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Obras II – S. Juan B. de la C.
   Parte, Capítulo, §, Página
 1     2,    4,   2, p.   40   |     en nombre de la reforma y recoleción, pero que no se trate ni
 2     2,    4,   3, p.   41   |       se trataba acerca de la recoleción, sino sólo tomar posesión.
 3     2,    4,   3, p.   43   |   hacer escritos desta sancta recoleción y cogiendo firmas aun de
 4     2,    5,   2, p.   54   |   monesterio y grandeza de la recoleción. ¡Oh buen Dios mío, cómo
 5     2,    5,   4, p.   56   |       se decía o acerca de la recoleción y se hacía acerca de costumbres.
 6     2,    5,   4, p.   56   |    las cosas exteriores de su recoleción que se iban apagando, los
 7     2,    5,   5, p.   58   |      su amor, por su hábito y recoleción, fuese martirizado con semejantes
 8     2,    5,   6, p.   59   |  acuerdo la acta desta sancta recoleción; pocos ringlones, pero en
 9     2,    6,   1, p.   61   |       olvidados de lo que era recoleción, [14v] otra vez vuelto b
10     2,    6,   3, p.   64   |      este sancto hábito en la recoleción, como adelante diremos si
11     2,    6,   3, p.   64   |      de hábitos de sayal y de recoleción a estos dos religiosos a
12     2,    7,   3, p.   78   |    iban cada día nuevas de la recoleción. Y se trataba algo, aunque
13     2,    7,   3, p.   80   |     plática de la descalcez y recoleción e. Y, cosa admirable, que
14     2,    8,   2, p.   82   |       Si para las cosas de la recoleción fuere necesario saber algo
15     2,    9,   1, p.   95   |       cuando ni se trataba de recoleción ni a mí me pasaba por la
16     2,    9,   2, p.   95   |     hechura y obra de nuestra recoleción.~            Estando en
17     2,    9,   2, p.   95   |     más mínimo remiendo de la recoleción ni se sonase por alguna
18     2,    9,   2, p.   96   |       me había de haber en la recoleción, no como si yo hubiera de
19     2,   11,   1, p.  100   |   estado de nuestra reforma y recoleción. Llegado y pasado el Domingo
20     2,   11,   2, p.  101   |       para nosotros y para la recoleción luego enpezó a enfermar
21     2,   11,   4, p.  104   |      estuvimos, tratóse de la recoleción indiferente y tibiamente,
22     2,   11,   4, p.  104   |       que no habrá reforma ni recoleción por esa vía; y que, mientras
23     2,   11,   4, p.  104   |        aunque las cosas de la recoleción andaban desta manera, señalaron
24     2,   11,   4, p.  104   |     está en el desierto, para recoleción, que la tenían perdida e
25     2,   12           105   |    parecerme dejaría pasar la recoleción a que anduviese los pasos
26     2,   12           105   |       de la casa y bien de la recoleción. Riñéronme porque dejaba
27     2,   12,   1, p.  105   |      adelante con el hábito y recoleción, se fuese por ministro a
28     2,   12,   1, p.  107   |      a su casa del Paño de la recoleción, pareciéndole que, pues
29     2,   12,   2, p.  108   |    vuelto t aquella casa a la recoleción, que, cuando esto leyeren,
30     2,   12,   3, p.  108   |      en todas las cosas desta recoleción se lava la lana. En este
31     2,   12           108(w)|  Prosiguen los sucessos de la recoleción en Valdepeñas, siendo ministro
32     2,   12,   5, p.  111   |     que no estaba afecto a la recoleción, y también tenerlo propicio
33     2,   12,   6, p.  113   |     letras, viene a honrar la recoleción. Pero advierto que el fraile
34     2,   13,   1, p.  116   |       veía se hacía contra la recoleción. De donde el otro scribió
35     2,   13,   1, p.  116   |       el ministro para con la recoleción, pero, para n los frailes
36     2,   13,   2, p.  116   |  persona, sino en favor de la recoleción, nada me dio gusto porque
37     2,   13,   2, p.  116   |   demonio pretendió asolar la recoleción r. Y fue que de secreto
38     2,   13,   2, p.  117   |     tan celoso del convento y recoleción, pudo decir algo, pero yo
39     2,   13,   4, p.  120   |     la causa de que contra la recoleción se hace ahora esa novedad,
40     2,   13,   4, p.  120   |       fray Juan Baptista a la recoleción de Valdepeñas.~           
41     2,   14,   1, p.  122   | Pesemos ahora el estado de la recoleción. El provincial, ya enojado
42     2,   14,   1, p.  123   |       en que llegó a estar la recoleción y casa de Valdepeñas. Y
43     2,   15           125   |    procurar fuese adelante mi recoleción, que no irme a Argel. Con
44     2,   15,   1, p.  125   |       de lo que hacían con la recoleción y cómo yo tenía pensamientos
45     2,   15,   2, p.  127   |       tiempo que estuvo en la recoleción, porque yo no lo conocí
46     2,   15,   4, p.  131   |     supe yo. Y después, en la recoleción, siendo su prelado, entre
47     2,   15,   4, p.  133   |   licencia para se venir a la recoleción. Diéronsela, y vino a la
48     2,   17,   1, p.  145   |     pues, habiendo sido de la recoleción, fueron siempre sus deseos
49     2,   18,   2, p.  153   |      decir, encontrado con la recoleción, que tal lo debiera de tener
50     2,   22,   3, p.  184   |       principio que tuvo esta recoleción para que sus charidades
51     2,   23,   3, p.  191   |  trece frailes perdidos en la recoleción, eso hace por mí, que nadie