Dominum et vivificantem
Cap., N. 1 1, 15 | espíritu del Señor:~espíritu de sabiduría e inteligencia,~espíritu
2 2, 36 | en ella su modelo, que es sabiduría y ley eterna, fuente del
Evangelium vitae
Cap., N. 3 2, 42 | recuerda el libro de la Sabiduría: « Dios de los Padres, Señor
4 2, 42 | la misericordia... con tu Sabiduría formaste al hombre para
5 2, 46 | anciano, reconoce en su sabiduría y experiencia una riqueza
6 3, 52 | hombre debe vivirlo con sabiduría y amor, participando de
7 3, 52 | amor, participando de la sabiduría y del amor inconmensurables
8 3, 66 | sólo según su designio de sabiduría y de amor. Cuando el hombre
9 3, 76 | para que la custodie con sabiduría y la administre con amorosa
10 4, 94 | y debe ser transmisor de sabiduría, testigo de esperanza y
Fides et ratio
Cap., N. 11 Intro, 3 | griega significa « amor a la sabiduría ». De hecho, la filosofía
12 Intro, 3 | cada pueblo, posee una sabiduría originaria y autóctona que,
13 Intro, 6 | que conduce a la verdadera sabiduría, a fin de que quien sienta
14 1 | I - LA REVELACIÓN DE LA SABIDURÍA DE DIOS~ ~
15 1, 7 | Quiso Dios, con su bondad y sabiduría, revelarse a sí mismo y
16 2 | La sabiduría todo lo sabe y entiende » (
17 2, 16 | hombre que se ejercita en la sabiduría, y que en su inteligencia
18 2, 19 | 19. El libro de la Sabiduría tiene algunos textos importantes
19 2, 20 | Señor es el principio de la sabiduría » (Pr 1, 7; cf. Si 1, 14).~ ~
20 2 | Adquiere la sabiduría, adquiere la inteligencia » (
21 2, 23 | contraposición entre « la sabiduría de este mundo » y la de
22 2, 23 | Jesucristo. La profundidad de la sabiduría revelada rompe nuestros
23 2, 23 | Acaso no entonteció Dios la sabiduría del mundo? » (1 Co 1, 20)
24 2, 23 | ya no es posible la mera sabiduría del hombre sabio, sino que
25 2, 23 | es » (1 Co 1, 27-28). La sabiduría del hombre rehúsa ver en
26 2, 23 | última que busca. No es la sabiduría de las palabras, sino la
27 2, 23 | palabras, sino la Palabra de la Sabiduría lo que san Pablo pone como
28 2, 23 | la vez, de salvación.~La sabiduría de la Cruz, pues, supera
29 3, 31 | acumulado los tesoros de la sabiduría y de religiosidad de la
30 4, 37 | La filosofía, en cuanto sabiduría práctica y escuela de vida,
31 4, 38 | Puesto que « esta es la sabiduría que desea la filosofía;
32 4, 38 | actitud de amor ardoroso a la sabiduría y no perdona esfuerzo por
33 4, 38 | filósofos los que aman la sabiduría del Creador y Maestro universal,
34 4, 38 | falta, por que es fuerza y sabiduría de Dios; en cambio, la filosofía
35 4, 42 | el modo en que la suprema sabiduría sabe lo que ha hecho [...], ¿
36 4, 44 | realiza haciendo madurar en sabiduría la ciencia humana. Desde
37 4, 44 | mostrar la primacía de aquella sabiduría que es don del Espíritu
38 4, 44 | comprender la peculiaridad de la sabiduría en su estrecho vínculo con
39 4, 44 | verdad de la fe misma: « La sabiduría, don del Espíritu Santo,
40 4, 44 | divina pertenece al don de la sabiduría ».49~La prioridad reconocida
41 4, 44 | prioridad reconocida a esta sabiduría no hace olvidar, sin embargo,
42 4, 44 | presencia de otras dos formas de sabiduría complementarias: la filosófica,
43 4, 47 | mismo de la filosofía. De sabiduría y saber universal, se ha
44 5, 51 | que « los tesoros de la sabiduría y de la ciencia » están
45 5, 61 | múltiples expresiones de sabiduría popular. Esto es un patrimonio
46 5, 61 | aspectos positivos de la sabiduría popular, creando su necesaria
47 7, 85 | superar por su verdadera sabiduría los límites del espacio
48 7, 91 | herencia del saber y de la sabiduría se ha enriquecido en diversos
49 Conclus, 102| a ser también verdadera sabiduría, el hombre contemporáneo
50 Conclus, 105| relación íntima entre la sabiduría teológica y el saber filosófico
51 Conclus, 105| gracia, la reflexión sin la sabiduría inspirada por Dios ». 128~
52 Conclus, 106| dimensiones de auténtica sabiduría y de verdad, incluso metafísica,
53 Conclus, 107| verdad, al amparo de la Sabiduría y en coherencia con ella,
54 Conclus, 108| invoca como Trono de la Sabiduría. Su misma vida es una verdadera
55 Conclus, 108| Maria.~Que el Trono de la Sabiduría sea puerto seguro para quienes
56 Conclus, 108| su vida la búsqueda de la sabiduría. Que el camino hacia ella,
Laborem exercens
Cap., Párrafo 57 5, 26 | éste tales cosas, y qué sabiduría es ésta que le ha sido dada? ... ¿
58 5, 26 | confiado a él, la palabra de la Sabiduría eterna. Por consiguiente,
Redemptor hominis
Cap., Párrafo 59 2, 7 | todos los tesoros de la sabiduría y de la ciencia»,32 y la
60 2, 8 | bien tiene su fuente en la Sabiduría y en el Amor. En Jesucristo,
61 2, 8 | misma fuente divina de la Sabiduría y del Amor. En efecto, «
62 4, 19 | la fe con la ciencia y la sabiduría, para contribuir a su recíproca
Redemptoris Mater
Cap., N. 63 1, 17 | que Jesús « progresaba en sabiduría ... en gracia ante Dios
64 2, 33 | divina belleza, morada de la Sabiduría eterna, figura de la orante,
Redemptoris missio
Cap., N. 65 1, 11 | reducir el cristianismo a una sabiduría meramente humanas, casi
Veritatis Splendor
Cap., N. 66 1, 10 | admirable en mi obra, tu sabiduría es exaltada en la mente
67 1, 12 | ordenándolo a su fin con sabiduría y amor, mediante la ley
68 1, 19 | la fe, a aquél que es la Sabiduría encarnada, se hace verdaderamente
69 1, 27 | como expresión fiel de la sabiduría y de la voluntad divina.~
70 2, 29 | que es el principio de la sabiduría (cf. Pr 1, 7).~Al mismo
71 2, 36 | razón humana depende de la Sabiduría divina y que, en el estado
72 2, 40 | es otra cosa que la misma sabiduría divina 69. La vida moral
73 2, 40 | natural, que deriva de la sabiduría divina, la ley moral es,
74 2, 40 | la razón práctica en la sabiduría del Creador y Legislador
75 2, 41 | alienación, contraria a la sabiduría divina y a la dignidad de
76 2, 41 | humana participan de la sabiduría y de la providencia de Dios.
77 2, 41 | exigencias y las llamadas de la sabiduría eterna. Por tanto, la ley
78 2, 41 | como una expresión de la sabiduría divina. Sometiéndose a ella,
79 2, 43 | gobierna, con el designio de su sabiduría y de su amor, el mundo y
80 2, 43 | identifica con «la razón de la sabiduría divina, que mueve todas
81 2, 43 | debido fin» 80. Pero la sabiduría de Dios es providencia,
82 2, 44 | y de la ley humana a la sabiduría de Dios y a su ley. Después
83 2, 44 | dictamen del Señor, veraz, sabiduría del sencillo. Los preceptos
84 2, 52(94) | en su orden propio, la sabiduría filosófica, ponen de relieve
85 2, 59 | y el mal, reflejo de la sabiduría creadora de Dios, que, como
86 2, 67 | deliberadamente con la voluntad, la sabiduría y la ley de Dios. Por tanto,
87 2, 72 | como ley eterna, por la sabiduría de Dios que ordena todo
88 3, 84 | teológico, en desconfianza en la sabiduría de Dios, que guía al hombre
89 3, 85 | Cristo, fuerza de Dios y sabiduría de Dios» (1 Co 1, 17. 23-
90 3, 94 | hecho de que han demostrado sabiduría al menos en la formulación
91 3, 95 | significado de irradiación de la sabiduría eterna de Dios, recibida
92 3, 99 | vínculo esencial entre la sabiduría y la voluntad de Dios— tiene
93 3, 117 | pregunta del hombre tiene la sabiduría y la fuerza de Cristo crucificado,
94 Conclus, 120| el título de «Sede de la Sabiduría». Esta Sabiduría es Jesucristo
95 Conclus, 120| Sede de la Sabiduría». Esta Sabiduría es Jesucristo mismo, el
96 Conclus, 120| ser humano a acoger esta Sabiduría. También nos dirige la orden
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