Obras I - S. Juan B. de la C.
   Sección, Parte, Capítulo, Página
 1 Conoc,     0,  int,  245   |      María de la Visitación, la monja de Lisboa que indujo a engaño
 2 Conoc,     0,   14,  312   |     fray Luis de Granada con la monja de Portugal4; y otras muchas
 3 Conoc,     0,   16,  324   |          qué diré de una sancta monja que dicen hay en Carrión,
 4 Penas,     0,    2,  801   |         su tierra, llevaron una monja, la cual le cupo a un cacique,
 5 Penas,     0,    2,  801   |    estándole sirviendo la buena monja de moza de soldada muchos
 6 Penas,     0,    2,  802   |         a Dios. Pudo tanto esta monja con sus oraciones que le
 7 Penas,     0,    2,  802   |         y mis hijos contigo. La monja temió no la engañase; pero
 8 Penas,     0,    2,  802   |     Haciéndolo así el indio, mi monja tuvo grandíssima oración,
 9 Penas,     0,    2,  802   |        que viniesen a traer una monja a la suya, y que por un


Obras II – S. Juan B. de la C.
   Parte, Capítulo, §, Página
10     2,    8,   3, p.   84  |    cosas con palabras, dijo una monja sierva de Dios, habiéndoles
11     2,    8,   3, p.   85  |          no predicado—, dijo la monja: Padre mío, la mitad de
12     2,   29,   6, p.  234  |       un día mis trabajos a una monja sancta en Alcalá que llaman «
13     2,   37,   5, p.  292  |    habiendo w hecho Dios de una monja calzada a la sancta Madre,
14     2,   41,   3, p.  319  | discretas suyas y de una su tía monja descalza, que fue por quien
15     2,   41,   3, p.  319  |      vino la carta de la señora monja descalza y tía suya, realzando
16     2,   41,   3, p.  319  |        el mundo. Finalmente, mi monja estaba de espacio, pues
17     2,   41,   3, p.  320  |       ni ajenas. Porque, siendo monja descalza, profetizó que
18     2,   41,   3, p.  320  |    depósito de Alcalá. La de la monja me pidió el general de los
19     2,   41,   5, p.  323  |   reprehende y enseña lo que la monja no puede hacer por estar
20     2,   50,   3, p.  415  |              Inspiración de una monja~ ~            Debe j de
21     2,   50,   3, p.  415  |        así lo era la de nuestra monja con su pensamiento en su
22     2,   50,   3, p.  415  |         pobres».~            La monja quedó espantada. Lo primero,
23     2,   50,   3, p.  415  |        limosna, porque ella era monja que de muy buena gana daba
24     2,   50,   3, p.  415  |     alma y bien mío!, que ni la monja sabía tales frailes ni tal
25     2,   50,   3, p.  416  |        sucedió a nuestra sancta monja: que, saliendo de la oración,
26     2,   50,   3, p.  416  | Trinidad. Finalmente, mi sancta monja los descubrió y halló y
27     2,   50,   3, p.  416  |        ansias p que esta sancta monja tiene de nuestro sancto
28     2,   50,   7, p.  425  |         Dios a aquella g sancta monja que arriba decimos 23, y
29     2,   50,  11, p.  429  |          11.       Carta de una monja al señor arzobispo~ ~           
30     2,   50,  11, p.  429  |        corazón de una pobrecita monja encerrada, no cabía allí,
31     2,   50,  11, p.  430  |  corazón de  ./. aquella sancta monja para nos lo dar [330r] a
32     2,   50,  11, p.  430  |         determinó nuestra buena monja scribirle la carta siguiente,
33     2,   50,  11, p.  431  |     haberle sucedido a la dicha monja lo aquí dicho, sino que
34     5,    3,   5, p.  766  |  lástima que hay quien se entra monja y religioso y reparten su
35     6,  Dial1           836|      mirado y escuchado aquella monja de Portugal, y por su consejo
36     6,  Dial1           836|    mejor si a aquella diabólica monja le hubiera aconsejado que
37     6,  Dial3           927|         Sanctidad sacasen a una monja de un monasterio para que
38     6,  Preg4          1068|      que para hacer a una mujer monja son menester ya tantas cosas
39     7,    5,   6, p. 1184  |       bien una hija, meten otra monja—, partido es para el mundo
40     7,    8,   1, p. 1285  |         de cosas de gustos); la monja quisiera ser casada; la


Obras III - S. Juan B. de la C.
   Parte, Capítulo, §, Página
41     1,  Intro             5|       hábito. Es el caso de una monja jerónima, a la que se refiere
42     1,  Intro             5|      las ansias que esta sancta monja tiene de nuestro sancto
43     1,    1,   2, p.   13  |       monjas, porque la primera monja que hubo en el mundo, desposada
44     1,    1,   2, p.   13  | nuestras sanctas monjas. Fue la monja más querida, más adornada
45     3,   11,   4, p.  296  |       cargada de hijos para ser monja, y no es gusto de Dios que
46     6,   36,   2, p.  625  |      privase de este bien a una monja, al sancto le dio gana de
47     6,   36,   2, p.  625  |        en la boca y que la otra monja a quien no había echado
48     6,   55,   2, p.  754  |    doncella que dice quiere ser monja, que le pida el librito
49     7,    7           860  |         tratando de una su hija monja, que debía ser más estimada


Obras IV – S. Juan B. de la C.
   Sección, Parte, Cap.
50 Cartas,      0, III        |        merced me avise si es ya monja, qué años tiene y qué es