Cap.,  Párrafo

 1  I,  8  |     social, a reconocerlo como su Señor Supremo y primer principio;
 2  I,  13 |       Alianza: Jesucristo, Dios y Señor nuestro, aunque se había
 3  I,  14 |       divina: Porque, aplacado el Señor con la oblación de este
 4  I,  18 |           el mismo Cristo Nuestro Señor: «Id, pues, y amaestrad
 5  I,  23 |    oraciones allá, apaciguando al Señor irritado49.~
 6 II,  27 |           porque santo soy Yo, el Señor, que los santifica»53. Y
 7 II,  27 |    precisamente es lo que pide al Señor para los hijos de Aarón: «
 8 II,  28 |           indigno posible ante el Señor, a quien cada día ofrece
 9 II,  34 |         se cuida de las cosas del Señor y de cómo ha de agradar
10 II,  36 |     purísimos que asisten ante el Señor88, ¿no ha de estar con mucha
11 II,  38 |         sólo para enaltecer en el Señor esta virtud, que tenemos
12 II,  39 |           de las ofrendas... y el Señor dejó ordenado que los que
13 II,  39 |         llamado al patrimonio del Señor, como lo expresa su mismo
14 II,  39 |          decir, a la herencia del Señor, no espera otra merced que
15 II,  40 |       conmovedoras palabras de su Señor: «Lo que hicisteis a uno
16 II,  42 |           Pastor, de ofrecerse al Señor de la mies como obrero infatigable? ¿
17 II,  43 |    obedecemos, Jesucristo Nuestro Señor, el cual se hizo por nosotros
18 II,  47 |     verdad que, en algún caso, el Señor, que juega con el universo119,
19 III,  61| diligentes obreros de la viña del Señor; tanto más cuanto que las
20 III,  61|  sacerdotes buenos y santos, y el Señor, sin duda, los concederá
21 III,  62|         vocación que Dios Nuestro Señor siembra abundantemente en
22 III,  64|         que bendiga el nombre del Señor por los siglos de los siglos150
23 III,  64|           amarse santamente en el Señor, recibir con frecuencia
24 III,  64|          y elección por parte del Señor para con su familia!~
25 CON,  70|          venido a la herencia del Señor no por el camino recto de