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| Pius PP. XI Miserentissimus Redemptor IntraText - Concordancias (Hapax Legomena) |
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1 1, 11 | 11. Añádase que la pasión expiadora
2 1 (29)| Ef 4,15-16.~
3 1 (30)| Jn 17,23.~
4 2, 15 | Pedro, día 8 de mayo de 1928, séptimo de nuestro pontificado.~* * * * * * * ~
5 1 (35)| Sal 68,21.~
6 1 (30)| Jn 17,23.~
7 INT (7)| 1 Cor 15,25.~
8 2 (48)| Mt 26,64.~
9 1 (39)| 1 Cor 12,27. ~
10 INT (1)| Mt 28,20.~
11 2 (46)| Jn 19,37.~
12 1 (20)| Epist. 63 n.381.~
13 1 (34)| Lc 22,43.~
14 2 (47)| Is 46,8.~
15 INT (3)| Is 59,1.~
16 1 (20)| Epist. 63 n.381.~
17 2 (48)| Mt 26,64.~
18 1 (35)| Sal 68,21.~
19 1 (9) | S. Th. II-II q.81, a.8c.~
20 1 (36)| In Ps. 86.~
21 1 (9) | S. Th. II-II q.81, a.8c.~
22 1 (27)| 1 Pe 2,9.~
23 1 (37)| Hech 91,1.~
24 INT, 1 | principio levantó los ánimos abatidos de los apóstoles, y levantados
25 2, 15 | asociarse a su Madre como abogada de los pecadores, dispensadora
26 1, 13 | grabe, no podrá menos de aborrecer y de abstenerse de todo
27 1, 5 | Pecadores como somos todos, abrumados de muchas culpas, no hemos
28 1, 5 | reconocemos suplicantes su absoluto dominio, o alabamos con
29 1, 13 | menos de aborrecer y de abstenerse de todo pecado como de sumo
30 INT, 4 | para conseguir más cierta y abundantemente sus frutos y para unir a
31 1, 8 | habla el Apóstol, tantos más abundantes frutos de propiciación y
32 INT, 4 | nuestra encíclica Quas primas, accediendo a los deseos y a las preces
33 1, 5 | dominio, o alabamos con acciones de gracias su largueza infinita;
34 3 | podamos a tu seguimiento. Acepta, te rogamos, benignísimo
35 INT, 4 | espontáneamente y de buen grado aceptará la dominación suavísima
36 1, 5 | siéndole ingrata, en vez de aceptarla como agradable.~Este deber
37 INT, 1 | venerables hermanos, deciros algo acerca de la honesta satisfacción
38 1, 12 | ofrece la idea de que se acercan los tiempos vaticinados
39 INT, 4 | prorrumpía unánime oponiendo acérrimamente, para vindicar su gloria
40 1, 13 | de alguna manera se acomodan también para describir nuestros
41 3 | conculcado, te presentamos, acompañándola con las expiaciones de tu
42 INT, 1 | apóstoles y discípulos, acongojados de su partida, para consolarles: «
43 1, 12 | tan triste que por estos acontecimientos parecen manifestarse «los
44 1, 9 | la sagrada liturgia y las actas de los Santos Pontífices
45 2, 14 | se rece solemnemente el acto de reparación al Sacratísimo
46 1 | Necesidad actual de expiación por tantos
47 1, 13 | reparar el honor de Cristo, de acudir a la salud eterna de las
48 1, 5 | de la caída miserable de Adán el género humano, inficionado
49 1, 12 | que se llama Dios o que se adora»43.~Y aún es más triste,
50 1, 5 | sólo aquel culto con que adoramos y damos los obsequios debidos
51 1, 5 | rechaza el Apóstol cuando nos advierte que «éramos por naturaleza
52 1, 13 | la voluntad divina y se afanará por reparar el ofendido
53 1, 8 | la consagración profesa y afirma la unión con Cristo, así
54 1, 8 | a Dios»19. Así, no duda afirmar San Cipriano «que el sacrificio
55 1, 13 | mortificaciones voluntarias, y las aflicciones que sobrevinieren, ya, en
56 1, 12 | expulsados de sus casas, afligidos con ultrajes, tormentos,
57 1, 5 | en vez de aceptarla como agradable.~Este deber de expiación
58 1, 6 | Holocaustos por el pecado no te agradaron; entonces dije: heme aquí»11.
59 1, 5 | suplicantes su absoluto dominio, o alabamos con acciones de gracias
60 3 | aquellos que, perdidos y alejados del camino de la salud,
61 INT, 1 | cristiana para los hombres, alejándolos del amor y del trato con
62 1, 12 | por la luz de la fe, ni alentada de la esperanza en la felicidad
63 INT, 1 | todo el mundo, así después alentó a la Iglesia a la victoria
64 | algo
65 | algunos
66 2, 15 | dio al Redentor, cuando lo alimentaba, cuando al pie de la cruz
67 3 | míranos aquí postrados ante tu altar. Queremos reparar con especiales
68 1, 5 | perfecciones cada vez más altas; pero estas inyecciones
69 INT, 2 | la Cruz, aparecida en la altura a un joven emperador, fue
70 1, 9 | este Corazón que tanto ha amado a los hombres y de tantos
71 1, 10 | digo»31.~Un alma de veras amante de Dios, si mira al tiempo
72 INT, 4 | decíamos, la voz de todos los amantes del Corazón de Jesús prorrumpía
73 2, 15 | de la gracia y mediadora, amantísimamente os damos como prenda de
74 1, 9 | aquellos que están obligados a amarle con especial amor». Para
75 INT, 3 | Nuestro, y los impulsa a amarlo más vehementemente, y a
76 INT, 2 | predicaba que no tanto ha de amarse a Dios como padre cuanto
77 1, 13 | con celo ferviente y como ambicioso de servir, se proponen hacer
78 1, 10 | Agustín: «Dame un corazón que ame y sentirá lo que digo»31.~
79 3 | los siglos de los siglos. Amén.~ ~
80 1, 12 | pueblo cristiano duramente amenazado y oprimido, puesto en el
81 1, 11 | a Saulo, «que respiraba amenazas y muerte contra los discípulos»37,
82 1, 10 | mismo Cristo se queja a sus amigos del desamparo, diciendo
83 INT, 2 | resplandeciera como signo de pacto de amistad «el arco que aparece en
84 1, 8 | sacrificio»20.~Por ello nos amonesta el Apóstol que, «llevando
85 3 | herido por los hombres tu amoroso Corazón.~Recordando, sin
86 INT, 1 | introdujo y se difundió ampliamente aquel error del cual era
87 INT, 2 | simultáneamente signo y causa de la amplísima victoria lograda inmediatamente.
88 1, 11 | 11. Añádase que la pasión expiadora
89 1, 5 | la consagración9, ha de añadirse la expiación con que totalmente
90 INT, 4 | en rendirlo. Siguieron, andando el tiempo, los individuos
91 1, 13 | día y noche las veces del Angel que consoló a Jesús en el
92 1, 10 | pero prevista, cuando el ángel del cielo34 se le apareció
93 1, 5 | firmeza que, como dice el Angélico, son propias de la consagración9,
94 2, 14 | penitencia»51.~Especialmente anhelamos y esperamos que aquella
95 INT, 2 | memoria, en su encíclica Annum Sacrum, admirando la oportunidad
96 INT, 4 | fiesta se renovase todos los años aquella consagración para
97 1, 12 | disciplina y de aquellas antiguas instituciones en que toda
98 1, 5 | nuestros tiempos, siguiendo el antiguo error de Pelagio, esto niegan
99 1, 6 | naturaleza para repararla. Así lo anunció el mismo Salvador de los
100 2 (49)| Cf. Ap 1,7.~
101 INT, 1 | del amantísimo Jesús al aparecerse a Santa Margarita María
102 INT, 2 | de los Césares, la Cruz, aparecida en la altura a un joven
103 1, 11 | declarar esto mismo cuando, apareciéndose a Saulo, «que respiraba
104 1, 10 | ángel del cielo34 se le apareció para consolar su Corazón
105 INT | Aparición de Jesús a Santa Margarita
106 2, 14 | suplicantemente invocada y felizmente aplacada por toda la comunidad de
107 1, 5 | sacrificios, aun públicos, para aplacar su justicia.~
108 INT, 4 | XIII, de feliz memoria, aplaudiendo el orbe cristiano.~Comienzos
109 1, 12 | puesto en el trance de apostatar de la fe o de padecer muerte
110 1, 5 | uno y a lo otro, con más apremiante título de justicia y amor
111 1, 13 | piadosas asociaciones asimismo aprobadas por la Sede Apostólica y
112 1, 9 | piedad que la Iglesia no sólo aprobó, sino que enriqueció con
113 1, 6 | oblación no quisiste; mas me apropiaste cuerpo. Holocaustos por
114 INT, 2 | humano linaje que salía del arca de Noé resplandeciera como
115 INT, 2 | de pacto de amistad «el arco que aparece en las nubes»5,
116 1, 8 | detestásemos el pecado y más ardientemente correspondiésemos a su caridad.~
117 1, 12 | multitudes de niños y niñas arrancados del seno de la Madre Iglesia,
118 1, 5 | depravado, había merecido ser arrojado a la ruina sempiterna. Soberbios
119 INT, 4 | ley natural, y hasta hubo asambleas que gritaban: «No queremos
120 INT, 1 | de la Cruz y antes de su ascensión al Padre desde este mundo,
121 INT, 1 | impugnaciones sin tregua y de tantas asechanzas oprimida.~Esta divina promesa,
122 INT, 2 | desplegada sobre las gentes, asegurando cierta la victoria en el
123 INT, 4 | para vindicar su gloria y asegurar sus derechos: «Es necesario
124 1, 13 | divina Majestad, ya orando asiduamente, ya sufriendo pacientemente
125 2, 15 | y los hombres»52, quiso asociarse a su Madre como abogada
126 INT, 2 | herejía jansenista, la más astuta de todas, enemiga del amor
127 INT, 4 | todo cuanto propiamente atañe al culto del Sacratísimo
128 3 | las injurias contra ti, y atraer a cuantos podamos a tu seguimiento.
129 1, 12 | Por esas regiones vemos atropellados todos los derechos divinos
130 1, 8 | cual debe unirse con este augustísimo sacrificio eucarístico la
131 1, 8 | de cada miembro, recibe aumento propio, edificándose en
132 1, 7 | Mas, aunque la copiosa redención de
133 1, 12 | el ansia desapoderada de aura popular; la difamación de
134 INT, 2 | Jesús mostró su corazón como bandera de paz y caridad desplegada
135 2, 15 | confiada a vuestro cuidado, la bendición apostólica.~Dado en Roma,
136 1, 9 | los hombres y de tantos beneficios los ha colmado, y que en
137 2, 15 | celestiales de nuestra paternal benevolencia, a vosotros, venerables
138 INT, 2 | testimonios de la infinita benignidad de nuestro Redentor resplandece
139 2, 15 | Plazcan, finalmente, a la benignísima Virgen Madre de Dios nuestros
140 3 | Jesús, por intercesión de la Bienaventurada Virgen María Reparadora,
141 1, 12 | e inducidos a renegar y blasfemar de Jesucristo y a los más
142 1, 5 | de Pelagio, esto niegan blasonando de cierta virtud innata
143 1, 12 | se destruye o se pone al borde de la ruina.~Forman el cúmulo
144 INT, 4 | entero espontáneamente y de buen grado aceptará la dominación
145 INT, 2 | esperanzas; en El han de buscar y esperar la salvación de
146 1 (18)| Conc. Trid., sess.22 c.2.~
147 1, 5 | cristiana, después de la caída miserable de Adán el género
148 1, 12 | la felicidad futura, ni caldeada y fomentada por el calor
149 1, 12 | caldeada y fomentada por el calor de la caridad, de manera
150 INT, 3 | las recriminaciones de los calumniadores y que la ensalzaran con
151 3 | perdidos y alejados del camino de la salud, rehúsan seguirte
152 1, 12 | comulgan o se pasan a los campamentos enemigos. Y así aun involuntariamente
153 INT, 2 | entre llamas, con espléndido candor. En El han de colocarse
154 1, 12 | con ultrajes, tormentos, cárceles y hambre; multitudes de
155 2, 14 | oración ponemos al pie de esta carta para que se reparen nuestras
156 1, 12 | llena de vicios, lejos de la casa del Padre; vida no iluminada
157 1, 12 | religiosas expulsados de sus casas, afligidos con ultrajes,
158 1, 8 | sacrificios por los pecados, casi de la propia manera que
159 1, 8 | los santos, que por la fe católica profesamos, por donde los
160 2, 14 | practique por todo el universo católico. A este fin disponemos y
161 1, 6 | madero»13; «borrando la cédula del decreto que nos era
162 1, 8 | sacrificio del Señor no se celebra con la santificación debida
163 INT, 4 | Cristo Rey y su solemne celebración en todo el orbe cristiano.~
164 1, 13 | varones y mujeres que, con celo ferviente y como ambicioso
165 INT, 1 | protección cuantas veces se vio cercada de más graves peligros y
166 INT, 2 | opresión del yugo de los Césares, la Cruz, aparecida en la
167 1, 10 | dichosamente reina en los cielos? Respondemos con palabras
168 INT, 2 | de su sabiduría y de su ciencia»4.~Pues, así como en otro
169 1, 8 | Así, no duda afirmar San Cipriano «que el sacrificio del Señor
170 INT, 3 | fomentaran, conforme a las circunstancias.~Así, con la gracia de Dios,
171 1, 12 | todas partes sube a Nos clamor de pueblos que gimen, cuyos
172 1, 11 | persigues»38; significando claramente que en las persecuciones
173 1, 10 | almas piadosas cuanto más claro ven que los pecados de los
174 INT, 4 | maestro espiritual, el P. Claudio de la Colombiére, la primera
175 1, 12 | vestido de la mujer; la codicía desenfrenada de las cosas
176 1, 9 | tantos beneficios los ha colmado, y que en pago a su amor
177 2, 14 | honraran su Corazón, serían colmados con gracias celestiales».~
178 INT, 2 | espléndido candor. En El han de colocarse todas las esperanzas; en
179 INT, 4 | espiritual, el P. Claudio de la Colombiére, la primera en rendirlo.
180 INT, 2 | cierta la victoria en el combate. A este propósito, nuestro
181 2, 14 | miran tan menospreciado y combatido y con tantas contumelias
182 1, 5 | aquella común expiación y comenzaron a practicarlo guiados por
183 3 | no sólo los pecados que cometimos nosotros mismos, sino también
184 | cómo
185 1, 10 | corazón; y busqué quien compartiera mi tristeza y no lo hubo;
186 INT, 4 | fieles, con el favor de Dios completamos y perfeccionamos, cuando,
187 1, 7 | Sabiduría, según la cual ha de completarse en nuestra carne lo que
188 1, 8 | del cual, todo el cuerpo compuesto y bien ligado por todas
189 1, 12 | temeraria o sacrílegamente comulgan o se pasan a los campamentos
190 INT, 3 | extendida por todas partes, de comulgar el primer viernes de cada
191 1, 9 | otras cosas que los hombres comulgaran con ánimo de expiar, que
192 1, 5 | reconocieron el deber de aquella común expiación y comenzaron a
193 2, 14 | felizmente aplacada por toda la comunidad de los fieles unidos con
194 INT, 1 | designio de que lo que os comuniquemos cada uno de vosotros lo
195 1 (18)| Conc. Trid., sess.22 c.2.~
196 INT, 4 | la caridad cristiana y la conciliación de la paz en el Corazón
197 3 | reparación del honor divino conculcado, te presentamos, acompañándola
198 1, 8 | el mundo es corrupción de concupiscencia»23, sino que «en nuestros
199 INT, 1 | remedios convenientes a la condición de los tiempos y las cosas,
200 INT, 3 | como que más expeditamente conduce los ánimos a conocer íntimamente
201 1, 12 | rectores se congregaron y confabularon a una contra el Señor y
202 2, 15 | hermanos, y a toda la grey confiada a vuestro cuidado, la bendición
203 2, 15 | piadosamente, reparadora. Nos, confiados en su intercesión con Cristo,
204 2, 14 | deseado esplendor con nuestra confirmación, así la devoción de la expiación
205 1, 5 | consagración, tan fructífera y confirmada en la fiesta de Cristo Rey,
206 1, 9 | de los Santos Pontífices confirman.~Cuando Jesucristo se aparece
207 1, 12 | príncipes o rectores se congregaron y confabularon a una contra
208 2, 14 | al que traspasaron»46, y conmovidos por los gemidos y llantos
209 INT, 3 | expeditamente conduce los ánimos a conocer íntimamente a Cristo Señor
210 INT, 1 | Misericordiosísimo Redentor, después de conquistar la salvación del linaje
211 INT, 4 | al empezar este siglo, se consagra al Sacratísimo Corazón,
212 INT, 4 | su reino». De lo cual fue consecuencia feliz que todo el género
213 INT, 4 | aquella consagración para conseguir más cierta y abundantemente
214 3 | don de la perseverancia, consérvanos fidelísimos hasta la muerte
215 1, 10 | lo hubo; busqué quien me consolara y no lo hallé»35.~
216 INT, 1 | acongojados de su partida, para consolarles: «Mirad que yo estoy con
217 1, 13 | las veces del Angel que consoló a Jesús en el Huerto; de
218 1, 8 | favor de los hombres es constituido en lo que toca a Dios»28.~
219 1, 8 | de sus padecimientos y la consuma ofreciendo sacrificios por
220 1, 8 | tú en mí, para que sean consumados en la unidad»30.~Así, pues,
221 INT, 3 | en esta forma de devoción consxguiente, ¿no es verdad que se contiene
222 INT, 1 | fácilmente cuantas veces contemplamos desde esta elevada cumbre
223 1, 12 | le ocultará a quien vea y contemple este mundo, como dijimos, «
224 INT, 3 | consxguiente, ¿no es verdad que se contiene la suma de toda la religión
225 1, 11 | renueva y en cierto modo se continúa y se completa en el Cuerpo
226 1, 5 | por sus propias fuerzas continuamente progresa a perfecciones
227 INT, 4 | leyes y mociones populares contrarias al derecho divino y a la
228 1, 6 | del decreto que nos era contrario, quitándole de en medio
229 2, 14 | y combatido y con tantas contumelias ultrajado; pero especialmente
230 1, 7 | Mas, aunque la copiosa redención de Cristo sobreabundantemente «
231 1, 9 | sino que enriqueció con copiosos favores espirituales.~
232 1, 12 | bautismo con la sangre del Cordero inmaculado y enriquecidos
233 1, 8 | santificación debida si no corresponde a la pasión nuestra oblación
234 1, 8 | pecado y más ardientemente correspondiésemos a su caridad.~
235 INT, 3 | Corazón divino; de aquí la costumbre, hoy ya extendida por todas
236 1, 6 | Pero ninguna fuerza creada era suficiente para expiar
237 1, 5 | consagración es que al amor del Creador responda el amor de la criatura,
238 INT, 3 | Jesús ha ido de día en día creciendo; de aquí aquellas piadosas
239 1, 5 | Creador responda el amor de la criatura, síguese espontáneamente
240 1, 10 | del Apóstol: «Nuevamente crucifican al Hijo de Dios y le exponen
241 1, 8 | nuestras concupiscencias y crucificar nuestra carne con aquella
242 1, 8 | a semejanza de su muerte crucifiquemos nuestra carne con sus vicios
243 1, 8 | nuestra carne con aquella crucifixión mística de que habla el
244 1, 12 | la fe o de padecer muerte crudelísima. Todo lo cual es tan triste
245 1, 8 | expiación pende únicamente del cruento sacrificio de Cristo, que
246 | cualquier
247 | Cuánta
248 | cuánto
249 1, 8 | sino que «en nuestros cuerpos se manifieste la vida de
250 2, 15 | grey confiada a vuestro cuidado, la bendición apostólica.~
251 1, 5 | humano, inficionado de la culpa hereditaria, sujeto a las
252 INT, 1 | contemplamos desde esta elevada cumbre la universal familia de
253 1, 12 | la sombra de la muerte. Cunde además entre los fieles
254 1, 12 | clamor de pueblos que gimen, cuyos príncipes o rectores se
255 1, 8 | Cristo, así la expiación da principio a esta unión borrando
256 2, 15 | la bendición apostólica.~Dado en Roma, junto a San Pedro,
257 1, 10 | palabras de San Agustín: «Dame un corazón que ame y sentirá
258 1, 5 | A estos deberes, especialmente a la consagración,
259 1, 8 | celebra con la santificación debida si no corresponde a la pasión
260 1, 5 | adoramos y damos los obsequios debidos a su Majestad suprema, o
261 1, 11 | Cristo padeció cuanto debió padecer; nada falta a la
262 INT, 4 | por esta consagración que decíamos, la voz de todos los amantes
263 INT, 1 | plácenos, venerables hermanos, deciros algo acerca de la honesta
264 INT, 4 | Cuando eso hicimos, no sólo declaramos el sumo imperio de Jesucristo
265 1, 6 | borrando la cédula del decreto que nos era contrario, quitándole
266 1, 12 | sociedad doméstica y se defiende la santidad del matrimonio;
267 1, 13 | Apóstol: «Donde abundó el delito, sobreabundó la gracia»45,
268 1, 12 | juventud cristiana; el olvido deplorable del pudor cristiano en la
269 3 | expiar todo el cúmulo de tan deplorables crímenes, nos proponemos
270 1, 12 | menospreciada totalmente o depravada con muelles halagos la educación
271 1, 5 | concupiscencias y míseramente depravado, había merecido ser arrojado
272 3 | Dulcísimo Jesús, cuya caridad derramada sobre los hombres se paga
273 1, 12 | derechos divinos y humanos; derribados y destruidos los templos,
274 1, 13 | frecuentes y solemnes actos de desagravio encaminados a reparar el
275 1, 12 | vacilantes en la fe míseramente desamparan a Cristo, oprimido de angustias
276 1, 10 | se queja a sus amigos del desamparo, diciendo por los labios
277 1, 12 | cosas perecederas, el ansia desapoderada de aura popular; la difamación
278 INT, 1 | algunos del pueblo tal vez desconocen todavía, y otros desdeñan,
279 1, 13 | se acomodan también para describir nuestros tiempos; pues si
280 INT, 2 | tesoros de su bondad se descubrieron por aquella forma de devoción
281 1, 8 | misericordioso Jesús cuando quiso descubrirnos su Corazón con los emblemas
282 INT, 4 | del Sacratísimo Corazón, descuella la piadosa y memorable consagración
283 3 | ingratamente con el olvido, el desdén y el desprecio, míranos
284 1, 5 | al Amor increado, si fue desdeñado con el olvido o ultrajado
285 INT, 1 | desconocen todavía, y otros desdeñan, aquellas quejas del amantísimo
286 1, 11 | su Cuerpo místico padece, desea tenernos por socios en la
287 INT, 4 | Margarita María, cuánto deseaba que los hombres le rindiesen
288 2, 14 | después, empieza a tener su deseado esplendor con nuestra confirmación,
289 2, 14 | santamente propagada. Nos deseamos mucho que, más firmemente
290 1, 12 | de la mujer; la codicía desenfrenada de las cosas perecederas,
291 INT, 3 | de cada mes, conforme al deseo de Cristo Jesús.~
292 INT, 2 | bandera de paz y caridad desplegada sobre las gentes, asegurando
293 INT, 4 | de los impíos, se llegó a despreciar el imperio de Cristo nuestro
294 3 | el olvido, el desdén y el desprecio, míranos aquí postrados
295 1, 12 | y humanos; derribados y destruidos los templos, los religiosos
296 1, 12 | de Dios, con que la fe se destruye o se pone al borde de la
297 1, 8 | Redentor, más vehementemente detestásemos el pecado y más ardientemente
298 1, 5 | santidad y firmeza que, como dice el Angélico, son propias
299 1, 13 | amor medite cuanto hemos dicho y en lo profundo del corazón
300 1, 10 | reparación consolar a Cristo, que dichosamente reina en los cielos? Respondemos
301 1, 10 | sus amigos del desamparo, diciendo por los labios del Salmista: «
302 2, 14 | justicia de Dios, que por diez justos movido a misericordia
303 1, 12 | desapoderada de aura popular; la difamación de la autoridad legítima,
304 INT, 1 | cuando se introdujo y se difundió ampliamente aquel error
305 1, 11 | cuerpo». Nuestro Señor se dignó declarar esto mismo cuando,
306 1, 10 | que ame y sentirá lo que digo»31.~Un alma de veras amante
307 1, 6 | no te agradaron; entonces dije: heme aquí»11. Y «ciertamente
308 2, 15 | esfuerzos; que cuando nos dio al Redentor, cuando lo alimentaba,
309 1, 13 | por las parroquias, las diócesis y ciudades.~
310 3 | las miserables injurias dirigidas contra ti y contra tus santos,
311 1, 12 | incuria de la eclesiástica disciplina y de aquellas antiguas instituciones
312 INT, 4 | enseñó a la inocentísima discipula de su Corazón, Santa Margarita
313 2, 15 | abogada de los pecadores, dispensadora de la gracia y mediadora,
314 INT, 1 | con fortaleza y todo lo dispone con suavidad»2. Pero «no
315 2, 14 | universo católico. A este fin disponemos y mandamos que cada año
316 1, 7 | pero, por aquella admirable disposición de la divina Sabiduría,
317 3 | misericordia para nosotros, dispuestos a reparar con voluntaria
318 1, 8 | ofreció en la cruz; sólo es diverso el modo de ofrecerse»18;
319 1, 12 | ignorancia de las cosas divinas, inficionados de doctrinas
320 INT, 2 | nuestros ojos, faustísimo y divinísimo: el Sacratísimo Corazón
321 1, 12 | atropellados todos los derechos divinos y humanos; derribados y
322 2, 14 | eleve al grado litúrgico de doble de primera clase con octava—
323 INT, 1 | esparcir la semilla de la doctrina evangélica en todo el mundo,
324 1, 12 | divinas, inficionados de doctrinas falsas, viven vida llena
325 2, 14 | llantos de toda la Iglesia, doliéndose de las injurias inferidas
326 1, 10 | a Jesucristo trabajando, doliente, sufriendo durísimas penas «
327 3 | sintiendo ahora vivísimo dolor, imploramos ante todo tu
328 INT, 4 | de buen grado aceptará la dominación suavísima de Cristo Rey.
329 INT, 4 | Reyes y Señor de los que dominan.~
330 1, 5 | suplicantes su absoluto dominio, o alabamos con acciones
331 3 | expiación; y con el gran don de la perseverancia, consérvanos
332 1, 13 | que se le hacen, y aun no dudan ofrecerse a Cristo como
333 2, 14 | amantísimo Señor.~No es de dudar, venerables hermanos, sino
334 INT, 1 | el fin del mundo»1. Voz dulcísima, prenda de toda esperanza
335 3 | SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS~Dulcísimo Jesús, cuya caridad derramada
336 1, 12 | todo el pueblo cristiano duramente amenazado y oprimido, puesto
337 1, 9 | y las súplicas y preces durante una hora, que propiamente
338 1, 10 | trabajando, doliente, sufriendo durísimas penas «por nosotros los
339 1, 12 | y la necedad de los que, durmiendo o huyendo como los discípulos,
340 2, 14 | tarde y en vano lloren sobre E149.~Los justos más y más
341 1, 8 | emblemas de su pasión y echando de sí llamas de caridad:
342 1, 12 | fieles la incuria de la eclesiástica disciplina y de aquellas
343 INT, 2 | turbulentísimos tiempos de la moderna edad, serpeando la herejía jansenista,
344 1, 8 | recibe aumento propio, edificándose en amor»29. Lo cual el mismo
345 1, 12 | depravada con muelles halagos la educación de los niños, aún negada
346 1, 12 | la Iglesia la facultad de educar a la juventud cristiana;
347 1, 5 | naturaleza hijos de ira»10.~En efecto, ya desde el principio los
348 INT, 3 | vehementemente, y a imitarlo con más eficacia? Nadie extrañe, pues, que
349 INT, 1 | contemplamos desde esta elevada cumbre la universal familia
350 2, 14 | esta ocasión ordenamos se eleve al grado litúrgico de doble
351 | ello
352 INT, 3 | la ensalzaran con sumos elogios y solícitamente la fomentaran,
353 3 | Corazón.~Recordando, sin embargo, que también nosotros nos
354 1, 8 | descubrirnos su Corazón con los emblemas de su pasión y echando de
355 INT, 2 | en la altura a un joven emperador, fue simultáneamente signo
356 INT, 4 | cosas se restauran8, al empezar este siglo, se consagra
357 2, 14 | humilde, extendida después, empieza a tener su deseado esplendor
358 2, 14 | especialmente se sentirán enardecidos para trabajar por la salvación
359 1, 13 | solemnes actos de desagravio encaminados a reparar el honor divino,
360 1, 13 | podrán menos de sentir, encendidos en amor a Cristo apenado,
361 INT, 1 | apóstoles, y levantados los encendió e inflamó para esparcir
362 1, 6 | quitándole de en medio y enclavándole en la cruz»14, «para que,
363 INT, 1 | suavidad»2. Pero «no se encogió la mano del Señor»3 en los
364 INT, 2 | la más astuta de todas, enemiga del amor de Dios y de la
365 1, 12 | pasan a los campamentos enemigos. Y así aun involuntariamente
366 1, 6 | ciertamente El llevó nuestras enfermedades y sufrió nuestros dolores;
367 1, 12 | abundó la iniquidad, se enfrió la caridad de muchos»44.~
368 1, 13 | por la Sede Apostólica y enriquecidas con indulgencias, que hacen
369 1, 12 | del Cordero inmaculado y enriquecidos con la gracia, haya tantos
370 1, 9 | no sólo aprobó, sino que enriqueció con copiosos favores espirituales.~
371 INT, 3 | los calumniadores y que la ensalzaran con sumos elogios y solícitamente
372 INT, 1 | cada uno de vosotros lo enseñe a su grey y la excite a
373 INT, 4 | inmensa caridad para nosotros, enseñó a la inocentísima discipula
374 INT, 4 | faustísimo día en que el mundo entero espontáneamente y de buen
375 INT, 2 | caridad de los fieles se entibiaba, la caridad de Dios se presentaba
376 | entonces
377 1, 13 | pecado como de sumo mal; se entregará a la voluntad divina y se
378 2, 14 | y con nuevas fervores se entregarán al servicio de su Rey, a
379 1, 10 | de que el Hijo de Dios se entregase a la muerte; y aun ahora
380 1 (20)| Epist. 63 n.381.~
381 | éramos
382 | esas
383 1, 8 | de los Apóstoles «linaje escogido, real sacerdocio»27, debe
384 INT, 2 | de Jesús, «en quien están escondidos todos los tesoros de su
385 INT, 2 | Corazón de Jesús, no vaciló en escribir: «Cuando la Iglesia, en
386 2, 15 | de Dios nuestros deseos y esfuerzos; que cuando nos dio al Redentor,
387 | eso
388 INT, 1 | encendió e inflamó para esparcir la semilla de la doctrina
389 3 | altar. Queremos reparar con especiales manifestaciones de honor
390 2, 14 | Especialmente anhelamos y esperamos que aquella justicia de
391 INT, 2 | han de colocarse todas las esperanzas; en El han de buscar y esperar
392 1, 10 | Salmista: «Improperio y miseria esperó mi corazón; y busqué quien
393 INT, 4 | ella fue, con su maestro espiritual, el P. Claudio de la Colombiére,
394 1, 9 | enriqueció con copiosos favores espirituales.~
395 INT, 2 | resplandeciendo entre llamas, con espléndido candor. En El han de colocarse
396 2, 14 | empieza a tener su deseado esplendor con nuestra confirmación,
397 1, 11 | medida de su pasión. Completa está la pasión, pero en la cabeza;
398 2, 14 | esta devoción santamente establecida y mandada a toda la Iglesia,
399 3 | corazón compensar en cuanto esté de nuestra parte, y con
400 INT, 1 | consolarles: «Mirad que yo estoy con vosotros todos los días
401 1, 8 | hechos partícipes de su eterno sacerdocio, «ofrezcamos
402 1, 8 | este augustísimo sacrificio eucarístico la inmolación de los ministros
403 INT, 1 | lo enseñe a su grey y la excite a practicarlo.~
404 INT, 3 | más perfecta, como que más expeditamente conduce los ánimos a conocer
405 3 | presentamos, acompañándola con las expiaciones de tu Madre la Virgen, de
406 1, 11 | 11. Añádase que la pasión expiadora de Cristo se renueva y en
407 3 | ORACIÓN EXPIATORIA~AL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS~
408 1, 10 | crucifican al Hijo de Dios y le exponen a vituperio»33. Que si a
409 1, 12 | religiosos y religiosas expulsados de sus casas, afligidos
410 1, 5 | del que un poco más por extenso queremos, venerables hermanos,
411 1, 5 | expiación con que totalmente se extingan los pecados, no sea que
412 INT, 3 | con más eficacia? Nadie extrañe, pues, que nuestros predecesores
413 INT, 1 | hermanos, viene a la memoria fácilmente cuantas veces contemplamos
414 1, 12 | aún negada a la Iglesia la facultad de educar a la juventud
415 1, 12 | inficionados de doctrinas falsas, viven vida llena de vicios,
416 1, 11 | pasión, pero en la cabeza; faltaban todavía las pasiones de
417 INT, 1 | elevada cumbre la universal familia de los hombres, de tantos
418 INT, 4 | cristiano.~Comienzos tan faustos y agradables, Nos, como
419 1, 9 | enriqueció con copiosos favores espirituales.~
420 1, 12 | alentada de la esperanza en la felicidad futura, ni caldeada y fomentada
421 2, 14 | suplicantemente invocada y felizmente aplacada por toda la comunidad
422 1, 13 | y mujeres que, con celo ferviente y como ambicioso de servir,
423 2, 14 | santificarán, y con nuevas fervores se entregarán al servicio
424 3 | profanación de los días festivos, las miserables injurias
425 3 | perseverancia, consérvanos fidelísimos hasta la muerte en el culto
426 1, 5 | ruina sempiterna. Soberbios filósofos de nuestros tiempos, siguiendo
427 2, 14 | deseamos mucho que, más firmemente sancionada por nuestra autoridad
428 1, 12 | felicidad futura, ni caldeada y fomentada por el calor de la caridad,
429 INT, 3 | elogios y solícitamente la fomentaran, conforme a las circunstancias.~
430 1, 12 | pone al borde de la ruina.~Forman el cúmulo de estos males
431 INT, 1 | de extremo a extremo con fortaleza y todo lo dispone con suavidad»2.
432 1, 13 | de aquí finalmente los frecuentes y solemnes actos de desagravio
433 3 | manifestaciones de honor tan indigna frialdad y las injurias con las que
434 1, 5 | especialmente a la consagración, tan fructífera y confirmada en la fiesta
435 INT, 1 | en cierto modo secara las fuentes de la vida cristiana para
436 1, 10 | cualquier tiempo cometidos fueron causa de que el Hijo de
437 1, 12 | toda la vida cristiana se funda y con que se rige la sociedad
438 3 | magisterio de la Iglesia por ti fundada.~¡Ojalá que podamos nosotros
439 1, 10 | también de nuestros pecados futuros, pero previstos, el alma
440 1 (22)| Cf. Gál 5,24.~
441 2, 14 | y conmovidos por los gemidos y llantos de toda la Iglesia,
442 INT (5)| Gén 2,14.~
443 INT, 2 | caridad desplegada sobre las gentes, asegurando cierta la victoria
444 1, 12 | Nos clamor de pueblos que gimen, cuyos príncipes o rectores
445 INT, 4 | acérrimamente, para vindicar su gloria y asegurar sus derechos: «
446 1, 8 | pecados»25.~Ni solamente gozan de la participación de este
447 2, 14 | mi sangre?»50; y de aquel gozo que recibirá el Corazón
448 1, 9 | estas palabras que habían de grabarse en las almas piadosas de
449 1, 13 | profundo del corazón lo grabe, no podrá menos de aborrecer
450 3 | ofrecimiento de expiación; y con el gran don de la perseverancia,
451 3 | demás: la indiferencia a tan grande amor con la firmeza de la
452 1, 9 | su amor infinito no halla gratitud alguna, sino ultrajes, a
453 INT, 1 | veces se vio cercada de más graves peligros y molestias, para
454 INT, 4 | hasta hubo asambleas que gritaban: «No queremos que reine
455 INT, 4 | declarar públicamente la guerra a la Iglesia, con leyes
456 3 | rehúsan seguirte como pastor y guía, obstinándose en su infidelidad,
457 1, 5 | comenzaron a practicarlo guiados por cierto natural sentido,
458 | había
459 1, 8 | crucifixión mística de que habla el Apóstol, tantos más abundantes
460 1, 5 | queremos, venerables hermanos, hablaros en las presentes letras;
461 | hacer
462 1, 12 | o depravada con muelles halagos la educación de los niños,
463 1, 9 | pago a su amor infinito no halla gratitud alguna, sino ultrajes,
464 1, 10 | quien me consolara y no lo hallé»35.~
465 1, 12 | ultrajes, tormentos, cárceles y hambre; multitudes de niños y niñas
466 | haya
467 1, 9 | que jamás se olvidarán: «He aquí este Corazón que tanto
468 1, 5 | la expiación de la ofensa hecha a Dios por nuestras culpas
469 INT, 2 | resplandece singularmente el hecho de que, cuando la caridad
470 1, 8 | la vida de Jesús»24, y, hechos partícipes de su eterno
471 1, 6 | agradaron; entonces dije: heme aquí»11. Y «ciertamente
472 1, 5 | inficionado de la culpa hereditaria, sujeto a las concupiscencias
473 INT, 2 | moderna edad, serpeando la herejía jansenista, la más astuta
474 2, 14 | por un solo pecador que hiciere penitencia»51.~Especialmente
475 INT, 4 | orbe cristiano.~Cuando eso hicimos, no sólo declaramos el sumo
476 1, 5 | que «éramos por naturaleza hijos de ira»10.~En efecto, ya
477 2, 14 | cuando vieren a Aquel a quien hirieron «venir en las nubes del
478 1, 9 | de esta devoción, como la historia y la tradición, la sagrada
479 1, 6 | mas me apropiaste cuerpo. Holocaustos por el pecado no te agradaron;
480 1, 12 | que habían de preceder «al hombre de pecado que se levanta
481 1, 10 | De todo lo cual tanto más hondamente se penetran las almas piadosas
482 INT, 2 | Dios se presentaba para ser honrada con culto especial, y los
483 1, 5 | no hemos de limitarnos a honrar a nuestro Dios con sólo
484 2, 14 | aquellos que con esta devoción honraran su Corazón, serían colmados
485 1, 12 | de Jesucristo y a los más horrendos crímenes de la lujuria;
486 3 | las negligencias y los horribles sacrilegios con que se profana
487 1, 8 | también se ofrezcan como «hostias vivas, santas, agradables
488 1, 6 | hombres si el Hijo de Dios no hubiese tomado la humana naturaleza
489 1, 13 | que consoló a Jesús en el Huerto; de aquí las piadosas asociaciones
490 1, 12 | todos los derechos divinos y humanos; derribados y destruidos
491 2, 14 | consagración, en sus comienzos humilde, extendida después, empieza
492 1 (40)| Ibíd.~
493 1, 12 | involuntariamente se ofrece la idea de que se acercan los tiempos
494 INT, 3 | Sacratísimo Corazón de Jesús ha ido de día en día creciendo;
495 1, 12 | clase, que con increíble ignorancia de las cosas divinas, inficionados
496 1 (9) | S. Th. II-II q.81, a.8c.~
497 1, 12 | casa del Padre; vida no iluminada por la luz de la fe, ni
498 1, 12 | la perfidia de los que, a imitación del traidor Judas, o temeraria
499 INT, 3 | más vehementemente, y a imitarlo con más eficacia? Nadie
500 3 | especialmente de la caridad, e impedir además con todas nuestras