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 1  5|  terrenales, sino también el de la tierra misma, pues ve que de la
 2  5|         que de la fecundidad de la tierra le son proporcionadas las
 3  5|            garantizarla más que la tierra con su fertilidad.~
 4  6|           El que Dios haya dado la tierra para usufructuarla y disfrutarla
 5  6|            se dice que Dios dio la tierra en común al género humano
 6  6|         los múltiples frutos de la tierra o algo que se cambia por
 7  7|           a la naturaleza. Pues la tierra produce con largueza las
 8 13|          de su pecado: «Maldita la tierra en tu trabajo; comerás de
 9 13|      adversidades no se dará en la tierra, porque los males consiguientes
10 16| celestiales y eternas, dándonos la tierra como lugar de exilio y no
11 30|            y los mares. «Llenad la tierra y sometedla, y dominad a
12 30|    animales que se mueven sobre la tierra»23. En esto son todos los
13 33|      abundancia de productos de la tierra. Los hombres, sabiendo que
14 33|            incluso a amar más a la tierra cultivada por sus propias
15 33|     sentirán fácilmente apego a la tierra en que han nacido y visto
16 33|        cambiarán su patria por una tierra extraña si la patria les