Parte, n.

 1 INT     |       llama "cristiano" —porque en Cristo tiene su origen y eficacia,
 2 INT     |           su origen y eficacia, en Cristo halla plena expresión y
 3 INT     |           expresión y por medio de Cristo conduce en el Espíritu al
 4 INT     |           subordinación al culto a Cristo y gravitan en torno a él
 5 INT     | contemporánea sobre el misterio de Cristo y sobre su propia naturaleza
 6 INT     |       María, Madre precisamente de Cristo y Madre de la Iglesia. Un
 7 INT     |         practica en el Espíritu de Cristo.~Quisiéramos, pues, detenernos
 8   I,  2 |          anual todo el misterio de Cristo, desde la Encarnación hasta
 9   I,  3 |            nacimiento inminente de Cristo y del Precursor 13.~
10   I,  4 |            del glorioso retorno de Cristo al admirable recuerdo de
11   I,  4 |     necesario punto de referencia: Cristo. Resulta así que este periodo,
12   I,  6 |          es una fiesta conjunta de Cristo y de la Virgen: el Verbo
13   I,  6 |            de Dios. Con relación a Cristo, el Oriente y el Occidente,
14   I,  6 |         perfecta configuración con Cristo resucitado; una fiesta que
15   I,  6 |            destino de aquellos que Cristo ha hechos hermanos teniendo "
16   I,  7 |            salvación realizado por Cristo, al cual la Virgen estuvo
17   I,  11|           median entre la Madre de Cristo y la Iglesia. En efecto,
18   I,  11|             Esposa sin mancilla de Cristo 25; en la Asunción reconocen
19   I,  11|        quiere vivir el misterio de Cristo: "... haz que tu santa Iglesia,
20   I,  11|        ella (María) a la pasión de Cristo, partícipe en la gloria
21   I,  11|           que falta a la pasión de Cristo".~
22   I,  12|            plenitud el misterio de Cristo. Como lógica consecuencia
23   I,  14|          abrazan el surgimiento de Cristo en la vida religiosa 37
24   I,  14|          han presentado delante de Cristo, Luz eterna 41; e invoca,
25   I,  15|           Virgen en el misterio de Cristo y, en armonía con la tradición,
26   I,  16|           de la perfecta unión con Cristo 43 esto es, de aquella disposición
27   I,  17|       llena de fe, y concibiendo a Cristo en su mente antes que en
28   I,  17|  acontecimientos de la infancia de Cristo, confrontándolos entre sí
29   I,  19|            afirma: "El origen que (Cristo) tomó en el seno de la Virgen,
30   I,  19|      miembros de aquélla se plasmó Cristo, en las aguas bautismales
31   I,  19|           regenerado se reviste de Cristo" 55.~
32   I,  20|           profética a la pasión de Cristo: que las palabras de Simeón,
33   I,  20|  culminación en el calvario, donde Cristo "a si mismo se ofreció inmaculado
34  II,  25|          la Liturgia, al Padre por Cristo en el Espíritu. En esta
35  II,  25|       porque ellos han sufrido con Cristo y con El han sido glorificados 68.
36  II,  25|           María todo es referido a Cristo y todo depende de El: en
37  II,  25|      absorbida por la "cuestión de Cristo" 70, que en las expresiones
38  II,  25|           medida de la plenitud de Cristo" (Ef 4,13); por otra parte,
39  II,  25|      incrementar el culto debido a Cristo mismo porque, según el perenne
40  II,  26|           capacidad de engendrar a Cristo en su propia alma, como
41  II,  28|      próximo a nosotros después de Cristo" 85; un puesto que en los
42  II,  28|            Dios, Cuerpo místico de Cristo 86, permitirá a los fieles
43  II,  28|     engendrar el Cuerpo místico de Cristo: "Una y otra son Madre de
44  II,  28|            Una y otra son Madre de Cristo; pero ninguna de ellas engendra
45  II,  28|        para ellos por la muerte de Cristo. De este modo el amor a
46  II,  29|          que nos une a la Madre de Cristo y Madre nuestro en la Comunión
47  II,  32|           piedad hacia la Madre de Cristo y de los cristianos es para
48  II,  32|           se convierte en camino a Cristo, fuente y centro de la comunión
49  II,  33|          de todos los creyentes en Cristo. Nos alegramos, en efecto,
50  II,  33|            María en el misterio de Cristo y de la Iglesia, por parte
51  II,  33|           en que los discípulos de Cristo volverán a encontrar la
52  II,  33|         María. Pues los que son de Cristo no fueron engendrados ni
53  II,  33|      porque, "¿está acaso dividido Cristo?" (cf. 1 Cor 1, 13); y debemos
54  II,  33|            todos juntos la vida de Cristo, para poder fructificar
55  II,  35|          más perfecta discípula de Cristo: lo cual tiene valor universal
56  II,  37|            comunidad apostólica en Cristo (cf. Jn 2, 1-12) y cuya
57  II,  37|      activo del amor que edifica a Cristo en los corazones.~
58 III,  45|  salvíficos que se han cumplido en Cristo: desde la concepción virginal
59 III,  45|          nuevamente el misterio de Cristo de la misma manera que fue
60 III,  46|            en alabanza constante a Cristo, término último de la anunciación
61 III,  48|         sensible a la humanidad de Cristo y a la bienaventurada Virgen
62 III,  48|            en torno al misterio de Cristo. Aunque sea en planos de
63 III,  48|     salvíficos llevados a cabo por Cristo. La primera hace presentes
64 III,  48|            fieles los misterios de Cristo, puede constituir una óptima
65 III,  49|  mesiánicos, el dolor salvífico de Cristo, la gloria del Resucitado
66 CON,  56|           relación con la Madre de Cristo. Culto a la Virgen de raíces
67 CON,  57|                                57. Cristo es el único camino al Padre (
68 CON,  57|           Padre (cf. Jn 14, 4-11). Cristo es el modelo supremo al
69 CON,  57|          Mujer nueva, está junto a Cristo, el Hombre nuevo, en cuyo
70 CON,  57|          ya el proyecto de Dios en Cristo para la salvación de todo
71 CON,  57|        para conducir los hombres a Cristo las palabras mismas que