(...) Ut unum sint
    Cap., N.
501   3,  91     |           Bienaventurado eres Simón, hijo de Jonás, porque no te ha
502 Exhort,  102 |            existe entre el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo ». 162~


Veritatis Splendor
    Cap., N.
503   1,  18     |         vocación de ser «hijos en el Hijo».~Esta vocación al amor
504   1,  19     |            manera que verle a él, al Hijo, es ver al Padre (cf. Jn
505   1,  19     |              10). Por eso, imitar al Hijo, «imagen de Dios invisible» (
506   1,  24     |           creamos en el nombre de su Hijo, Jesucristo, y que nos amemos
507   1,  25     |              en la persona misma del Hijo de Dios hecho hombre, deben
508   2,  45     |           reproducir la imagen de su Hijo» (Rm 8, 29). En este designio
509   2,  73     |         cristiano es creatura nueva, hijo de Dios, y mediante sus
510   2,  73     |        divergencia con la imagen del Hijo que es el primogénito entre
511   2,  73     |             beatitud con Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo 123. Cristo «
512   3,  87     |            de la responsabilidad del Hijo del hombre, que «no ha venido
513   3,  115    |            de nuestra adopción en el Hijo único (cf. Ef 1, 4-6). Particularmente,
514 Conclus,  118|   misericordia porque Jesucristo, su Hijo, es enviado por el Padre
515 Conclus,  118|            junto con Pedro, como «el Hijo de Dios vivo» (Mt 16, 16).
516 Conclus,  118|         esclavo, ha sacrificado a su Hijo 181: su misericordia para
517 Conclus,  120|            cuando acepta a Juan como hijo; cuando, junto con Cristo,
518 Conclus,  120|      custodia en su seno virginal al Hijo de Dios hecho hombre, lo
519 Conclus,  120|             sacrificio de Cristo, su Hijo. Ninguna absolución, incluso