Centesimus annus
   Cap., N.
 1   1,  6      |        De ahí que la clave de lectura del texto leoniano sea la


Dominum et vivificantem
   Cap., N.
 2   3,  56     |      práctica —como método de lectura y de valoración de los hechos—


Evangelium vitae
   Cap., N.
 3   4,  80(104)| Christi », In Psalmos Davidis lectura, 6, 5.~
 4   4,  98     |    dignidad del hombre. En la lectura de la realidad, deben negarse


Fides et ratio
   Cap., N.
 5 Intro,  4    |     perspectiva incompleta en lectura universal. En realidad,
 6   2,  16     |       llama la atención en la lectura, hecha sin prejuicios, de
 7   2,  19     |     la naturaleza », con cuya lectura, mediante los instrumentos
 8   5,  55     |      que tiende a hacer de la lectura de la Sagrada Escritura
 9   7,  80     |      existencia humana. De la lectura del texto sagrado se podrían
10   7,  94     |     plena explicitación en la lectura constante que la Iglesia
11 Conclus,  105|     que « no es suficiente la lectura sin el arrepentimiento,


Redemptoris Mater
   Cap., N.
12   1,  10(27) |     Himno II en el Officio de Lectura. ~
13   3,  48     |  también una nueva y profunda lectura de cuanto el Concilio ha


Redemptoris missio
   Cap., N.
14   3,  27     |     la Iglesia apostólica.~La lectura de los Hechos nos hace entender
15   5,  51     |    reúnen para la oración, la lectura de la Escritura, la catequesis,


Sollicitudo rei socialis
   Cap., N.
16   2,  5      |    enseñanza, a través de una lectura atenta de la Encíclica,
17   3,  20     |      a la luz de una peculiar lectura de la historia.~Cada una
18   5          |                        V. UNA LECTURA TEOLÓGICA DE LOS PROBLEMAS


Veritatis Splendor
   Cap., N.
19   2,  53     | acompañada por el esfuerzo de lectura y formulación propio de