Cap.,  N.

 1   I,9 |        Iglesia horizontes de una humanidad más preparada para la siembra
 2  II,11|         reconciliar consigo a la humanidad, después de que el pecado
 3  II,12|        de salvar al mundo y a la humanidad entera en virtud de «lo
 4  II,12|      perdonara los pecados de la humanidad: «Padre, perdónalos, porque
 5  II,12|          su amor al Padre y a la humanidad. Tomó sobre sí las heridas
 6  II,12|    infligidas por el pecado a la humanidad y ofreció la liberación
 7  II,12|      Padre toda la creación y la humanidad entera, para que la acogiera
 8  II,12|         cada persona y a toda la humanidad en cualquier circunstancia
 9  II,13|               13. ¿Cómo puede la humanidad de Jesús y el inefable misterio
10  II,13|       servicio del Padre y de la humanidad, revela que la vocación
11  II,13|          y la realización de una humanidad regenerada y renovada según
12  II,13|         comunión entre Dios y la humanidad, sino que también instauró
13  II,14|      misma vida la que habla, su humanidad, su fidelidad a la verdad,
14  II,14|          y la verdad de su misma humanidad.~
15 III,15|        iniciativas de bien de la humanidad en camino; "con admirable
16 III,17|     signo de comunión de toda la humanidad bajo una sola cabeza, Cristo63 .
17   V,24|          del amor de Dios por la humanidad, el sacramento de la salvación»115.
18   V,28|          y la vida nueva para la humanidad. Aliento a las diferentes
19   V,29|         el Padre mantiene con la humanidad, en el Hijo, con la fuerza
20   V,29|        la inmensa multitud de la humanidad (cf. Lc 12, 32), pero también
21   V,31|       por la paz y el bien de la humanidad162. La Iglesia debe seguir
22  VI,34| empobrecimiento espiritual de la humanidad. La Iglesia en Asia podría
23  VI,41|        encomendado por Dios a la humanidad, de gestionar la creación.
24 VII,46|       encierra la herencia de la humanidad misma, dado que la vida