Centesimus annus
Cap., N. 1 1, 5 | en efecto, hace oír su voz ante determinadas situaciones
2 3, 23 | ideología, que pretende ser su voz; son ellas las que encuentran
3 4, 42 | fenómenos se alza con firmeza la voz de la Iglesia. Ingentes
Dives in misericordia
Cap., Párrafo 4 5, 8 | llamo; si alguno escucha mi voz y abre la puerta, yo entraré
5 6, 11 | facultad de obedecer a la voz de la conciencia que le
6 8, 15 | humanidad, elevemos nuestra voz y supliquemos que en esta
Dominum et vivificantem
Cap., N. 7 1, 19 | mismo tiempo « vino una voz del cielo: Este es mi Hijo
8 1, 19 | divina complacencia. La voz de lo alto dice: « mi Hijo ».~ ~
9 2, 43 | siente a solas con Dios, cuya voz resuena en el recinto más
10 2, 43 | recinto más íntimo. Esta voz dice claramente a « los
11 2, 43 | íntimo » donde « resuena la voz de Dios ». Es « la voz de
12 2, 43 | la voz de Dios ». Es « la voz de Dios » aun cuando el
13 2, 44 | verdad se encuentra con la voz de las conciencias humanas.~
14 2, 44 | pecado, apoyándose en la voz de la propia conciencia, «
15 3, 52 | cierto modo, resuena la voz de todas las criaturas: «
16 3, 52 | cósmico-teológica parece evocar la voz del antiguo Salmo: « la
17 3, 65 | La oración es siempre la voz de todos aquellos que aparentemente
18 3, 65 | aparentemente no tienen voz, y en esta voz resuena siempre
19 3, 65 | no tienen voz, y en esta voz resuena siempre aquel «
Ecclesia de Eucharistia
Cap., N. 20 INT, 5 | bien, pone su boca y su voz a disposición de Aquél que
21 IV, 36 | fieles: « También yo alzo la voz, suplico, ruego y exhorto
22 VI, 55 | través de los ojos y la voz de María. Y la mirada embelesada
Evangelium vitae
Cap., N. 23 Intro, 5 | Iglesia siente el deber de dar voz, con la misma valentía,
24 Intro, 5 | valentía, a quien no tiene voz. El suyo es el clamor evangélico
25 1, 10 | el suelo » (Gn 4, 10). La voz de la sangre derramada por
26 1, 24 | silencio no logran sofocar la voz del Señor que resuena en
27 1, 25 | ya muerte », exclama la voz potente que sale del trono
28 1, 28 | Señor tu Dios, escuchando su voz, viviendo unido a él; pues
29 2, 45 | fue la primera en oír la voz, pero Juan fue el primero
Fides et ratio
Cap., N. 30 2, 16 | Mesopotamia hacen oír de nuevo su voz y algunos rasgos comunes
31 4, 36 | natural de Dios y en la voz de la conciencia moral de
32 5, 54 | Papa Pío XII hizo oír su voz cuando, en la Encíclica
Redemptor hominis
Cap., Párrafo 33 4, 18 | nostalgia de lo bello, la voz de la conciencia. La Iglesia,
Redemptoris Mater
Cap., N. 34 1, 12 | vez saluda a María en alta voz: « Bendita tú entre las
35 1, 20 | momento en el que « alzó la voz una mujer de entre la gente,
Redemptoris missio
Cap., N. 36 3, 30 | disponibilidad para escuchar la voz del Espíritu.~ ~
37 5, 54 | en Kampala—, para que su voz nativa, más límpida y franca,
Slavorum apostoli
Cap., N. 38 3, 8 | manifestó a través de la voz y la autoridad del Emperador
39 Conclus, 30| su propia conciencia, la voz de tu llamada a lo largo
Ut unum sint
Cap., N. 40 2, 43 | algunas circunstancias la voz común de los cristianos
41 2, 43 | tiene más impacto que una voz aislada.~Los responsables
42 2, 76 | eclesiales invocaron con una sola voz al Señor de la historia
43 3, 94 | Pastor y hagan oír la única voz del Pastor, para que la
44 3, 94 | en él hagan oír la misma voz, y que no tengan cada uno
45 3, 94 | tengan cada uno su propia voz 4 Que las ovejas oigan esta
46 3, 94 | Que las ovejas oigan esta voz, limpia de toda división
47 3, 94 | particulares la verdadera voz de Cristo-Pastor. Así, en
Veritatis Splendor
Cap., N. 48 1, 27 | los cristianos reciben «la voz viva del Evangelio» 40,
49 2, 44 | fuerza de ley si no fuese la voz e intérprete de una razón
50 2, 54 | que debe obedecer y cuya voz resuena, cuando es necesario,
51 2, 55 | está solo con Dios, cuya voz resuena en lo más íntimo
52 2, 55 | íntimo de ella» 102. Esta voz —se dice— induce al hombre
53 2, 57 | la propia respuesta a la voz de la conciencia.~ ~
54 2, 58 | testimonio de Dios mismo, cuya voz y cuyo juicio penetran la
55 2, 58 | abre a la llamada, a la voz de Dios. En esto, y no en
56 2, 60 | racional y la autoridad de su voz y de sus juicios derivan
57 3, 94 | sentido del vivir» 147. La voz de la conciencia ha recordado
58 3, 109 | respondiendo a la invitación de la voz de la verdad, ayuda al pueblo
59 3, 117 | en su respuesta está la voz de Jesucristo, la voz de
60 3, 117 | la voz de Jesucristo, la voz de la verdad sobre el bien
61 3, 117 | íntimo de las personas, la voz de Dios, el «único que es
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