Centesimus annus
Cap., N.
1 6, 53 | través del misterio de la encarnación y de la redención»109.~Es
Dives in misericordia
Cap., Párrafo
2 1, 2 | 2. Encarnación de la misericordia~ ~Dios,
3 2, 3 | mesiánicas—, al convertirse en la encarnación del amor que se manifiesta
4 5, 8 | El Cristo pascual es la encarnación definitiva de la misericordia,
5 5, 9 | ya desde el momento de la encarnación, abren una nueva perspectiva
6 5, 9 | vinculado con el misterio de la encarnación.~« Esta maternidad de María
7 7 | palabras que, con motivo de la encarnación del Hijo de Dios, resonaron
8 7, 14 | sentido, la más perfecta encarnación de la « igualdad » entre
9 7, 14 | consiguiente también la encarnación más perfecta de la justicia,
Dominum et vivificantem
Cap., N.
10 3, 49 | la filiación ».196 y esta encarnación del Hijo-Verbo tuvo lugar «
11 3, 49 | profesa el misterio de la encarnación, misterio-clave de la fe,
12 3, 50 | ya que el misterio de la Encarnación se realizó « por obra del
13 3, 50 | gracia. El misterio de la Encarnación de Dios constituye el culmen
14 3, 50 | Palabra se hizo carne ».202 La Encarnación de Dios-Hijo significa asumir
15 3, 50 | mundo visible y material. La Encarnación, por tanto, tiene también
16 3, 52 | culmen en el misterio de la Encarnación. No es posible dar la vida,
17 3, 52 | tiempo, con el misterio de la Encarnación se abre de un modo nuevo
18 3, 52 | base del misterio de la Encarnación, o sea, gracias a Cristo,
19 3, 52 | mediante el misterio de la Encarnación. De esta manera, la creación
20 3, 52 | creación es completada con la Encarnación e impregnada desde entonces
21 3, 52 | partícipes del misterio de la Encarnación, « con el Espíritu Santo
22 3, 53 | unida al misterio de la Encarnación y de la Redención, que a
23 3, 56 | acercamiento de Dios, con su encarnación, con su comunicación siempre
24 3, 60 | iluminada por el misterio de la encarnación del Hijo de Dios, el cual, «
Ecclesia de Eucharistia
Cap., N.
25 VI, 55 | su seno virginal para la encarnación del Verbo de Dios. La Eucaristía,
26 VI, 55 | tiempo en continuidad con la Encarnación. María concibió en la anunciación
27 VI, 55 | también en el misterio de la Encarnación la fe eucarística de la
28 VI, 58 | supera a todas ellas, la encarnación redentora. En el Magnificat,
Evangelium vitae
Cap., N.
29 Intro, 2 | El Hijo de Dios, con su encarnación, se ha unido, en cierto
30 Intro, 3 | al núcleo de su fe en la encarnación redentora del Hijo de Dios,
31 Conclus, 104| el Hijo de Dios, con su encarnación, se ha unido, en cierto
Fides et ratio
Cap., N.
32 1, 11 | la historia, más aún, la encarnación de Jesucristo, tiene lugar
33 1, 11 | destaca el hecho de que con la encarnación del Hijo de Dios vivimos
34 1, 12 | llegaríamos a comprendernos.~La encarnación del Hijo de Dios permite
35 7, 80 | Jesucristo. El misterio de la Encarnación será siempre el punto de
36 7, 93 | sobre el misterio de la encarnación del Hijo de Dios: sobre
37 7, 94 | refleja la lógica de la Encarnación. 110 Al interpretar las
Laborem exercens
Cap., Párrafo
38 2, 10 | sino también una gran encarnación histórica y social del trabajo
Redemptor hominis
Cap., Párrafo
39 Heren, 1 | tiempo Único. A través de la Encarnación, Dios ha dado a la vida
40 Heren, 2 | primordial y fundamental de la Encarnación, ya recordada, está vinculado
41 2, 8 | El Hijo de Dios, con su encarnación, se ha unido en cierto modo
42 2, 10 | asimilar toda la realidad de la Encarnación y de la Redención para encontrarse
43 3, 13 | el Concilio— «mediante la encarnación el Hijo de Dios se ha unido
44 3, 13 | contenida en el misterio de la Encarnación y de la Redención, con la
45 3, 14 | través del misterio de la Encarnación y de la Redención.~A este
Redemptoris Mater
Cap., N.
46 Intro, 1 | porque en el hecho de la Encarnación encuentra unidos indisolublemente
47 Intro, 4 | comienzo. El misterio de la Encarnación le ha permitido penetrar
48 Intro, 4 | un sello del dogma de la Encarnación, en la que el Verbo asume
49 Intro, 5 | Virgen ». La realidad de la Encarnación encuentra casi su prolongación
50 Intro, 5 | la realidad misma de la Encarnación sin hacer referencia a María,
51 1, 8 | como Madre de su Hijo en la Encarnación, y junto con el Padre la
52 1, 9 | revelación del misterio de la Encarnación al comienzo mismo de su
53 1, 9 | alcanza en el misterio de la Encarnación uno de sus vértices. En
54 1, 9 | llena de gracia », porque la Encarnación del Verbo, la unión hipostática
55 1, 10 | eterno Padre, que mediante la Encarnación se ha convertido en su propio
56 1, 11 | Trinidad el misterio de la Encarnación constituye el cumplimiento
57 1, 13 | el misterio divino de la Encarnación: « El Padre de las misericordias
58 1, 13 | quiso que precediera a la encarnación la aceptación de parte de
59 1, 13 | 5-7). El misterio de la Encarnación se ha realizado en el momento
60 1, 24 | correspondencia entre el momento de la encarnación del Verbo y el del nacimiento
61 2, 27 | en el sumo misterio de la Encarnación », piensa en la Madre de
62 2, 30 | profunda del misterio de la Encarnación, lo mismo se debe decir
63 2, 31 | aspectos del misterio de la Encarnación, y cada uno de los mismos
64 3, 39 | de la salvación, o sea la encarnación del Verbo en la anunciación.
65 3, 39 | Hijo en el misterio de la Encarnación. Esta elección suya al sumo
66 3, 43 | servicio del misterio de la encarnación, así la Iglesia permanece
67 3, 46 | sublime acontecimiento de la encarnación del Hijo, se ha entregado
68 3, 49 | cumplimiento del misterio de la Encarnación la historia de la humanidad
69 Conclus, 51 | inescrutable en la realidad de la Encarnación del Verbo, que se hizo hombre
70 Conclus, 52 | mediante el misterio de la Encarnación. Es un cambio que pertenece
Redemptoris missio
Cap., N.
71 1, 6 | el Hijo de Dios con su encarnación se ha unido, en cierto modo,
72 2, 12 | Cristo es la revelación y la encarnación de la misericordia del Padre.
73 3, 29 | ha hecho presente en la encarnación, en la vida, muerte y resurrección
74 8, 88 | describe aquí el misterio de la Encarnación y de la Redención, como
Slavorum apostoli
Cap., N.
75 6, 21 | nombre de « inculturación » —encarnación del evangelio en las culturas
76 Conclus, 29 | primavera del año 885 de la Encarnación de Cristo (y según el cómputo
Ut unum sint
Cap., N.
77 Intro, 1 | Jubileo sacro, memoria de la Encarnación del Hijo de Dios, que se
Veritatis Splendor
Cap., N.
78 1, 8 | asimilar toda la realidad de la Encarnación y de la Redención para encontrarse
79 2, 41 | revelación de la Alianza y de la Encarnación redentora, y no sería más
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