Capítulo,Párrafo

 1 II,3  |          tiempos envió Dios a su Hijo, nacido de mujer». Con estas
 2 II,3  |        en Dios» (cf. Ef 1,9). El Hijo,Verbo consubstancial al
 3 II,3  |         ha hablado por medio del Hijo» (cf. Heb 1, 1-2). El envío
 4 II,3  |           1-2). El envío de este Hijo, consubstancial al Padre,
 5 II,3  |        seno y vas a dar a luz un hijo a quien pondrás por nombre
 6 II,3  |       será grande y será llamado Hijo del Altísimo». «¿Cómo será
 7 II,3  |        será santo y será llamado Hijo de Dios (...) ninguna cosa
 8 II,3  |       Mesías prometido sería el «Hijo del Altísimo»? Esto era
 9 II,4  |           la unión entre madre e hijo. En efecto, la Virgen de
10 II,4  |       concibió un hombre que era Hijo de Dios, consubstancial
11 II,5  |       historia de la Madre y del Hijo. De hecho, este Hijo, que
12 II,5  |         del Hijo. De hecho, este Hijo, que es el verdadero y consubstancial «
13 II,5  |      verdadero y consubstancial «Hijo del Altísimo», dirá muchas
14 II,5  |     culminante de su misión: «El Hijo del hombre no ha venido
15 II,5  |       divina, de su unión con el Hijo que «el Padre ha enviado
16 III,7 |          comunión del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.~Al
17 III,7 |        vida divina. El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo —un
18 III,8 |   profetas, ya sea por medio del Hijo» hecho hombre (cf. Heb 1,
19 III,8 |      pecho, sin compadecerse del hijo de sus entrañas? Pues aunque
20 III,8 |           Mc 14, 36) —por ser su Hijo unigénito y consubstancial—,
21 III,8 |  totalmente divino. Hablaba como Hijo, unido al Padre por el eterno
22 III,8 |       así siendo al mismo tiempo Hijo auténticamente humano de
23 IV,11 |        del hombre en Jesucristo, hijo de María, toma y renueva
24 IV,11 |   consiste en el hecho de que el Hijo de Dios, consubstancial
25 IV,11 |  ciertamente a la concepción del Hijo, que es «Hijo del Altísimo» (
26 IV,11 |     concepción del Hijo, que es «Hijo del Altísimo» (Lc 1, 32),
27  V,13 |          devuelve a la vida a su hijo único, acompañando su gesto
28  V,13 |          la Biblia el título de «hijo de Abraham» se refiere sólo
29  V,14 |      quitado la vida a su propio hijo, porque ella no logra cancelar
30  V,15 |        que tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, el que iba a venir
31 VI,17 |     Virgen llega a ser Madre del Hijo de Dios. Estas dos dimensiones
32 VI,17 |        seno y vas a dar a luz un Hijo a quien pondrás por nombre
33 VI,17 |  concepción y del nacimiento del Hijo. Como Hijo del Altísimo,
34 VI,17 |        nacimiento del Hijo. Como Hijo del Altísimo, él te es dado
35 VI,18 |          concebir y dar a luz el hijo, la mujer «se realiza en
36 VI,18 |         interior para aceptar al hijo y traerle al mundo está
37 VI,18 |          los padres el don de un hijo. Por parte de la mujer,
38 VI,18 |     marido, dice: «te he dado un hijo», sus palabras significan
39 VI,18 |         tiempo: «este es nuestro hijo». Sin embargo, aunque los
40 VI,18 |         la madre acepta y ama al hijo que lleva en su seno como
41 VI,18 |          no sólo hacia el propio hijo, sino hacia el hombre en
42 VI,18 |       comienzo. La educación del hijo —entendida globalmente—
43 VI,19 |       encuentra en la Madre. El «Hijo del Altísimo» solamente
44 VI,19 |      humano, los que reciben del Hijo de Dios el poder de llegar
45 VI,19 |         del «despojo» del propio Hijo. «Esta es, quizás, la "kénosis"
46 VI,19 |          la hora de dar a luz un hijo, expresan inmediatamente
47 VI,22 |   Engendró en la tierra al mismo Hijo del Padre (...) a quien
48 VII,25|       Dios al mundo que dio a su Hijo único» (Jn 3, 16). Se trata,
49 VII,25|         Jn 13, 1). El Esposo —el Hijo consubstancial al Padre
50 VII,25|           se ha convertido en el hijo de María, «hijo del hombre»,
51 VII,25| convertido en el hijo de María, «hijo del hombre», verdadero hombre,
52 VII,25|        concluir que como hombre —hijo de Israel— reveló la dignidad