Capítulo,  Párrafo

 1  0,1     |            el don de su paz y de su Espíritu (cf. Jn 20,19-23).~
 2  0,4     |              con plena docilidad al Espíritu Santo.~
 3  I,11    |             el don escatológico del Espíritu Santo y la constitución
 4  I,18    |  llevándoles el don de la paz y del Espíritu (cf. Jn 20,19-23). En efecto,
 5 II       |             resucitado y el don del Espíritu~
 6 II,20    |           cuando con la efusión del Espíritu Santo se cumplió la promesa
 7 II,23    |              discípulos suyos en el Espíritu, esperaban como a su maestro? ».(21)
 8 II,26(26)|            Cf. S. Basilio, Sobre el Espíritu Santo, 27, 66: SC 17, 484-
 9 II,28    |                  El día del don del Espíritu~28. Día de la luz, el domingo
10 II,28    |          también, con referencia al Espíritu Santo, día del « fuego ».
11 II,28    |          vinculada al « fuego » del Espíritu y ambas imágenes indican
12 II,28    |            y les dijo: « Recibid el Espíritu Santo. A quienes perdonéis
13 II,28    |           20,22-23). La efusión del Espíritu fue el gran don del Resucitado
14 II,28    |      después de la resurrección, el Espíritu, como « viento impetuoso »
15 II,28    |        vivificar por el soplo de su Espíritu.~
16 II,29    |           el día de la fe. En él el Espíritu Santo, « memoria » viva
17 III,31   |             28) mediante el don del Espíritu. Esta unidad se manifiesta
18 III,33   |             y ofrecida junto con su Espíritu: « ¡Paz a vosotros! » Al
19 III,36   |           del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.(49) En dicha asamblea
20 III,39   |           11) que, bajo la guía del Espíritu Santo, impulse al pueblo
21 III,40   |            texto sagrado, hecha con espíritu de oración y con docilidad
22 III,41   |              2 Co 1,20-22) y que el Espíritu Santo hace resonar en nosotros
23 III,42   |          cual la Iglesia, llena del Espíritu, se dirige al Padre, uniéndose
24 III,42   |                    en la unidad del Espíritu Santo ». De este modo la
25 III,43   |             invocado la efusión del Espíritu Santo, que actúa con una
26 III,44   |        reconciliación,(73) según el espíritu de lo que san Pablo recordaba
27 III,45   |       fuerza del Resucitado y de su Espíritu, los cometidos que les esperan
28 III,52   |     Resucitado y en la potencia del Espíritu Santo mostrando, hoy más
29 III,52   |     alentadores. Gracias al don del Espíritu, en muchos ambientes eclesiales
30 IV,56    |       Iglesia por medio del don del Espíritu. La alegría es, precisamente,
31 IV,56    | precisamente, uno de los frutos del Espíritu Santo (cf. Rm 14,17; Gal
32 IV,67    |        dejan paso a los valores del espíritu; las personas con las que
33 IV,67    |           el necesario descanso del espíritu y del cuerpo. (112)~
34  V,75    |          resucitó por la fuerza del Espíritu y se convirtió a su vez
35  V,75    |          vez en la fuente del mismo Espíritu para la humanidad. Por esto,
36  V,76    |           se celebran la venida del Espíritu Santo sobre los Apóstoles,
37  V,78    |          celebrado con el auténtico espíritu de la liturgia, no disminuye
38  V,80    |        litúrgicas, mezclando con el espíritu de la auténtica fe cristiana
39 Conclu,85|          sostenida y animada por el Espíritu. Él despierta su memoria
40 Conclu,85|    reanimando nuestra esperanza. El Espíritu está presente sin interrupción
41 Conclu,85|           su retorno glorioso: « El Espíritu y la Novia dicen: ¡Ven! » (
42 Conclu,85|         verdaderamente el papel del Espíritu he deseado que esta exhortación
43 Conclu,85|            dedicado precisamente al Espíritu Santo.~
44 Conclu,86|           central de Cristo y de su Espíritu, está presente en cada domingo