Centesimus annus
Cap., N.
1 Intro, 3 | forma parte también la actividad fecunda de millones y millones
2 1, 4 | que, en la esfera de la actividad económica y social, se separa
3 1, 6 | trabajo, definido como «la actividad ordenada a proveer a las
4 1, 6 | y se realiza mediante su actividad laboral. Al mismo tiempo,
5 2, 15 | esfera de autonomía de la actividad económica, donde no debe
6 2, 15 | trabajo su dignidad de libre actividad del hombre. Son reformas
7 2, 15 | al libre ejercicio de la actividad económica, encauzada hacia
8 2, 16 | daño, desarrolló una vasta actividad sindical, reformista, lejos
9 2, 16 | recordar aquí su múltiple actividad, con una notable aportación
10 4, 32 | un sector de la múltiple actividad humana y en ella, como en
11 4, 36 | constitución corpórea, y la actividad económica estaba orientada
12 4, 39 | dimensión de la compleja actividad humana. Si es absolutizada,
13 4, 43 | capital necesario para su actividad y los que colaboran con
14 4, 43 | Colabora, asimismo, en la actividad de los que trabajan en la
15 5, 47 | Semejantes desviaciones de la actividad política con el tiempo producen
16 5, 48 | sector de la economía. La actividad económica, en particular
17 5, 48 | el deber de secundar la actividad de las empresas, creando
18 5, 51 | 51. Toda la actividad humana tiene lugar dentro
Dives in misericordia
Cap., Párrafo
19 5, 7 | mesiánico de Cristo y su actividad entre los hombres terminan
20 6, 10 | solamente unos decenios. La actividad creadora del hombre, su
Dominum et vivificantem
Cap., N.
21 1, 7 | que en el misterio y en la actividad de la Iglesia continúa incesantemente
22 1, 18 | Isaías, al comienzo de su actividad mesiánica. Esto acaecerá
23 1, 19 | embargo, al comienzo de su actividad pública, su misión mesiánica
24 1, 20 | de Jesús de Nazaret cuya actividad entera se desarrollará bajo
25 1, 22 | guiar interiormente toda su actividad salvífica. Junto al Jordán,
26 1, 25(94) | Decreto Ad gentes, sobre la actividad rnisionera de la Iglesia,
27 2, 31 | oyentes al comienzo de su actividad mesiánica.117 La conversión
28 3, 60 | del pensamiento y de la actividad humana, tiene de bueno,
29 3, 61 | tras la conclusión de la actividad mesiánica de Cristo en la
Ecclesia de Eucharistia
Cap., N.
30 II, 21(37) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
31 III, 30 | diálogo en el ámbito de la actividad ecuménica. Hemos de dar
Evangelium vitae
Cap., N.
32 2, 34 | hombre en el vértice de la actividad creadora de Dios, como su
33 3, 69 | modo, todo político, en su actividad, debería distinguir netamente
34 4, 82 | diálogo personal y en cada actividad educativa. A los educadores,
Fides et ratio
Cap., N.
35 Intro, 4 | elaborar, a través de la actividad filosófica, una forma de
36 Intro, 5 | mirada hacia esta peculiar actividad de la razón. Me impulsa
37 2, 19 | estructura del mundo y la actividad de los elementos [...],
38 3, 31 | por medio de la peculiar actividad crítica del pensamiento.
39 4, 47 | frutos de esta múltiple actividad del hombre se traducen muy
40 6, 69(92) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
41 7, 86 | consiguientes riesgos para la actividad filosófica.~La primera es
42 Conclus, 105| abandonarse a la alegría, la actividad disociada de la religiosidad,
43 Conclus, 106| los diversos ámbitos de la actividad humana con el ejercicio
Laborem exercens
Cap., Párrafo
44 Intro | circunstancias; significa toda actividad humana que se puede o se
45 Intro | resto de las criaturas, cuya actividad, relacionada con el mantenimiento
46 Intro, 2 | de los Episcopados o la actividad de los diversos centros
47 2, 4 | sin duda alguna como una actividad a desarrollar en el mundo.
48 2, 4 | trabajo entendido como una actividad «transitiva», es decir,
49 2, 4 | en sí y que, mediante la actividad consciente del hombre, pueden
50 2, 5 | un campo primario de la actividad económica y un factor indispensable
51 2, 5 | industria y en la agricultura la actividad del hombre ha dejado de
52 3, 11 | organizaciones que dedican su actividad social o también científico-social
53 4, 20 | debe también adaptarse toda actividad social que tenga como finalidad
54 4, 20 | particulares.~En este sentido la actividad de los sindicatos entra
55 4, 20 | precisamente este campo de actividad. Se debe siempre desear
56 4, 22 | pueda integrarse en una actividad productora para la que sea
57 5, 25 | cierta para los creyentes: la actividad humana individual y colectiva
58 5, 25 | asuntos profanos y por su actividad, elevada desde dentro por
59 5, 26 | enseñanza del Vaticano II: «La actividad humana, así como procede
60 5, 26 | ésta es la norma de la actividad humana que, de acuerdo con
61 5, 27 | cruz de cada día86 en la actividad que ha sido llamado a realizar.~
Redemptor hominis
Cap., Párrafo
62 Heren, 3 | perseverancia por Pablo VI, cuya actividad he podido observar de cerca.
63 Heren, 4 | hombres de la Iglesia y a su actividad. Tal crítica creciente ha
64 Heren, 4 | constituye su carácter y su actividad humana, que sea siempre
65 Heren, 5 | Sínodo de los Obispos, cuya actividad no sólo ha dado una nueva
66 Heren, 5 | Iglesia, conviene subrayar la actividad de los diversos Sínodos
67 Heren, 6 | Pablo VI, valiéndose de la actividad del Secretariado para la
68 Heren, 6 | responsable. La verdadera actividad ecuménica significa apertura,
69 Heren, 6 | lo que se ha dicho a la actividad que tiende al acercamiento
70 2, 7 | de todos los campos de la actividad en que la Iglesia se expresa,
71 3, 13 | de la presencia o de la actividad institucional de la Iglesia.
72 3, 13 | breve y más breve aún su actividad pública.~Jesucristo es el
73 3, 15 | frutos de esta múltiple actividad del hombre se traducen muy
74 3, 17 | derechos de la religión y de la actividad de la Iglesia. No se trata
75 4, 18 | y da sentido a toda su actividad. Por esta fuerza, la Iglesia
76 4, 19 | tiempo fundamental de la actividad de la Iglesia, en la que
77 4, 19 | Religiosas, que se dedican a la actividad catequística por amor al
78 4, 19 | tantos laicos, que en esta actividad encuentran la expresión
79 4, 20 | de su vitalidad y de su actividad, es esta la Iglesia de la
80 4, 21 | consciente de la propia vida y actividad. Las iniciativas del Concilio
Redemptoris Mater
Cap., N.
81 1, 20 | cuando Jesús comenzó su actividad mesiánica, María no le acompañaba
82 1, 23 | María al comienzo de la actividad mesiánica de Cristo, otro
Redemptoris missio
Cap., N.
83 Intro, 1 | más de la urgencia de tal actividad a la cual dedico la presente
84 Intro, 1 | querido renovar la vida y la actividad de la Iglesia según las
85 Intro, 2 | publicación del Decreto sobre la actividad misionera Ad gentes y a
86 Intro, 2 | y mujeres dedicados a la actividad misionera y a cuantos les
87 Intro, 2 | países a los que se dirige la actividad misionera, que ésta tiene
88 1, 7 | 7. La urgencia de la actividad misionera brota de la radical
89 1, 9(15) | Decr. Ad gentes, sobre la Actividad misionera de la Iglesia,
90 1, 9(16) | Decr. Ad gentes, sobre la Actividad misionera de la Iglesia,
91 2, 20 | y las finalidades de la actividad misionera, sino que los
92 2, 20 | con su testimonio y su actividad, como son el diálogo, la
93 3, 28 | en los esfuerzos de la actividad humana encaminados a la
94 3, 28(36) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
95 3, 28 | ser.39~La presencia y la actividad del Espíritu no afectan
96 3, 28(42) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
97 3, 29(43) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
98 3 | La actividad misionera está aún en sus
99 3, 30 | exige un nuevo impulso en la actividad misionera de la Iglesia.
100 4, 31 | diversas. Ante todo, se da la actividad misionera que vamos a llamar
101 4, 31 | conciliar: se trata de una actividad primaria de la Iglesia,
102 4, 31(49) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
103 4, 32 | sucesivos.~Por otra parte, la actividad misionera ha dado ya abundantes
104 4, 32 | si aún se puede hablar de actividad misionera específica o de
105 4, 32 | misionero », para calificar toda actividad de la Iglesia.~Tal entorpecimiento
106 4, 32 | nuevo respiro a la misma actividad misionera, concebida no
107 4, 33 | diferencias en cuanto a la actividad dentro de esta misión de
108 4, 33 | aquella a la cual se dirige la actividad misionera de la Iglesia:
109 4, 33(51) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
110 4, 33 | En ellas se desarrolla la actividad o atención pastoral de la
111 4, 34 | 34. La actividad misionera específica, o
112 4, 34 | por el Evangelio.54 Esta actividad se distingue de las demás
113 4, 34 | nueva evangelización y actividad misionera específica, y
114 4, 36 | Grandes obstáculos para la actividad misionera de la Iglesia
115 4, 36(57) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
116 4, 37 | Ámbitos territoriales. ~La actividad misionera ha sido definida
117 4, 37 | también es verdad que la actividad misionera ad gentes, al
118 4, 37(59) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
119 4, 37 | las que debe dirigirse la actividad misionera. Hay países, áreas
120 4, 37 | los tiempos modernos la actividad misionera se ha desarrollado
121 4, 37 | cuales debe orientarse la actividad misionera de la Iglesia.
122 4, 39 | Todas las formas de la actividad misionera están marcadas
123 4, 39(63) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
124 4, 39 | pretextos más variados a la actividad misionera de la Iglesia;
125 4, 40 | 40. La actividad misionera representa aún
126 4, 40 | humanidad. EL balance de la actividad misionera en los tiempos
127 5, 41 | 41. « La actividad misionera es, en última
128 5, 41(68) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
129 5, 42(70) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
130 5, 44 | Todas las formas de la actividad misionera están orientadas
131 5, 44(73) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
132 5, 44 | centrada en Cristo, así la actividad misionera tiende a la proclamación
133 5, 44(74) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
134 5, 45 | invisibles, pero profundos, a la actividad evangelizadora de toda la
135 5, 48 | central y específica de la actividad misionera, hasta el punto
136 5, 48(78) | Decr. Ad. gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
137 5, 48 | misionera y se pasa a la actividad pastoral. No obstante, algunos
138 5, 48(79) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
139 5, 49(80) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
140 5, 50 | vínculos existentes entre actividad ecuménica y actividad misionera
141 5, 50 | entre actividad ecuménica y actividad misionera hacen necesario
142 5, 50 | cristianos, a fin de que la actividad misionera sea más incisiva.
143 5, 50 | culturales y religiosos ».82~La actividad ecuménica y el testimonio
144 5, 52 | 52. Al desarrollar su actividad misionera entre las gentes,
145 5, 52(89) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
146 5, 55(98) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la lglesia,
147 5, 55(99) | Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
148 5, 55(101)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
149 5, 55(102)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
150 5, 56 | interés, sino que es una actividad con motivaciones, exigencias
151 5, 56(104)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
152 5, 57(107)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
153 5, 59 | éticos y religiosos. La actividad misionera lleva a los pobres
154 5, 60 | atestiguan el espíritu de toda la actividad misionera: El amor, que
155 6, 62(117)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia.
156 6 | primeros responsables de la actividad misionera~ ~
157 6, 63(119)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
158 6, 63 | considerar especialmente la actividad misionera, deber supremo
159 6, 63(122)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
160 6, 63 | dirigir y coordinar la actividad misionera... Procure, además,
161 6, 63 | Procure, además, que la actividad apostólica no se limite
162 6, 66 | necesarios »,133 no sólo para la actividad misionera ad gentes, como
163 6, 66(133)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
164 6, 67(134)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
165 6, 68(138)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
166 6, 68(139)| Decr. Ad gentes sobre la actividad misionera de la Iglesia,
167 6, 69 | disponibilidad a extender su propia actividad para la expansión del Reino
168 6, 69(141)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
169 6, 71 | papel de los laicos en la actividad misionera.144 En la Exhortación
170 6, 71 | su origen, gracias a la actividad de los laicos y de las laicas
171 6, 71 | están llamados a dar en la actividad misionera.148 La necesidad
172 6, 71(148)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
173 6, 72 | evangelización y para la actividad misionera propiamente dicha.
174 6, 72 | asociarse y de expresarse.~En la actividad misionera hay que revalorar
175 6, 73(154)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
176 6, 73(157)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad rnisionera de la Iglesia,
177 6 | otras estructuras para la actividad misionera~ ~
178 6, 75(159)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
179 6, 75(160)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
180 6, 75 | laicales comprometidos en la actividad misionera, a colaborar fielmente
181 6, 75 | para programar y dirigir la actividad y la cooperación misionera
182 6, 75(161)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
183 6, 76 | orientación y coordinación de la actividad misionera a nivel nacional
184 6, 76 | instituciones que se ocupan de la actividad misionera aúnen oportunamente
185 6, 76(162)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
186 6, 76(165)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
187 7 | VII - LA COOPERACIÓN EN LA ACTIVIDAD MISIONERA~ ~
188 7, 77 | son corresponsables de la actividad misionera. La participación
189 7, 77(166)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
190 7, 79 | de las diversas formas de actividad misionera; pero, al mismo
191 7, 83 | una imagen reductiva de la actividad misionera, como si fuera
192 7, 83 | sólo de pan y libertad; la actividad misionera ante todo ha de
193 7, 84(170)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
194 8, 87 | 87. La actividad misionera exige una espiritualidad
195 8, 88(172)| Decr. Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
Slavorum apostoli
Cap., N.
196 Intro, 3 | leer, además, en su vida y actividad apostólica los contenidos
197 2, 5 | sonidos de tal lengua. La actividad misionera de los dos hermanos
198 2, 6 | episcopal de Sirmio. La actividad apostólica de Metodio se
199 3, 11 | indispensable para el éxito de su actividad misionera. Se trataba de
200 5, 16 | que ellos aplicaron en su actividad apostólica entre pueblos
201 7, 23 | 23. La actividad apostólico-misionera de
202 7, 23 | efectiva de los eslavos.~Esta actividad alcanzó, de diversa manera,
203 7, 23 | vasto ejercido por esta actividad apostólica —en especial
204 7, 24 | expulsados del primer terreno de actividad, la misión cirilo-metodiana
205 7, 26 | terreno específico de la actividad misionera donde destaca
206 7, 26 | Metodio. En efecto, dicha actividad es tarea esencial de la
207 7, 26(42) | Decreto Ad gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia,
Ut unum sint
Cap., N.
208 1, 20 | significado fundamental para la actividad ecuménica. De ello resulta
209 1, 20 | apéndice », que se añade a la actividad tradicional de la Iglesia.
210 1, 23 | de la Iglesia y en cada actividad que tenga como fin favorecer
211 1, 28 | asumida por la doctrina y la actividad ecuménica del Concilio.
212 1, 38 | una consecuencia para la actividad ecuménica.~En primer lugar,
213 2, 44 | segura para la oración y la actividad pastoral de todos los discípulos
Veritatis Splendor
Cap., N.
214 2, 40 | subraya, por un lado, la actividad de la razón humana cuando
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