Centesimus annus
Cap., N. 1 2, 13 | contradicción que él siente en su corazón entre el deseo de una plenitud
2 3, 23 | haber mantenido firme el corazón de los hombres durante aquella
3 3, 24 | y de vida que hay en el corazón de todo hombre. Esta búsqueda
4 3, 24 | prometido desenraizar del corazón humano la necesidad de Dios;
5 3, 24 | sin trastocar ese mismo corazón.~ ~
6 3, 25 | que tiene en sus manos el corazón de los hombres. Uniendo
7 3, 25 | mal continúa incluso en el corazón del hombre.~Lo que la Sagrada
8 5, 47 | del hijo a crecer bajo el corazón de la madre, después de
9 5, 51 | importante labor se realiza en el corazón del hombre, y el modo como
10 6, 62 | nombre os bendigo a todos de corazón.~ ~
Dives in misericordia
Cap., Párrafo 11 1, 1 | con mente abierta y con el corazón. Ya en mi citada encíclica
12 1, 1 | nuestra inteligencia y nuestro corazón a Cristo mismo. Hoy quiero
13 1, 2 | de la vida y arrancar del corazón humano la idea misma de
14 2, 3 | que viven en aflicción de corazón o sufren a causa de la injusticia
15 3, 4(52)| interior: es una exigencia del corazón. Es una variante casi «
16 5, 7 | se insinúa asimismo en su corazón y puede hacerle « perecer
17 5, 8 | está a la puerta y llama al corazón de todo hombre,93 sin coartar
18 5, 8 | las posibilidades del « corazón humano » en su punto de
19 5, 9 | con el sacrificio de su corazón la propia participación
20 5, 9 | ella, María, ha acogido de corazón ese misterio: aquella dimensión
21 5, 9 | con el sacrificio de su corazón de madre, junto con su «
22 5, 9 | singular y excepcional el corazón de la que fue Madre del
23 5, 9 | el tacto singular de su corazón materno, sobre su sensibilidad
24 6, 10 | que hunde sus raíces en el corazón humano. Son muchos los elementos
25 7 | Conservando siempre en el corazón la elocuencia de estas palabras
26 7, 13 | venerarla dirigiéndose al corazón de Cristo. En efecto, precisamente
27 7, 13 | Cristo en el misterio de su corazón, nos permite detenernos
Dominum et vivificantem
Cap., N. 28 Intro, 2 | trata de vislumbrar en el corazón de los hombres de hoy: un
29 1, 16 | a todos los que abren su corazón a estos dones, a veces mediante
30 1, 16 | cuando meditaba en su corazón los « misterios » del Mesías
31 1, 21 | él y que se derrama en su corazón, penetra su mismo « yo »,
32 1, 24 | del Profeta: « Os daré un corazón nuevo, infundiré en vosotros
33 1, 25 | habita en la Iglesia y en el corazón de los fieles como en un
34 1, 25(96) | Espíritu Santo como el «corazón» y el «alma» de la Iglesia:
35 1, 26 | aspiraciones más profundas del corazón humano, el cual nunca se
36 2, 31 | hombre corresponde, en el corazón del Redentor, la oblación
37 2, 39 | y, en cierto modo, en el corazón mismo de la inefable Trinidad?
38 2, 42 | tanto, la conversión del corazón humano, que es condición
39 2, 43 | claramente a « los oídos de su corazón advirtiéndole ... haz esto,
40 2, 43 | puesta por el Creador en el corazón del hombre, es la propiedad
41 2, 44 | que hunde sus raíces en el corazón humano. Son muchos los elementos
42 2, 45 | la verdad y el amor en el corazón mismo del hombre. Se sabe
43 2, 45 | inscribiéndose en el « corazón » de la Trinidad, en virtud
44 2, 45 | auténtica conversión del corazón: es la « metanoia » evangélica.~
45 2, 45 | evangélica.~La fatiga del corazón humano y la fatiga de la
46 2, 45(177)| pensamos acaso que el corazón del hombre no sea un abismo ? ¿
47 2, 45(177)| quién se puede leer en su corazón ? »~
48 2, 47 | suele llamar « dureza de corazón ».184 En nuestro tiempo
49 2, 47 | esta actitud de mente y corazón corresponde quizás la pérdida
50 3, 49 | 49. El pensamiento y el corazón de la Iglesia se dirigen
51 3, 51 | mismo tiempo hizo que su corazón fuera perfectamente obediente
52 3, 51 | profunda, es la apertura del corazón humano ante el don: ante
53 3, 53 | buena voluntad, en cuyo corazón obra la gracia de modo visible.
54 3, 54 | pensamiento, conciencia, corazón; es realidad psicológica
55 3, 55 | pecado que toma posesión del corazón humano, en el que « la carne
56 3, 55 | y la lucha que turba el corazón humano. Leemos en la Carta
57 3, 56 | rebelión que tiene lugar en el corazón humano, encuentra en las
58 3, 56 | eliminarlas de la sociedad y del corazón mismo del hombre.~Se puede
59 3, 60 | la verdad, presente en el corazón y en la conciencia de los
60 3, 60 | virtud de su Espíritu en el corazón del hombre, no sólo despertando
61 3, 65 | alienta » la oración en el corazón del hombre en toda la inmensa
62 3, 65 | Espíritu, la oración brota del corazón del hombre no obstante las
63 3, 65 | de aquel abismo que es el corazón del hombre: una profundidad
64 3, 65 | es el don, que viene al corazón del hombre junto con la
65 3, 66 | Cenáculo que lleva en su corazón. La Iglesia persevera en
66 3, 66 | de esta esperanza en el corazón de la Iglesia.~En la perspectiva
67 Conclus, 67 | estas consideraciones en el corazón de la Iglesia y en el corazón
68 Conclus, 67 | corazón de la Iglesia y en el corazón del hombre. El camino de
69 Conclus, 67 | Iglesia pasa a través del corazón del hombre porque está aquí
70 Conclus, 67 | custodio de la esperanza en el corazón del hombre: la esperanza
71 Conclus, 67 | historia del mundo a través del corazón del hombre. En este viene
72 Conclus, 67 | el « consuelo » cuando el corazón humano llora y está tentado
73 Conclus, 67 | dirige la Iglesia, que es el corazón de la humanidad, para pedir
74 Conclus, 67 | Trinidad. ~La Iglesia con su corazón, que abarca todos los corazones
Ecclesia de Eucharistia
Cap., N. 75 INT, 9 | aquellas consideraciones con el corazón aún más lleno de emoción
76 II, 24 | fraterna que alberga el corazón humano y, al mismo tiempo,
77 II, 25 | palpar el amor infinito de su corazón. Si el cristianismo ha de
78 III, 31 | sembrar y desarrollar en el corazón del joven el germen de la
79 IV, 36 | el « cuerpo » y con el « corazón »; 72 es decir, hace falta,
80 IV, 44 | cada vez más “con un mismo corazón” ».94~
81 VI, 56 | acogiera de nuevo en su seno el corazón que había latido al unísono
82 CON, 59 | petrino. Lo hago con el corazón henchido de gratitud. Desde
83 CON, 59 | abrirles los ojos a la luz y el corazón a la esperanza (cf. Lc 24,
84 CON, 59 | tesoro de la Iglesia, el corazón del mundo, la prenda del
85 CON, 61 | sentir en lo profundo del corazón, como dirigidas a nosotros,
86 CON, 62 | sus propios límites, el corazón, iluminado por la gracia
87 CON, 62 | meta, a la cual aspira el corazón, sediento como está de alegría
Evangelium vitae
Cap., N. 88 Intro, 2 | profundo y persuasivo en el corazón de cada persona, creyente
89 Intro, 2 | ley natural escrita en su corazón (cf. Rm 2, 14-15) el valor
90 Intro, 3 | del hombre repercute en el corazón mismo de la Iglesia, afecta
91 1, 8 | acechando a la puerta de su corazón, esperando lanzarse sobre
92 1, 24 | modo que « su insensato corazón se entenebreció » (1, 21); «
93 2, 29 | escrito de algún modo en el corazón mismo de cada hombre y mujer,
94 2, 31 | puesto por el Creador en el corazón de los hombres: « El ha
95 2, 35 | aspiración profunda de su corazón, todo hombre hace suya la
96 2, 35 | Señor, para ti y nuestro corazón está inquieto hasta que
97 2, 40 | desde el principio en el corazón del hombre, en su conciencia.
98 2, 49 | que Dios ha inscrito en el corazón de los hombres y ha entregado
99 2, 49 | purificaré. Y os daré un corazón nuevo, infundiré en vosotros
100 2, 49 | 31-34). Gracias a este « corazón nuevo » se puede comprender
101 2, 49 | cumple la Ley y se da un corazón nuevo mediante su Espíritu.
102 2, 51 | concédenos escuchar con corazón dócil y generoso toda palabra
103 3, 57 | encuentra en el propio corazón (cf. Rm 2, 14-15), es corroborada
104 3, 62 | Ley de Dios, escrita en el corazón de cada hombre, reconocible
105 3, 67 | El deseo que brota del corazón del hombre ante el supremo
106 3, 67 | certeramente por instinto de su corazón cuando aborrece y rechaza
107 3, 70 | natural » inscrita en el corazón del hombre, es punto de
108 4, 80 | Evangelio de la vida al corazón de cada hombre y mujer e
109 4, 82 | encontrar un fuerte eco en el corazón de cuantos, en la Iglesia,
110 4, 100 | cada familia y desde el corazón de cada creyente, con iniciativas
111 Conclus, 103| atravesando el mundo y marcando el corazón de los hombres, haciendo
Fides et ratio
Cap., N. 112 Intro | verdad. Dios ha puesto en el corazón del hombre el deseo de conocer
113 Intro, 1 | desde siempre acucia el corazón del hombre: de la respuesta
114 1, 15 | está en tu boca y en tu corazón para que la pongas en práctica » (
115 1, 15 | creen en Él o lo buscan con corazón sincero. El fin último de
116 2, 16 | medita sus caminos en su corazón, y sus secretos considera.
117 2, 16 | significativa a este respecto: « El corazón del hombre medita su camino,
118 2, 17 | supone tal dinamismo que el corazón del hombre, incluso desde
119 3, 24 | en lo más profundo del corazón del hombre está el deseo
120 3, 28 | razón y la inconstancia del corazón oscurecen a menudo y desvían
121 3, 29 | está tan radicada en el corazón del hombre que tener que
122 3, 33(28) | interrogantes están en el corazón de cada hombre, como lo
123 4, 38 | interlocutor a la conversión del corazón y a la petición del Bautismo.
124 4, 48 | con rectitud de mente y corazón, pueden ayudar a descubrir
125 7, 90(106)| el alma del hombre, en su corazón, en su conciencia »: Redemptor
126 Conclus, 108| Verdad y conservándola en su corazón, la ha compartido con toda
Laborem exercens
Cap., Párrafo 127 5, 25 | inquietudes de la mente y del corazón: «Los cristianos, lejos
128 5, 26 | lo que hagáis, hacedlo de corazón como obedeciendo al Señor
129 5, 27 | virtud de su Espíritu en el corazón del hombre... purificando
130 5, 27 | me es grato impartir de corazón a vosotros, venerados Hermanos,
Redemptor hominis
Cap., Párrafo 131 Heren, 1 | vuelven mi pensamiento y mi corazón en esta hora solemne que
132 Heren, 1 | entendimiento, de la voluntad y del corazón humano, nos permite repetir
133 Heren, 4 | Maestro que era «humilde de corazón»,13 esté fundada asimismo
134 2, 7 | entendimiento, de la voluntad y del corazón es para nosotros ésta: hacia
135 2, 7(36)| Cfr. Letanías del Sagrado Corazón. ~
136 2, 8 | expresa con la palabra «corazón». Cristo, Redentor del mundo,
137 2, 8 | hombre y ha entrado en su «corazón». Justamente pues enseña
138 2, 8 | inteligencia de hombre, amó con corazón de hombre. Nacido de la
139 2, 9 | plenitud de la justicia en un Corazón humano: en el Corazón del
140 2, 9 | un Corazón humano: en el Corazón del Hijo Primogénito, para
141 2, 12 | el alma del hombre, en su corazón, en su conciencia. ¡Qué
142 3, 14 | de la conciencia y del corazón. El hombre en su realidad
143 4, 18 | e inquieto está nuestro corazón hasta que descanse en ti».125
144 4, 18 | tierra en sequía! ¡sana el corazón enfermo! ¡Lava las manchas,
145 4, 18 | formas de insaciabilidad del corazón humano. Esta súplica se
146 4, 22 | hombre mi pensamiento y mi corazón, deseo con ello entrar y
147 4, 22 | podemos decirlo, bajo el corazón de la Virgen de Nazaret,
148 4, 22 | Desde aquel momento este corazón virginal y materno al mismo
149 4, 22 | inextinguible. Y por ello, este corazón debe ser también maternalmente
Redemptoris Mater
Cap., N. 150 1, 14 | aceptando plenamente y con corazón abierto todo lo que está
151 1, 17 | una particular fatiga del corazón, unida a una especie de
152 1, 18 | Unigénito y se asoció con corazón maternal a su sacrificio,
153 1, 20 | conservaba cuidadosamente en su corazón » (cf. Lc 1, 38.45; 2, 19.
154 2, 26 | cuidadosamente todas las cosas en su corazón » (Lc 2, 19; cf. Lc 2, 51).~
155 2, 27 | Iglesia, y permanece en el corazón de la Iglesia, escondida
156 2, 28 | mediante el conocimiento y el corazón. Se adquiere o se vuelve
157 2, 35 | no deja de vibrar en el corazón de la Iglesia a través de
158 2, 35 | dispersa a los soberbios de corazón,~derriba del trono a los
159 2, 36 | María, el éxtasis de su corazón. Resplandece en ellas un
160 2, 37 | ha hecho surgir en el corazón de Eva, la primera mujer,
161 2, 37 | La Iglesia, acudiendo al corazón de María, a la profundidad
162 3, 43 | guardaba y meditaba en su corazón (cf. Lc 2, 19. 51) todo
163 3, 46 | sentimientos, de que es capaz el corazón humano: la oblación total
164 Conclus, 51 | en cierto sentido, en el corazón de todo lo creado y, directamente,
165 Conclus, 51 | creado y, directamente, en el corazón de todo el Pueblo de Dios,
166 Conclus, 51 | el Pueblo de Dios, en el corazón de la Iglesia. Cuán admirablemente
167 Conclus, 52 | renovación de esta visión en el corazón de todos los creyentes.~
Redemptoris missio
Cap., N. 168 1, 10 | buena voluntad, en cuyo corazón obra la gracia de modo invisible.
169 1, 11 | exigencias y aspiraciones del corazón humano y que es siempre «
170 3, 26 | significa tener « un solo corazón y una sola alma » (Act 4,
171 3, 26 | la alegría y sencillez de corazón » (Act 2, 46) eran dinámicamente
172 3, 28 | acción del Espíritu en el corazón del hombre, mediante las «
173 3, 28 | virtud de su Espíritu en el corazón del hombre, no sólo despertando
174 3, 29 | presente misteriosamente en el corazón de cada persona.46~Este
175 5, 47 | oír esto, dijeron con el corazón compungido a Pedro y a los
176 5, 59 | lleva a la conversión del corazón y de la mentalidad; ayuda
177 6, 62 | externo, sino que alcanza al corazón mismo de la Iglesia. Por
178 6, 65 | vocación misionera en el corazón de cada uno y suscita al
179 6, 67 | sacerdotes deben de tener corazón y mentalidad misioneros,
180 7, 79 | de estas vocaciones es el corazón de la cooperación: el anuncio
181 8, 88 | Cristo lo espera en el corazón de cada hombre.~ ~
Slavorum apostoli
Cap., N. 182 3, 11 | sentimiento puramente natural del corazón humano.~ ~
183 4, 12 | hermanos como « eslavos de corazón », éstos sin embargo siguen
Sollicitudo rei socialis
Cap., N. 184 2, 6 | que no encuentre eco en su corazón ».9 Estas palabras expresan
Ut unum sint
Cap., N. 185 Intro, 1 | fuerza cada vez mayor en el corazón de los creyentes, especialmente
186 1, 18 | lo más profundo de cada corazón humano.~ ~
187 1, 21 | 21. « Esta conversión del corazón y santidad de vida, junto
188 1, 26 | amor ».48~La conversión del corazón, condición esencial de toda
189 2, 45 | cada vez más « con un mismo corazón ». En ocasiones, el poder
190 2, 61 | celebrar la Eucaristía, corazón y modelo para la comunidad
Veritatis Splendor
Cap., N. 191 Intro, 1 | en lo más profundo de su corazón la nostalgia de la verdad
192 Intro, 1 | decisivas, como son las del corazón y de la conciencia moral.~ ~
193 Intro, 3 | buscan a Dios con sincero corazón e intentan en su vida, con
194 Intro, 4 | que están grabados en el corazón del hombre y forman parte
195 1, 7 | plenamente el anhelo del corazón humano.~Para que los hombres
196 1, 8 | Desde la profundidad del corazón surge la pregunta que el
197 1, 9 | dirigiendo la mente y el corazón al único que es Bueno: «
198 1, 9 | de ser amado «con todo el corazón, con toda el alma y con
199 1, 10 | Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con
200 1, 10 | tu fuerza. Queden en tu corazón estos preceptos que yo te
201 1, 11 | el núcleo fundamental, el corazón de la Ley, del que derivan
202 1, 12 | mediante la ley inscrita en su corazón (cf. Rm 2, 15), la «ley
203 1, 12 | de modo definitivo en el corazón del hombre (cf. Jr 31, 31-
204 1, 12 | había desfigurado aquel corazón (cf. Jr 17, 1). Entonces
205 1, 12 | Entonces será dado «un corazón nuevo» porque en él habitará «
206 1, 15 | amor al prójimo brota de un corazón que ama y que, precisamente
207 1, 15 | adulterio con ella en su corazón» (Mt 5, 21-22. 27-28). Jesús
208 1, 21 | fe, Cristo habita en el corazón del creyente (cf. Ef 3,
209 1, 22 | cuenta la dureza de vuestro corazón, os permitió repudiar a
210 1, 23 | sana, cura y transforma el corazón del hombre por medio de
211 1, 25 | vida eterna?» brota en el corazón de todo hombre, y es siempre
212 1, 26 | entre el compromiso del corazón y las acciones que lo expresan
213 2, 44 | Señor son rectos, gozo del corazón; claro el mandamiento del
214 2 | de esa ley escrita en su corazón» (Rm 2, 15)~ ~
215 2, 51 | y actúa rectamente en el corazón del hombre que obra la justicia,
216 2, 54 | Dios tiene su base en el corazón de la persona, o sea, en
217 2, 54 | necesario, en los oídos de su corazón, llamándolo siempre a amar
218 2, 54 | ley escrita por Dios en su corazón, en cuya obediencia está
219 2, 57 | de esa ley escrita en su corazón, atestiguándolo su conciencia
220 2, 59 | ley de Dios escrita en el corazón. Precisamente, del juicio
221 2, 59 | scintilla animae»), brilla en el corazón de cada hombre. Sin embargo,
222 2, 64 | 12, 2). En realidad, el corazón convertido al Señor y al
223 2, 66 | íntimo del hombre, de su «corazón» (cf. Rm 10, 10), y desde
224 2, 73(123)| buena voluntad, en cuyo corazón actúa la gracia de modo
225 2, 77 | externas sin atender al corazón (cf. Mc 7, 20-21; Mt 15,
226 3, 101 | religiosa que habita en el corazón de todo ser humano: es el
227 3, 108 | de Jesús, acogido por el corazón humilde y dócil del creyente,
228 3, 112 | dimensión espiritual del corazón humano y su vocación al
229 3, 115 | reconocer tales mandamientos, el corazón cristiano y nuestra caridad
230 3, 117 | 117. En el corazón del cristiano, en el núcleo
231 Conclus, 119| quien sabe conservar un «corazón entero» (Sal 86, 11). Por
232 Conclus, 120| de Dios, que le dilata el corazón y la capacita para abrazar
233 Conclus, 120| Acogiendo y meditando en su corazón acontecimientos que no siempre
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