Índice | Palabras: Alfabética - Frecuencia - Inverso - Longitud - Estadísticas | Ayuda | Biblioteca IntraText |
Juan Pablo II Ecclesia in Asia IntraText CT - Texto |
La dignidad de la persona humana
33. Los seres humanos, y no la riqueza o la tecnología, son los agentes principales y los destinatarios del desarrollo. Por consiguiente, el tipo de desarrollo que la Iglesia promueve va mucho más allá de las cuestiones económicas o tecnológicas: comienza y termina con la integridad de la persona humana, creada a imagen de Dios y dotada de la dignidad y los derechos humanos inalienables que Dios le dio. Las diversas declaraciones internacionales sobre los derechos humanos y las numerosas iniciativas inspiradas por ellas son signo de la creciente atención que se presta a escala mundial a la dignidad de la persona humana. Por desgracia, esas declaraciones a menudo no se cumplen en la práctica. Cincuenta años después de la solemne proclamación de la Declaración universal de derechos humanos, muchas personas aún se hallan sometidas a las más degradantes formas de explotación y manipulación, que hacen de ellas verdaderas esclavas de los más poderosos, de ideologías, del poder económico, de sistemas políticos opresores, de la tecnocracia científica o de la invasión de los medios de comunicación social169.
Los padres sinodales eran plenamente conscientes de la persistente violación de los derechos humanos en muchas partes del mundo, y particularmente en Asia, donde «millones de personas sufren discriminación, explotación, pobreza y marginación»170 . Asimismo, destacaron la necesidad de que todo el pueblo de Dios en Asia llegue a tomar clara conciencia del desafío inevitable e irrenunciable vinculado con la defensa de los derechos humanos y con la promoción de la justicia y la paz.