Dominum et vivificantem
Cap., N. 1 2, 44 | tinieblas, que, iniciada en los orígenes del mundo, durará, como
2 3, 65(283)| Cf. Orígenes, De oratione, 2: PG 11,
Ecclesia de Eucharistia
Cap., N. 3 II, 21 | de la Eucaristía en los orígenes mismos de la Iglesia. Los
4 III, 28 | que se remonta hasta los orígenes, de ordenaciones episcopales
Evangelium vitae
Cap., N. 5 2, 38 | no sólo está ligada a sus orígenes, a su procedencia divina,
6 2, 44 | salvaguardar la vida humana en sus orígenes, especialmente la vida aún
7 3, 61 | clara y unánime, desde los orígenes hasta nuestros días, en
8 3, 73 | de conciencia. Desde los orígenes de la Iglesia, la predicación
Fides et ratio
Cap., N. 9 4, 38(31) | Orígenes, Contra Celso, 3, 55: SC
10 4, 39 | significativa la figura de Orígenes. Contra los ataques lanzados
11 4, 39 | lanzados por el filósofo Celso, Orígenes asume la filosofía platónica
Redemptoris Mater
Cap., N. 12 1, 8(21) | interpretación amplia y variada: cf. Orígenes, In Lucam homiliae, VI,
13 1, 23(47) | conocido lo que escribe Orígenes sobre la presencia de María
Redemptoris missio
Cap., N. 14 1, 5 | 5. Remontándonos a los orígenes de la Iglesia, vemos afirmado
15 3, 27 | cf. Act 13, 1-4). En sus orígenes, por tanto, la misión es
16 6, 61 | expansión misionera de los orígenes junto a los Apóstoles encontramos
Slavorum apostoli
Cap., N. 17 7, 24 | subsiste el hecho de que los orígenes del cristianismo en Polonia
Veritatis Splendor
Cap., N. 18 1, 26 | pastoral, vigilaron, desde los orígenes de la Iglesia, sobre la
|