Obras I - S. Juan B. de la C.
   Sección, Parte, Capítulo, Página
 1 Llaga,     0,    5,  171   |        esta fructa, está medrosa, temerosa, no tome más licencia de
 2 Conoc,     0,    3,  258   |      tiene sus gustos, afligida y temerosa con sus dudas a los pies
 3  Dial, Dial1,    1,  378   |         tengo dicho: que la mujer temerosa ella propia es alabada15;
 4 Penas,     0,    8,  833   |        quitarle la pena a un alma temerosa de Dios cuando hizo alguna
 5 Penas,     0,    9,  837   |      llegan los miedos de un alma temerosa de Dios. Que, me parece
 6 Penas,     0,    9,  838   | consideremos lo propio en un alma temerosa de Dios cuando a sí y a
 7 Penas,     0,   27,  921   |     Cristo y no saldrá la tal voz temerosa y asombradiza, sino muy
 8 Penas,     0,   28,  925   |          sobre alguna persona muy temerosa de Dios y, representándosele
 9 Humil,     0,   16, 1041   |         mucho que un alma sancta, temerosa de Dios, pareciendo ante
10 Noche,     0,    4, 1061   |           marido con ellos. Ella, temerosa de lo que habíe de suceder
11 Noche,     0,    4, 1064   |          su pedazo de culpa, que, temerosa no reviva y vuelva en sí
12 Error,     0,    9, 1113   |       porque pudiera esta esposa, temerosa de perder tiempo y quedarse


Obras II – S. Juan B. de la C.
   Parte, Capítulo, §, Página
13     2,   31,   2, p.  251  |           sacude, despide el alma temerosa cualquier cosa que en sí
14     2,   33,   4, p.  263  |         dónde venía. Y como gente temerosa de Dios, no querían aprisionar
15     2,   51,   4, p.  442  | cumplimiento de sus deseos, estar temerosa. Pero yo confieso que todo
16     3,    5,   5, p.  577  |       nuestra propia imaginación, temerosa de lo por venir, y en eso
17     6,    2           834  |         han respondido y que está temerosa no haya ofendido a Dios.
18     6,  Dial3           921|        ser aflicciones de un alma temerosa de Dios, bien entiendo no
19     6,  Dial3           949|         de una torre muy alta; y, temerosa del golpe que ha de dar
20     6,  Preg3          1055|      recatada, mirada, prudente y temerosa; pero como g el conocimiento
21     7,    4,  10, p. 1142  |           tenga en el alma, gente temerosa de Dios, que era a quien


Obras III - S. Juan B. de la C.
   Parte, Capítulo, §, Página
22     3,   14,   7, p.  328  |        que, cuando en una persona temerosa de Dios y que desea hacer
23     6,    1,   7, p.  437  |         ella venía muy afligida y temerosa con la barriga a la boca.
24     7,    4           831  |          esta tal alma que así es temerosa de Dios la detenga en lo
25     7,   13           914  |           a esta persona t, [71r] temerosa de eso, es llano se habíe
26     7,   13           914  |        penada y más crucificada y temerosa de que no se le acabe la
27     7,   15           924  |       virtud y fortaleza, sino de temerosa y medrosa de los juicios
28     9,    5          1071  |          parece f madre amorosa y temerosa que, al criado que en su
29    11,   11          1210  |         obligación pesada y harto temerosa que haya el súbdito de tomar
30    12,    2          1283  |          en esta persona, como es temerosa de Dios, engendran otros
31    12,    2          1283  |    peccados, porque su conciencia temerosa tiene tanto cuidado de eso
32    12,    2          1284  |        persona que se sabe que es temerosa de Dios para que con esas
33    12,    2          1287  |       sobre toda pena, en un alma temerosa de Dios, peccar o haber


Obras IV – S. Juan B. de la C.
   Sección, Parte, Cap.
34 Exhor,      0,  10         |        Como la buena criada, que, temerosa de que no se le queme la