I. PRINCIPIOS FUNDAMENTALES Y DIRECTRICES PRÁCTICAS
4.
Para comprender y acompañar el desarrollo de estas iniciativas, la Congregación
para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica ha
recogido una amplia documentación sobre los centros de formación entre
institutos existentes. El examen de esa documentación ha favorecido la
reflexión sobre algunas condiciones fundamentales para la eficacia formativa de
los centros y de sus múltiples iniciativas: la claridad sobre la finalidad del
centro, la determinación de la responsabilidad última y de las competencias
para la gestión, la calidad y la preparación del personal docente, la
articulación orgánica del programa y de la gradación de su desarrollo. Es
también de fundamental importancia, para crear un ambiente que ayude a vivir y
a profundizar la llamada a la vida consagrada, la presencia de las formadoras y
de los formadores, y la sintonía y la complementariedad del programa
intercongregacional con el específico de cada uno de los institutos.
5.
Dada la diversidad de las circunstancias en las que han surgido estos centros y
su experiencia más bien reciente, han surgido también interrogantes y problemas
que es oportuno señalar para su discernimiento y clarificación. Algunos se
refieren a la relación entre la identidad de cada instituto y a la comunión en
la diversidad, entre el propósito de los centros de ofrecer un servicio a todos
y la legítima libertad de los institutos de servirse de ellos o no. Otros se
refieren a la visión de la vida religiosa apostólica que está en la base del
proyecto pedagógico y, por lo mismo, de la articulación de los programas y de
los criterios de elección del personal docente. Otros, en fin, se refieren a la
participación efectiva de los responsables de la formación de los institutos, a
la verificación de la formación, a las condiciones reales que permiten
transformar la convivencia temporal en los centros en una experiencia de
profunda comunión eclesial y de auténtica formación espiritual y apostólica,
abierta a las necesidades de la evangelización.12
|