesús: "¡
 4 LumenGentium,    1, 6 |      de Dios ataviada como una esposa que se engalana para su
 5 LumenGentium,    1, 6 | representa como la inmaculada "esposa" del Cordero inmaculado (
 6 LumenGentium,    1, 7 |       Iglesia como a su propia Esposa, como el varón que amando
 7 LumenGentium,    2, 9 |     que persevera siendo digna esposa de su Señor, y no deja de
 8 LumenGentium,    5, 39|     amó a la Iglesia como a su esposa, entregándose a sí mismo
 9 LumenGentium,    5, 41|        con que Cristo amó a su Esposa y se entregó a sí mismo
10 LumenGentium,    6, 44|       vínculo indisoluble a su Esposa, la Iglesia. Y como los
11 LumenGentium,    6, 46|        misiones, ilustran a la Esposa de Cristo con la constante
12 SacrosConcil,    1, 7 | siempre consigo a su amadísima Esposa la Iglesia, que invoca a
13 SacrosConcil,    2, 47|       la Cruz y a confiar a su Esposa, la Iglesia, el Memorial
14 SacrosConcil,    3, 78|     fieles». La oración por la esposa, oportunamente revisada
15 SacrosConcil,    4, 84|      verdad la voz de la misma Esposa que habla al Esposo; más
16 SacrosConcil,    4, 85|       del altísimo honor de la Esposa de Cristo, ya que, mientras
17 GaudiumSpes,    5, 43 |    Santo, se ha mantenido como esposa fiel de su Señor y nunca
18 PerfectCarit,    0, 1 |        hijos, se presente como esposa que se engalana para su