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(...) Obras II – S. Juan B. de la C.
Parte, Capítulo, §, Página
2501 2, 26, 2, p. 213 | primera vez derramarle mi alma y spíritu, para que lo conociera
2502 2, 26, 3, p. 214 | que con estas palabras mi alma se consolaba, pero el cuerpo
2503 2, 26, 5, p. 217 | Bruno: —No inporta, mi alma con la suya, allí tendrá
2504 2, 26, 6, p. 217 | con estas dos cosas, el alma quedó algo desembarazada
2505 2, 27, 3, p. 222 | demonios sentidos en el alma.~ No quería ser
2506 2, 27 222(r) | sigue alma tach.~ ~
2507 2, 27, 4, p. 224 | el cuerpo descansase, el alma más libre más libres tenía
2508 2, 28, 2, p. 228 | siempre tengo muy en el alma la sancta madre [125r] nos
2509 2, 29, 2, p. 229 | certidumbre evidente que en mi alma estaba del bien de nuestra
2510 2, 29, 4, p. 232 | vengan muchos ángeles por mi alma, ¡cómo de estas cosas ha
2511 2, 29, 11, p. 241 | conformaban el cuerpo y el alma, y que aquello nacía de
2512 2, 29, 12, p. 243 | Dios de mi vida y de mi alma mil veces! Y si tú no fueses
2513 2, 29, 12, p. 243 | tormento se puede comparar a un alma que desea hacer derechos
2514 2, 30 243 | arrancaron, ¡cuánto más mi alma!, al pasar tal torbellino.~ ~ ./.
2515 2, 30, 1, p. 244 | había dicho que aquella alma iba perdida, pero que b
2516 2, 30, 1, p. 244 | Pues ¿cómo, Dios de mi alma, esta obra es obra perdida?
2517 2, 30, 1, p. 244 | obra perdida? Pues ¿cómo mi alma anda en [202r] manos de
2518 2, 30, 1, p. 244 | beatas? Ya me pareció que mi alma se la habían dado a la beata
2519 2, 30, 1, p. 244 | yo entre mí— de dejar mi alma en manos de una beata. Yo
2520 2, 30, 2, p. 245 | las penas y trabajos del alma, él tenía los suyos bien
2521 2, 30, 3, p. 246 | no sabía cuál estaba mi alma. Porque me parecía, en lo
2522 2, 31, 1, p. 249 | suerte que ni sé dó está mi alma ni dó posa la sabiduría.
2523 2, 31, 2, p. 251 | dice que se derritió su alma 6. Y, así derretida y su
2524 2, 31, 2, p. 251 | sabiduría, pero es sabiduría en alma derretida, que se queda
2525 2, 31, 2, p. 251 | salta, sacude, despide el alma temerosa cualquier cosa
2526 2, 31, 2, p. 251 | sabiduría despide de sí aquella alma amorosa de Cristo ante diem j
2527 2, 31, 2, p. 251 | Lo propio digo yo de un alma llena y cargada de miedos,
2528 2, 31, 2, p. 251 | hallo esta diferencia en el alma que enpieza a servir a Dios
2529 2, 31, 2, p. 252 | de ceniza. ¡Oh Dios de mi alma, y quién acertará a decir
2530 2, 31, 2, p. 252 | decir estos estados de un alma! Al principio, que se vuelve
2531 2, 31, 2, p. 252 | apoderado con perfección de un alma, con esto se contenta: con
2532 2, 31, 2, p. 252 | Antes que venga Dios a un alma, digo, cuando un alma le
2533 2, 31, 2, p. 252 | un alma, digo, cuando un alma le aguarda por algún modo
2534 2, 33, 2, p. 261 | lo quitasen. ¡Dios de mi alma!, ¿en qué papel cupieran
2535 2, 33, 3, p. 262 | que el cuerpo estaba sin alma y el alma aguardando su
2536 2, 33, 3, p. 262 | cuerpo estaba sin alma y el alma aguardando su lugar. Pero,
2537 2, 33, 4, p. 263 | no querían aprisionar su alma por prenderme a mí.~
2538 2, 35, 5, p. 276 | fuera y ninguna le llega al alma de ella, en quien Dios tiene
2539 2, 36, 2, p. 283 | eran por obrarlas con un alma, voluntad y entrañas tan
2540 2, 36, 3, p. 284 | notable pena ver que a un alma tan sancta ./. la hiciese
2541 2, 38 298 | la lámpara alumbró en su alma aquellas llagas que el Señor
2542 2, 38 299 | había Dios de encender en su alma, pues, en amaneciendo, vase
2543 2, 39 302 | el que hace Dios con un alma cuando la trueca y hace
2544 2, 40, 1, p. 305 | necesidades. ¡Oh Dios de mi alma, y qué sabio eres, y cómo
2545 2, 40, 4, p. 308 | Ya con eso yo tuve media alma.~ Salgo de allí
2546 2, 44, 2, p. 346 | para que Dios hablase a su alma: íbase delante del Sanctíssimo
2547 2, 44, 2, p. 346 | buen esposo y bien de su alma. Que, por la cuenta, sólo
2548 2, 44, 3, p. 347 | coligirá cómo serviríe un alma tan pura, como luego se
2549 2, 44, 3, p. 348 | peccado mortal m, sino un alma pura, sencilla, llana, tal
2550 2, 44, 3, p. 349 | bien de lo profundo del alma, bien humildes, pues tal
2551 2, 44, 3, p. 351 | haga la costa, porque el alma y el spíritu no paró en
2552 2, 44, 3, p. 351 | de oílle hablar y que un alma tan sancta muriese con satisfacción
2553 2, 44, 3, p. 352 | el Sancto Niño a aquella alma tan bien desengañada aquellas
2554 2, 44, 3, p. 353 | propio, da todo lo que el alma puede desear, ¡cómo no cesaríamos
2555 2, 45 355(p) | sigue alma que tach.~
2556 2, 45, 2, p. 356 | que son agua viva para el alma, fueran agua material para
2557 2, 45, 2, p. 356 | en cuyas manos [puso su alma]. Que, ángel por ángel,
2558 2, 45, 2, p. 356 | para en sus manos poner mi alma, como este sancto hermano
2559 2, 45, 3, p. 358 | Oh Dios de mi alma, quién puede justificar
2560 2, 45, 3, p. 358 | entero la sepultura y el alma ha de ir entera o al cielo
2561 2, 45, 3, p. 358 | viste, adorna y hermosea el alma para que parezca delante
2562 2, 45, 5, p. 363 | no se podía entender de alma tan pura. Yo le confesé
2563 2, 46, 3, p. 368 | consentido. ¡Oh buen Dios de mi alma, y qué te debe esta sagrada
2564 2, 47, 5, p. 379 | Dios le tenía puesto en su alma, que es el amor entrañable
2565 2, 47, 8, p. 383 | que en el pensamiento y alma debiera de traer pegado
2566 2, 47, 8, p. 385 | con la cruz viva que en el alma vivía de aquellos religiosos,
2567 2, 47, 8, p. 385 | el borrón que hacía en su alma el demonio de la cruz viva?~ ¡
2568 2, 47, 14, p. 391 | entriego verdadero de su alma al que la crió y redimió.
2569 2, 47, 15, p. 392 | con quien tanto amaba h? Y alma tan asida, cuando quiere
2570 2, 47, 15, p. 392 | responder el cuerpo sin alma o el alma dejándose allá
2571 2, 47, 15, p. 392 | el cuerpo sin alma o el alma dejándose allá dentro asido
2572 2, 47, 15, p. 392 | venía, ¡qué contento para el alma i que con veras y desengaño
2573 2, 47, 15, p. 392 | prendas de su galardón j, el alma de contento se enbelese
2574 2, 48, 3, p. 396 | pisadas.~¡Oh Dios de mi alma!, dame a entender estos
2575 2, 48, 3, p. 397 | la oración de ángel del alma puesta en carne y cuerpo,
2576 2, 48, 8, p. 403 | voluntariamente, ¿por qué por mi alma, por mi salvación, por huir
2577 2, 48, 8, p. 403 | es necesario sacarle el alma como por ./. fuerza. Linda
2578 2, 48, 8, p. 404 | del cuerpo y y la vida del alma.~ Díganme z,
2579 2, 48, 8, p. 405 | cuerpo, por mi Dios, mi alma, por mi ley de Dios y por
2580 2, 48, 8, p. 405 | tantas veces los enemigos del alma me lo tienen arrebatado
2581 2, 48, 8, p. 405 | tal fuego, tal calor en su alma que digiera h penitencias,
2582 2, 49, 1, p. 406 | frailes tenían muy en el alma el deseo de que allí hubiera
2583 2, 50, 2, p. 414 | cielo había puesto en su alma. Puesto caso que de allá
2584 2, 50, 2, p. 414 | semejante se le puede seguir al alma. Tornó otra noche y pasóle
2585 2, 50, 3, p. 415 | Oh Dios de mi alma y bien mío!, que ni la monja
2586 2, 50, 12, p. 433 | otros nuevos provechos del alma a quien Dios le dilata cosa
2587 2, 50, 12, p. 433 | buen Dios y bien mío, si un alma supiese o tú de veras la
2588 2, 50, 12, p. 433 | Su Majestad se canse el alma en su busca y traerla ansiosa
2589 2, 50, 12, p. 433 | digo yo que, cuando un alma obra, hace, arde, como entonces
2590 2, 50, 12, p. 434 | el fuego reposado, y un alma que en sí propia se está
2591 2, 50, 12, p. 434 | ha menester sosegarse el alma sancta a su tiempo para
2592 2, 51, 3, p. 437 | ligereza que debe tener un alma para caminar a Dios, a quien
2593 2, 51, 3, p. 439 | leche, se imprimió en mi alma la grande devoción y virtud
2594 2, 52, 4, p. 451 | yo me holgué muy en el alma. Los recebí con las mejores
2595 2, 53, 1, p. 454 | quejidos, salidos de un alma bien cargada, con todo eso
2596 2, 53, 1, p. 454 | y, por otra, enllena el alma de suavidad, dulzura, entretenimiento,
2597 2, 53, 1, p. 455 | algún sentimiento n que el alma tenía de que aquélla era
2598 2, 53, 1, p. 455 | comunicación hecha de Dios a un alma que no merecía sino los
2599 2, 53 455(o) | sigue alma tach.~ ~
2600 2, 53, 1, p. 456 | cuerpo y el gusto es en el alma. Y, como el alma, para gustar
2601 2, 53, 1, p. 456 | es en el alma. Y, como el alma, para gustar y gozar de
2602 2, 53, 1, p. 456 | trabajos y inquietudes, y el alma pásasele de largo y pierde
2603 2, 53, 1, p. 456 | cosa que, a mi parecer, al alma le inporta el estar gustando
2604 2, 54, 6, p. 473 | que me parecía no tenía alma; quiero decir como si fuera
2605 2, 55, 1, p. 475 | veces sucede que está un alma delante de ti hambrienta
2606 2, 55, 1, p. 476 | Señor, riegas la tierra del alma que desea por momentos llevar
2607 2, 55, 1, p. 476 | pues entonces engorda el alma y se hace fértil y pingüe
2608 2, 55, 2, p. 478 | Jesucristo, que vale más un alma que todos los cielos y la
2609 2, 55, 4, p. 481 | hacer otro tratado desta alma así afligida con cualquier
2610 2, 55, 4, p. 481 | dientes, donde se deshace su alma! Aborrecerles, le parece
2611 2, 56, 4, p. 488 | muerte está la vida del alma y el alcanzar lo que queremos.~
2612 2, 58 496 | CAPITULO 56 LA CAUSA POR QUÉ EL ALMA NO PROSIGUE CON LA ATENCIÓN
2613 2, 58, 1, p. 496 | y quietud interior de un alma, no digo ./. por peligro
2614 2, 58, 1, p. 497 | queda tan sin fuerzas, el alma, que, mediante la disposición
2615 2, 58, 1, p. 497 | cuerpo, me parece queda el alma más escondida, de suerte
2616 2, 58, 1, p. 497 | conforme a su ser, pero el alma siente le den las cosas
2617 2, 58, 1, p. 497 | descomposición del cuerpo el alma ejercita sus potencias,
2618 2, 58, 1, p. 497 | reciben su gusto, pero el alma, que compraba barato y le
2619 2, 58, 1, p. 497 | y quietud interior de un alma, no obstante que pienso
2620 2, 58, 2, p. 497 | Lo que saca al alma afuera de su recogimiento~ ~
2621 2, 58, 2, p. 497 | la causa que dispierta al alma o la saca acá fuera, que
2622 2, 58, 2, p. 498 | contento que levantaba más el alma y la perdía más el cuerpo
2623 2, 58, 2, p. 498 | pleito entre el cuerpo y el alma: el alma peleaba y se defendía
2624 2, 58, 2, p. 498 | el cuerpo y el alma: el alma peleaba y se defendía del
2625 2, 58, 2, p. 498 | que i conocía j en sí al alma como otra persona apartada
2626 2, 58, 2, p. 498 | estos dos compañeros, [370v] alma y cuerpo, y que cada uno
2627 2, 58, 3, p. 498 | que en el estado en que el alma, ./. por muerte particular
2628 2, 58, 3, p. 499 | de los cuerpos y que el alma no sabe dó se quedó el cuerpo
2629 2, 58, 3, p. 499 | el cuerpo dónde se fue el alma, sino que parece están apartados:
2630 2, 58, 3, p. 499 | tormento en su soledad y el alma haciendo su visita, con
2631 2, 58, 3, p. 499 | más alto por hallarse el alma más sola, más sin carga
2632 2, 58, 3, p. 499 | aliviar estas penas que esta alma así padece haciendo sus
2633 2, 58, 3, p. 499 | cuerpo atraigan a sí el alma y los torne a juntar alma
2634 2, 58, 3, p. 499 | alma y los torne a juntar alma y cuerpo, de suerte que
2635 2, 58, 4, p. 500 | Ahora, pues, puesta el alma en este segundo estado,
2636 2, 58, 4, p. 500 | estado resulta y viene a esta alma porque, siendo tan una con
2637 2, 58, 4, p. 500 | goza de los bienes de el alma cuando es elevada, siéndolo
2638 2, 58, 4, p. 500 | es cierto ha de gozar el alma de los bienes y males del
2639 2, 58, 4, p. 500 | estado, hay ratos en que el alma padece tristeza [371v] unas k
2640 2, 58, 4, p. 500 | entretienen y saborean a un alma porque son más conforme
2641 2, 58, 4, p. 500 | Es más fácil a esta tal alma, en este tercer estado,
2642 2, 58, 4, p. 500 | quietud y sosiego de un alma que viene a tener en el
2643 2, 58, 5, p. 500 | si será lícito ponerse un alma en este peligro l, cuando,
2644 2, 58, 5, p. 500 | trabajos, dispierta esta alma del primero y segundo sueño.
2645 2, 58, 5, p. 501 | tercer cielo 2, levantaste mi alma y la desencuadernaste de
2646 2, 58, 5, p. 501 | con ese trato de cuerda el alma al cuerpo, de suerte que
2647 2, 58, 5, p. 501 | que triste está vuestra alma hasta la muerte 8; unas
2648 2, 58, 5, p. 502 | que este dispertar esta alma mediante estos trabajos
2649 2, 58, 5, p. 502 | primer estado, cuando el alma anda tan a solas, tan desencuadernada
2650 2, 58, 5, p. 502 | los cuales está atada el alma con el cuerpo, y acabar
2651 2, 58, 5, p. 502 | Porque, a mi parecer, el alma con el cuerpo es como un
2652 2, 58, 5, p. 502 | tiene el cuerpo cuando el alma lude y frisa con el cuerpo.
2653 2, 58, 5, p. 502 | con el cuerpo. Y cuando el alma falta, el cuerpo se hiela
2654 2, 58, 5, p. 502 | helado y como diciendo que el alma lo desamparaba.~Luego, según
2655 2, 58, 5, p. 502 | entran, dispierten a un alma y la pongan en el segundo
2656 2, 58, 6, p. 503 | lo íntimo y escondido del alma r, pero éstas han sido más
2657 2, 58, 6, p. 504 | eterno, y cuál pones a un alma cuando tú quieres! No quiero
2658 2, 58, 6, p. 504 | desencuadernamiento que el alma traía del cuerpo; ahora,
2659 2, 59, 9, p. 516 | manera—, con la vida y con el alma y con vender, si para ello
2660 2, 59, 10, p. 517 | ligero como lo había sido su alma en acudir a Dios, no lo
2661 2, 59, 10, p. 517 | pero, como no señor del alma, voluntad y deseos que interiormente
2662 2, 60, 2, p. 523 | semejantes cuál trais a un alma que desea con veras sólo
2663 2, 60, 4, p. 524 | obras que adentro obra en un alma, y cómo aquello se probaría
2664 3, 2, 1, p. 543 | summa perfección llegar un alma a tal grado que jamás repare
2665 3, 2, 1, p. 544 | tantas veces David que su alma y cuanto en él había bendijera
2666 3, 2, 1, p. 544 | que debe tener [395v] un alma sancta ha de ser sin melindre,
2667 3, 3, 3, p. 556 | tablas que son su cuerpo y alma, en quien Dios en lo retirado
2668 3, 3, 4, p. 558 | un retrato c vivo en su alma de lo que hablaba el propheta,
2669 3, 3, 5, p. 559 | favoreces y das luz a un alma, que son obras de mano derecha,
2670 3, 4, 3, p. 565 | acá fuera, y otro en el alma, dándole luz de lo de allá
2671 3, 5, 1, p. 567 | veces suele Dios enllenar un alma de penas y sentimientos,
2672 3, 5, 2, p. 572 | las tribulaciones hasta el alma.~ ~
2673 3, 5, 3, p. 574 | alcanzas de cuenta a un alma! Y si tanto se siente lo
2674 3, 5, 3, p. 574 | verdad sienta y se aflija el alma que no desea conformarse
2675 3, 5, 5, p. 577 | sentir tan en lo vivo y en el alma una cosa j, y es menester
2676 3, 5, 5, p. 577 | de la aflicción de aquel alma, aprieta él por su parte
2677 3, 5, 5, p. 577 | rincones, aprieta y enllena el alma de la pena que Su Majestad
2678 3, 5, 5, p. 577 | de mortificar a aquella alma, paren mill pensamientos
2679 3, 5, 5, p. 578 | adentro. ./. Conócese el alma muy libre, suelta y desatada
2680 3, 5, 5, p. 578 | cain por de fuera, dejan al alma muy libre para que haga
2681 3, 5, 5, p. 578 | no tiene esta libertad el alma cuando ./. Dios la da a
2682 3, 5, 5, p. 579 | no sé si digo bien) el alma a quien entraron hasta sus
2683 3, 5, 5, p. 579 | Dios guisó: que dejó esta alma trabada de tal manera que
2684 3, 5, 5, p. 579 | interior que Dios envió a un alma todo se lo llevó tras sí
2685 3, 5, 5, p. 579 | de suerte que aquella tal alma quede bien empapada y enbebida
2686 3, 5, 5, p. 579 | aunque finja penas en un alma s, sólo por ellas persuade
2687 3, 5, 5, p. 579 | son en provecho de aquel alma.~ Lo cuarto,
2688 3, 5, 5, p. 579 | para sólo inquietar un alma, y que conozca las primeras
2689 3, 6 580 | pueden tener por donde el alma se derrama y deshace a,
2690 3, 6 580 | esposo, el cual quiere a un alma libre, sola b y desnuda.~ ~
2691 3, 6, 1, p. 581 | Su Majestad busca es un alma desnuda y desembarazada
2692 3, 6, 1, p. 581 | género de cumplimiento: un alma rendida, mortificada, sin
2693 3, 6, 2, p. 582 | recebidos en su corazón y alma.~ Parecíame este
2694 3, 6, 2, p. 583 | que han de ir los pies del alma, que son los afectos, lavados
2695 3, 6, 2, p. 583 | polvo de la tierra y el alma desnuda de todos los favores
2696 3, 6, 2, p. 583 | de acá. Y si por bien el alma no busca a Dios en este
2697 3, 6, 3, p. 586 | voluntad y descubrirse al alma que quiere y ama para que
2698 4, 1 591 | inhabitante en el centro del alma. Como vía de acceso y medio
2699 4, 1 591 | Dios que encienda nuestra alma, procurar conservar este
2700 4, 1 591 | lo cuarto, que nuestra alma quede ya encendida y abrasada
2701 4, 1 591 | telón de fondo, pide que el alma no se contente ./. con «
2702 4, 1 591(2) | de la SS. Trinidad en el alma del justo, según la doctrina
2703 4, 1 591(2) | Dios y la divinización del alma según la doctrina del B.
2704 4, 1 592 | que, dondequiera que esta alma va, allí se lleva a su Esposo
2705 4, 1 592 | la presencia divina, el alma posee «los bienes del mismo
2706 4, 1 592 | gracia, en el fondo del alma (quedan libres la trascendencia
2707 4, 1 592 | abandonarse a Dios, huésped del alma. La vía purgativa, de que
2708 4, 1 592 | facultades (la noche activa del alma), obra del hombre, de las
2709 4, 1 593(7) | tema de las relaciones del alma con Dios Trinidad en el
2710 4, 2 594 | Oh Dios de mi alma!, y cómo veo que haces esto
2711 4, 2 594 | Religión (y lo propio es al alma que él mucho ama) todo es
2712 4, 2 594 | digo de la Religión a un alma que, estando hoy e sintiendo
2713 4, 2, 1, p. 595 | aquello le conviene a aquella alma mientras en este valle de
2714 4, 2, 1, p. 596 | seca y sin jugo de nuestra alma con el rocío secreto que
2715 4, 2, 2, p. 596 | algo lo sintió torcido el alma que él amaba por no le acudir
2716 4, 2, 2, p. 597 | propios ojos vean cómo el alma significada por la mujer
2717 4, 2, 2, p. 597 | veces le sucede esto a un alma afligida a quien se le alejó
2718 4, 2, 2, p. 597 | habíe de ser, era para el alma a quien se le suspendió
2719 4, 2, 2, p. 597 | consolada vida. Y para esta alma no lo es, porque si su ración
2720 4, 2, 3, p. 598 | grande provecho para su alma porque por entonces así
2721 4, 2, 3, p. 598 | adelante. Lo propio digo yo del alma a quien Dios necesitare
2722 4, 2, 3, p. 598 | Así, no se espante esta alma sancta si algunas veces,
2723 4, 2, 3, p. 599 | Bien diferente es el alma del cuerpo y las potencias
2724 4, 2, 3, p. 599 | porque trabando Dios del alma, traba y lleva también a
2725 4, 2, 3, p. 599 | que pasa entre cuerpo y alma, quien convino que estuviesen
2726 4, 2, 3, p. 599 | estuviesen juntos. Porque si el alma rica y le da a gozar de
2727 4, 2, 3, p. 599 | sus nuevos granjeos del alma; y si el estiércol es bajo
2728 4, 2, 3, p. 599 | su valor en compañía del alma; que, en fin, la fertiliza
2729 4, 3, 1, p. 601 | suele Dios mortificar un alma que de ordinario la ha tenido
2730 4, 3, 3, p. 603 | y se agrada tanto de un alma que ensancha f sus senos
2731 4, 4, 1, p. 607 | labra y perficiona a un alma con grandes veras y le sirve
2732 4, 4, 1, p. 607 | si del todo está esta tal alma desasida de lo que había
2733 4, 4, 1, p. 607 | desea, si gusta más esta alma de estar sola y con aflición
2734 4, 4, 2, p. 609 | Señor, sólo él le enllena el alma y sus gustos; y cuando él
2735 4, 4, 2, p. 609 | tenía del que deseaba su alma, sino que siempre le duró
2736 4, 4, 2, p. 610 | de soledad para hablar al alma.~ ¡Oh! Trazas
2737 4, 4, 2, p. 610 | Dios está dispertando en un alma con esas largas y escondidas
2738 4, 4, 2, p. 610 | manjar sólido que nuestra alma busca? Sino que, si viéremos
2739 4, 4, 3, p. 611 | las cosas de acá abajo al alma sancta cuando su prelado
2740 4, 5 616(14) | Antífona mariana de Completas Alma Redemptoris Mater.~
2741 4, 6, 2, p. 623 | cercó con ellos para que el alma no se pueda salir por los
2742 4, 6, 2, p. 623 | Dios en lo profundo de su alma haciendo una visita rigurosa
2743 4, 6, 4, p. 626 | presunción, porque es muy llano, alma que está así enpapada y
2744 4, 7, 3, p. 629 | que con tu presencia un alma coge y una Religión crece,
2745 4, 7, 4, p. 631 | contrarios, para quedar la tal alma r más desenbarazada para
2746 4, 7, 4, p. 631 | da aquel árbor de vida al alma donde él está plantado?,
2747 4, 7, 4, p. 632 | animal, sino para que el alma discurra y u saque consecuencia
2748 4, 7, 4, p. 632 | sustento y mantenimiento del alma está allá arriba, donde
2749 4, 7, 5, p. 632 | 5. Alma endiosada~ ~
2750 4, 7, 5, p. 633 | dos días. Oh Señor de mi alma w, Dios y bien de todas
2751 4, 7, 5, p. 633 | el bien que tú haces al alma donde tú estás! ¿Qué tengo
2752 4, 7, 5, p. 633 | presencia de Dios en el alma? y ¿Que está rica? ¿Que
2753 4, 7 633(y) | de Dios‑alma sobre lín.~
2754 4, 7, 5, p. 633 | pesar; y es decir que el alma que te tiene está endiosada,
2755 4, 7, 6, p. 634 | soberano árbor de vida en el alma do se planta, que cuando
2756 4, 7, 6, p. 634 | Baste haber dispertado a un alma que desea a Dios con estas
2757 4, 7, 7, p. 636 | fructos y bienes que un alma puede tener con tal compañía,
2758 4, 7, 7, p. 637 | se sienta y cena con el alma 36, dándole un estrecho
2759 4, 7, 8, p. 638 | vocis 38, y atruenan a un alma de suerte que, quiriéndosele
2760 4, 7, 8, p. 638 | quietud. Que por eso al alma a quien Dios se le quiso
2761 4, 7, 8, p. 638 | desembarazada debe estar un alma para este singularíssimo
2762 4, 7, 9, p. 639 | parábola del sembrador al alma dispuesta y entregada a
2763 4, 7, 9, p. 640 | gran lástima sería que el alma del religioso que viene
2764 4, 7, 9, p. 640 | presencia de Dios en esta tal alma. A mi parecer, cada pensamiento
2765 4, 7, 9, p. 640 | en depósito en esta tal alma; y como alma [446r] a quien
2766 4, 7, 9, p. 640 | en esta tal alma; y como alma [446r] a quien le lleva
2767 4, 7, 9, p. 640 | tener humor para que en su alma crezca esta presencia de
2768 4, 7, 9, p. 640 | despedreguemos y linpiemos nuestra alma de las cosas más pequeñitas,
2769 4, 7, 9, p. 640 | Si queremos r que nuestra alma goce en el entendimiento
2770 4, 7, 9, p. 640 | cuidados de suerte que el alma quede pura y linpia para
2771 4, 7, 9, p. 641 | Así digo yo que esta alma que con veras pretende esta
2772 4, 7, 9, p. 641 | valor. Pues ¿por qué el alma que pretende afinar sus
2773 4, 7, 9, p. 641 | sino que, demás de tener su alma muy linpia de cualquier
2774 4, 7, 9, p. 642 | se infiere denegarle al alma las cosas de acá abajo y,
2775 4, 7, 9, p. 642 | 447r] y negaren, ese día el alma ha de buscar manjar más
2776 4, 7, 9, p. 642 | volar por esos aires. El alma que está ocupada en pensamientos
2777 4, 7, 9, p. 642 | certíssima el haber de volar el alma a lo alto y buscar a su
2778 4, 8 642 | ha de procurar hacer un alma que de veras pretende llegarse
2779 4, 8, 1, p. 643 | placeat uxori 2. Dividida el alma, pierde de su estima; los
2780 4, 8, 1, p. 643 | lugar. Lo propio digo yo del alma [447v] que está o pretende
2781 4, 8, 1, p. 643 | el sacrificio que nuestra alma hiciere a Dios de sus pensamientos
2782 4, 8, 1, p. 644 | palabras en romance—: cuando el alma no la consientan derramarse
2783 4, 8, 1, p. 644 | fructo. Y así quiere Dios el alma del justo: estéril de pensamientos
2784 4, 8, 2, p. 644 | en romance: Puso Dios el alma en este cuerpo, diole d
2785 4, 8, 2, p. 645 | scalones o tres jornadas del alma. La una, salir fuera por
2786 4, 8, 2, p. 645 | sentidos al recogimiento del alma y del recogimiento a la
2787 4, 8, 2, p. 645 | inclinación natural en nuestra alma, por la cual gusta de spaciarse
2788 4, 8, 2, p. 645 | de ellas y recogerse el alma en sí.~ Celio
2789 4, 8, 2, p. 645 | violencia. El rato que el alma se entretiene en estas cosas
2790 4, 8, 2, p. 646 | segundo scalón o stado que el alma se recoge, porque de otra
2791 4, 8, 2, p. 646 | el jugo y divirtirían el alma de la atención que entonces
2792 4, 9, 1, p. 647 | entrada y aposento en su alma al mismo Dios, cuya presencia
2793 4, 9, 1, p. 647 | segundo grado que alcanza el alma que desea alcanzar esta
2794 4, 9, 3, p. 649 | el cuarto estado de esta alma que decimos que, después
2795 4, 9, 4, p. 650 | Dios que encienda nuestra alma, procurar conservar este
2796 4, 9, 4, p. 650 | lo cuarto, que nuestra alma quede ya encendida k y abrasada
2797 4, 9, 4, p. 651 | principal, etc. Desta suerte, el alma deseosa de Dios primero
2798 4, 9, 4, p. 651 | tercero, lo entra en su alma n y, como en bolsas, procura
2799 4, 9, 4, p. 651 | es una misma cosa con el alma del justo. De suerte que
2800 4, 9, 4, p. 651 | Dios muy de ordinario a un alma como por güésped, no porque
2801 4, 9, 4, p. 651 | quedarme por marido. Pero el alma sancta de quien vamos tratando,
2802 4, 9, 4, p. 652 | que, donde quiera que esta alma va, allí se lleva a su esposo
2803 4, 9, 4, p. 652 | pequeños servicios que un alma os hace que, viniendo por
2804 4, 9, 4, p. 652 | Esto es lo que hace el alma en el tercer estado que
2805 4, 9, 4, p. 652 | cuarto estado, en que esta alma queda con una bendición
2806 4, 9, 4, p. 652 | bendición de todas las gentes al alma que llega a este estado:
2807 4, 10, 1, p. 653 | Dios! Qué gusto es ver un alma habituada en tu presencia,
2808 4, 10, 1, p. 653 | manifiesta Dios y entra en la tal alma, como dice san Juan en el
2809 4, 10, 1, p. 653 | se hizo para descansar el alma que llega a alcanzar este
2810 4, 10, 1, p. 653 | muy sin ojos, atina esta alma dónde está su Dios, en ella
2811 4, 10, 1, p. 653 | saliese el fuego que en su alma se encerraba y entrase otro
2812 4, 10, 1, p. 654 | admirables que le levantaron su alma sobre millares de montes
2813 4, 10, 1, p. 654 | este summo bien que esta alma posee es muy poco lo que
2814 4, 10, 1, p. 654 | peso venga en fil y esta alma quede en paz. Que es lo
2815 4, 10, 2, p. 655 | por mucho que hagamos, el alma se quedará bien baja si
2816 4, 10, 2, p. 655 | para que, levantada g el alma en alto, pueda decir a Dios
2817 4, 10, 2, p. 655 | beso que desea recebir un alma de Dios, se significa este
2818 4, 10, 2, p. 655 | cuarto estado en que el alma goza a solas y en pacificación
2819 4, 10, 2, p. 655 | tanta dulzura, este poner el alma boca con boca de Dios, este
2820 4, 10, 2, p. 655 | el tercer estado de esta alma perfecta, en el cual gocé
2821 4, 10, 2, p. 656 | decíamos denantes k, el alma, en este estado, no admite
2822 4, 10, 2, p. 656 | sentidos, pues quedando el alma en este estado tan spiritualizada
2823 4, 10, 2, p. 656 | quiere hacer officio de alma, ejercitando [453v] su officio
2824 4, 10, 2, p. 656 | la fiesta que le hacen al alma allá dentro en darle este
2825 4, 10, 2, p. 656 | solas goza esta dichosa alma este bien y presencia de
2826 4, 10, 3, p. 656 | propio su ejercicio n del alma, podrán inpedir bien tan
2827 4, 10, 3, p. 657 | porque así conviene esté y el alma que quisiere gozar de lo
2828 4, 10, 3, p. 658 | que, como carcoma, roen el alma de suerte que no le dejen
2829 4, 10, 3, p. 658 | volverlas interiores, donde el alma hila muy más delgado que
2830 4, 10, 3, p. 658 | en que Dios y aquella tal alma han de vacar de cualquier
2831 4, 10, 3, p. 659 | llamo yo gorgojo que roe el alma, que es la flor de la harina
2832 4, 10, 3, p. 659 | cosa que pueda distraer el alma, sino que, como águila caudal,
2833 4, 10, 3, p. 659 | mucho que, si en esta tal alma [455v] reina Cristo en grado
2834 4, 10, 3, p. 659 | cuarto, que es donde el alma habíe subido, que llegue
2835 4, 10, 3, p. 659 | voluntad— para que en toda esta alma no reine sino Dios? Y, gozando
2836 4, 10, 3, p. 660 | depósito de su presencia en un alma. Que, atento que hay dos
2837 4, 10, 4, p. 660 | su poco, de suerte que al alma la dejan desnuda de spíritu
2838 4, 10, 4, p. 661 | son palomas y tienen buen alma y grande conocimiento, pero
2839 4, 10, 4, p. 661 | este cuarto estado donde el alma descansa con su Dios.~
2840 4, 10, 4, p. 661 | relox espiritual de nuestra alma está detenido y parado el
2841 4, 10, 4, p. 661 | abajo s, es llano hacer el alma su officio. La piedra imán
2842 4, 10, 5, p. 662 | se pone. ¡Oh Dios de mi alma, y qué soberanos y divinos
2843 4, 10, 5, p. 663 | tuviere en la tierra, tenga el alma y su conversación en el
2844 4, 10, 5, p. 663 | obscuridad y poco saber del alma.~ Llano es que
2845 4, 10, 5, p. 663 | voluntad de rectitud y el alma llena de gracia. Torcióse
2846 4, 10, 5, p. 664 | no dejan levantarse el alma a las cosas para que fue
2847 4, 11, 4, p. 669 | transparente, darán lugar a que el alma perciba lo que Dios le dijere.
2848 4, 11, 4, p. 669 | terrestres, que siendo el alma muy agradable a los ojos
2849 4, 11, 4, p. 669 | hombres en cuyos cuerpos el alma tiene tal disposición que
2850 4, 11, 4, p. 670 | medios de dar Dios luz a un alma (y al cabo creo que es todo
2851 4, 11, 4, p. 670 | rayos que Dios envía a un alma, mediante la cual luz esta
2852 4, 11, 4, p. 670 | mediante la cual luz esta alma desea y procura hacer su
2853 4, 11, 4, p. 670 | como de esta unión suele un alma gozar según diferentes disposiciones
2854 4, 11, 4, p. 670 | hombre exterior, a quien el alma está informando, de ahí
2855 4, 11, 5, p. 671 | particular de que goza esta alma así unida y que ha llegado
2856 4, 12, 1, p. 674 | conocer y a sentir a la tal alma. Quiero decir que puede
2857 4, 12, 1, p. 674 | tan spiritualmente a un alma que, sin género de sentimiento
2858 4, 12, 1, p. 674 | cuerpo, le goce y sienta el alma, como decíamos de la quintaesencia
2859 4, 12, 1, p. 674 | hombre, id est, cuerpo y alma e, lleve su parte de este
2860 4, 12 674(e) | id‑alma sobre lín.~
2861 4, 12, 2, p. 675 | recogiéndose [464r] el alma adentro por la mortificación
2862 4, 12, 2, p. 676 | cansados dejan más libre el alma para que piense y vea cómo
2863 4, 12, 3, p. 678 | participar del bien que el alma interiormente enpezó a sentir.~
2864 4, 12, 3, p. 678 | haberse alejado [465v] el alma de sus propios sentidos
2865 4, 12, 3, p. 678 | reciben y gozan, ya porque el alma, apartándose de sí, quedó
2866 4, 12, 4, p. 679 | luz y conocimiento que un alma tenía de la verdad, digo
2867 4, 12, 4, p. 680 | haber Dios purgado a un alma y quedando sin esos sentimientos,
2868 4, 12, 4, p. 680 | que pretendía de la tal alma, habiendo ella alcanzado
2869 4, 12, 4, p. 680 | sensibles y los libró todos al alma, dándoselos intelectuales
2870 4, 13, 1, p. 681 | es de Dios, sustenta al alma, que es la que lo contempla.
2871 4, 13, 1, p. 682 | son las tres potencias del alma: el entendimiento, donde
2872 4, 13, 4, p. 685 | potencias y sentidos del alma publican y dicen Dios, que
2873 4, 13, 4, p. 686 | los sembrados de nuestra alma y sirven, aunque parecen
2874 4, 14, 3, p. 689 | concepción, aquella sanctíssima alma a quien clara y vivamente
2875 4, 15, 1, p. 693 | por preso y captivo en el alma que tú entraste; y si pides
2876 4, 15, 1, p. 693 | la limpieza y pureza del alma, de suerte que a todas cosas
2877 4, 15, 1, p. 694 | esos afectos así limpios y alma pura, entra muy bien el
2878 4, 15, 2, p. 695 | mismo Cristo, porque un alma exercitada en entramas vidas,
2879 4, 15, 3, p. 695 | Lo propio digo yo: que el alma que quisiere gozar de este
2880 4, 15, 3, p. 696 | sosieguen el tiempo que el alma hubiere de reposar.~
2881 4, 15, 3, p. 696 | miedos y peligros que su alma en cualquier ocasión debe
2882 4, 15, 3, p. 696 | muertos sus sentidos y su alma más levantada en oración
2883 4, 15, 3, p. 697 | maltratada, pero por de dentro su alma estaba blanca y hermosa,
2884 4, 17, 1, p. 705 | muy provechosos para el alma que los recibe, porque le f
2885 4, 17, 2, p. 706 | determina de llevar a un alma al cielo, ésta se la mezcla
2886 4, 17, 2, p. 706 | aseguran y afierran en el alma, donde están, para que no
2887 4, 17, 2, p. 708 | tal persona la paz de su alma y le desterraron, quitaron
2888 4, 17, 2, p. 709 | como licor q, penetran el alma hasta lo ascondido de ella.
2889 4, 17, 3, p. 709 | soberana presencia, se ase el alma a su Dios, porque conoce
2890 4, 17, 3, p. 709 | Son la cuna que aduerme al alma devota para que no todo
2891 4, 17, 3, p. 710 | que saben todo lo que el alma quiere y ha menester.~ ¡
2892 4, 18, 2, p. 711 | de una comunidad y de un alma. La cual sin su ./. presencia
2893 4, 18, 3, p. 713 | Oh Señor, Dios de mi alma, y si acabásemos de entender
2894 4, 18, 4, p. 715 | entender que el modo que el alma ha de tener en buscar a
2895 4, 18, 4, p. 715 | esposo: que se contente el alma con entender que le tiene
2896 4, 18, 5, p. 716 | por quien tiene vida un alma. Que fue decir: Yo te pescaré
2897 4, 18, 5, p. 716 | propias redes con que el alma ha de pescar a Dios: redes
2898 4, 18, 5, p. 717 | y me cogerás y pescarás, alma devota, [485r] con un balido
2899 4, 19, 1, p. 718 | manera que, según esto, el alma unida con Dios no es otra
2900 4, 19, 2, p. 718 | presencia de Dios, con quien el alma c está unida y con cuyo
2901 4, 19, 2, p. 718 | hemos dicho, pegándose el alma a las cosas de acá abajo.~
2902 4, 19, 2, p. 719 | manibus meis semper 3; mi alma no ha de andar a los rincones,
2903 4, 19, 2, p. 719 | se derrite y deshace; el alma, el pábilo; la luz es el
2904 4, 19, 2, p. 719 | cosas del cuerpo a las del alma, y abatir la razón y levantar
2905 4, 19, 2, p. 719 | sensualidad, echar por tierra el alma y levantar por los gustos
2906 4, 19, 2, p. 719 | spíritu, y el cuerpo al alma, de suerte que viniese a
2907 4, 19, 3, p. 720 | puestos en execución del alma que pretende tener a Dios
2908 4, 19, 3, p. 720 | Pues todo esto tiene el alma que está encendida en este
2909 4, 19, 3, p. 721 | Que descanso es en que el alma aún i no para, sino antes
2910 4, 19, 3, p. 721 | Y digo que, cuando el alma llega a hacer de sí esta
2911 4, 19, 3, p. 721 | vuela. Y así allí ya el alma se zabulle y queda como
2912 4, 19, 3, p. 721 | decía que habíe de hacer un alma después de alcanzada esta
2913 4, 19, 3, p. 721 | que decimos ha de tener un alma para se conservar en su
2914 4, 19, 4, p. 722 | interior y esterior del alma y cuerpo. Esta es la que
2915 4, 19, 5, p. 723 | Así ha de ser un alma que ha de caminar a buscar
2916 4, 20, 1, p. 727 | y sustento agradable al alma, de regalo y entretenimiento
2917 4, 20, 2, p. 728 | nuestro buen Dios en un alma que por su amor padece trabajos? ¿
2918 4, 20, 2, p. 728 | ventanas por donde desafogan su alma y dan lugar a que el fuego
2919 4, 20, 3, p. 729 | Oh Señor de mi alma!, y quién te amase y quisiese,
2920 4, 20, 3, p. 729 | suerte que el que en su alma te tiene no tiene que temer
2921 5, 1 738 | espléndido banquete reservado al alma. «Prendas de amor», que
2922 5, 2, 1, p. 742 | pasión!, etc.; venga una alma del infierno y dígaos el
2923 5, 2, 1, p. 742 | aparejado. En esto sacó una alma que agora se ha pintado
2924 5, 2, 2, p. 745 | palomilla, a una mujercita y alma devota; y, sintiéndose herida,
2925 5, 2, 3, p. 747 | hombre cuánto era de la Madre alma que su precioso Hijo hubiese
2926 5, 2, 3, p. 747 | aguardo hará Dios dél un alma tan pura cual Su Majestad
2927 5, 3 747 | las mercedes que hace al alma donde se halla, tomando
2928 5, 3, 1, p. 748 | dispertar y levantar a un alma a consideración de grandes f
2929 5, 3, 5, p. 765 | donde Dios está recreando un alma, pasa por llamas. En las
2930 5, 5, 1, p. 781 | premiar en la otra vida el alma, sino también el cuerpo,
2931 5, 5, 1, p. 782 | gozando de este summo bien un alma por gracia y perfecta unión,
2932 5, 5, 1, p. 782 | es luz, no sólo la da al alma donde por gracia habita,
2933 5, 5, 1, p. 782 | cuando Dios está en el alma, se les saca librea hasta
2934 5, 5, 1, p. 782 | amor que Dios tiene a un alma y del bien que la tal alma
2935 5, 5, 1, p. 782 | alma y del bien que la tal alma goza estando unida con Dios.
2936 5, 5, 1, p. 783 | vestido doblado, sayo para el alma y capa para el cuerpo. Hay
2937 5, 5, 2, p. 785 | Dios estos bienes en un alma, porque estén más guardados
2938 5, 5, 3, p. 786 | que Dios se communica a un alma y la alumbra y enseña verdades t.~
2939 5, 5, 3, p. 786 | es echar el demonio de un alma que no de un cuerpo. Y de
2940 5, 5, 3, p. 787 | Dios licencia sin que el alma consintiera en cosa, que
2941 5, 5, 5, p. 791 | cada momento obrando con su alma y con las de todos los hombres;
2942 5, 5, 5, p. 791 | que haces y usas con un alma suelen salir del curso ordinario
2943 5, 5, 5, p. 791 | tiene y posee lo que al alma le es gloria y a Dios honra.
2944 5, 5, 5, p. 791 | la medida que Dios da al alma. ./. Pero, como no es honra
2945 5, 5, 6, p. 794 | por resquicios de aquella alma sancta. Y si acá, a un hombre
2946 5, 6 798 | ofrecer. No digo acerca del alma, que espero en la Sanctíssima
2947 5, 6, 4, p. 806 | haberle tenido por de buen alma y, buen entendimiento y
2948 5, 7, 1, p. 810 | todo se haya despedido el alma de las prisiones del cuerpo,
2949 5, 7, 2, p. 811 | mostró el premio y gloria del alma cuyo y cuerpo era así ignominiosamente
2950 5, 7, 2, p. 811 | agravios no pueden llegar al alma 5.~ Pero, aunque
2951 5, 7, 3, p. 816 | corrieron y dieron con el alma en los cielos, donde vive
2952 5, 7, 3, p. 816 | juicio acompañará aquella alma bienaventurada y.~
2953 5, 7, 3, p. 816 | parecíe en esto ángel puro y alma limpidíssima, cual la busca
2954 5, 7, 3, p. 817 | ensuciar, manchar o salpicar al alma pura, o por lo menos, hacerle
2955 5, 7, 4, p. 819 | corresponder a lo que mi alma siente de este hermano en
2956 5, 7, 4, p. 820 | charidad cuál estaría el alma en oración, cuando no sentía
2957 5, 7, 4, p. 820 | crucificado, se subió el alma al cielo, que parece pudo
2958 5, 7, 4, p. 820 | cielo, que parece pudo decir alma tan sancta en aquella ocasión:
2959 5, 7, 4, p. 821 | estando en cuerpo se iba su alma con Dios al cielo, ahora
2960 5, 7, 5, p. 825 | de tanto provecho para un alma y la continua presencia
2961 5, 7, 5, p. 825 | Sanctíssima Trinidad recibiese su alma.~ En su entierro
2962 5, 7, 5, p. 826 | que harían con su pobre alma en el infierno? El propio
2963 5, 7, 5, p. 826 | público, ¿qué hará con su alma en el cielo? ¿Qué fiesta,
2964 5, 7, 5, p. 826 | honrará y premiará al alma que sube al cielo?~
2965 6, 1 830 | la historia de su propia alma. Atraído, por educación
2966 6, 2 834 | Dios se haya agradado, su alma no haya perdido y los hombres
2967 6, Dial1 838 | que es lo primero que un alma ha menester para levantar
2968 6, Dial1 839 | encubierto grande bien para el alma que las padece, como después
2969 6, Dial1 840 | desea se le va la vida y el alma tras ella, como el galgo
2970 6, Dial1 840 | pues, absente Dios del alma que lo busca con presunción
2971 6, Dial1 841 | huye y deja ./. la tal alma sola. Luego se enpieza a
2972 6, Dial1 845 | vuestro cuerpo, sino g vuestra alma, y con ella detener tantas
2973 6, Dial1 846 | religioso allá dentro en el alma; y el sol tampoco ve lo
2974 6, Dial2 849(4) | antífona mariana de completas Alma Redemptoris Mater.~
2975 6, Dial2 850 | prelado. Es cierto que el alma de este tal está, como dice
2976 6, Dial2 850 | que son las potencias del alma: memoria, entendimiento
2977 6, Dial2 851 | penas, quieta y sosiega el alma, pero ha de ser conociendo,
2978 6, Dial2 853 | dispierta, aviva y tiene a un alma alerta en lo que ha comenzado.~
2979 6, Dial2 854 | temores con que Dios deja un alma en semejantes ocasiones
2980 6, Dial2 858 | temor interior que a un alma le queda en el officio o
2981 6, Dial3 873 | plumas para levantar a un alma y ponerla en seguro do descanse.
2982 6, Dial3 873 | alas ligeras con que el alma apresura el paso y aligera
2983 6, Dial3 878 | tratar de la intención ni del alma, sólo digo dos palabras
2984 6, Dial3 885 | apoderado del cuerpo y del alma que no sabréis dónde tiene
2985 6, Dial3 885 | para que quepa cuerpo y alma, porque con los dos brazos
2986 6, Dial3 887 | positivo que puso Dios en tu alma, el cual no lo podemos conocer
2987 6, Dial3 888 | bien y hacer llaga en el alma el ver tantas cosas como
2988 6, Dial3 889 | officio, pues por el bien del alma tuvo en este mundo tan poco
2989 6, Dial3 892 | vistas vimos, porque si el alma ha gustado de Dios, es negocio
2990 6, Dial3 893 | recogimiento, deja a un alma enbelesada y llena de deseos
2991 6, Dial3 895 | rincones de casa. Dichosa el alma que sabe buscar a Dios en
2992 6, Dial3 896 | cuando Dios previene un alma, le da este conocimiento
2993 6, Dial3 903 | poco en el cuerpo y en el alma.~ PEDRO: Cierto,
2994 6, Dial3 905 | un regalillo que hace al alma a hurtadas del cuerpo. De
2995 6, Dial3 905 | tocado que con veras desea un alma para con Dios: gozarle y
2996 6, Dial3 905 | y muy conforme lo que el alma goza y conoce. Y este deseo
2997 6, Dial3 905 | porque cuando llega un alma a desear con veras a Dios,
2998 6, Dial3 906 | Tanpoco desea esta alma gozar a solas de Dios por
2999 6, Dial3 906 | Es muy cierto que a esta alma que desea gozar a Dios a
3000 6, Dial3 907 | come. Pero los deseos del alma sancta, de quien vamos tratando,