Obras II – S. Juan B. de la C.
   Parte, Capítulo, §, Página
 1     2,   17,   3, p.  149  |        tierra. Y pues vuestras reverencias se han quedado con llegar
 2     2,   17,   4, p.  150  |      trasgos; pues ya vuestras reverencias ven que ni los difuntos
 3     2,   20,   1, p.  164  |        negocios a que vuestras reverencias van —que yo se los había
 4     2,   29,   5, p.  233  |       mí: —Padre, que vuestras reverencias gozan del bien que gozamos; ¡
 5     2,   35,   6, p.  281  |        la sustancia). Vuestras reverencias hagan como buenos y miren
 6     2,   37,   5, p.  294  |       de Calatrava; y vuestras reverencias tienen un monasterio en
 7     6,  Preg4          1064|        la religión de vuestras reverencias goza, usó Dios de esta misma
 8     6,  Preg4          1064|      divina compañía, vuestras reverencias pueblan, enllenan el mundo,
 9     6,  Preg4          1064|       bien la conocen vuestras reverencias. Pues si la conocen, llano
10     6,  Preg4          1064|    veras, diré que en vuestras reverencias se cumple el refrán:  ./. 
11     6,  Preg4          1065|        de mujeres que vuestras reverencias tienen, no dice bien.~           
12     6,  Preg4          1065| También me parece que vuestras reverencias se burlaban porque, si eso
13     6,  Preg4          1065|    habíemos de ver en vuestras reverencias enmienda de ese arrepentimiento
14     6,  Preg4          1065|  entender que como en vuestras reverencias hay tanto fervor, tanta
15     6,  Preg4          1065|  dotarlas. Pero entre vuestras reverencias cesa esta razón de pena,
16     6,  Preg4          1065|        partidos y, si vuestras reverencias salen a la guerra k y conquistan
17     6,  Preg4          1065|         pues habiendo vuestras reverencias acometido  ./. a Francia l,