Capitulo

 1 V   |         durante algunos, ni siquiera pensó en la deuda ni en la promesa
 2 V   |              tormentosos días cuando pensó por vez primera en su vida
 3 V   |      siquiera lo que no tengo».~     Pensó en D. Juan Nepomuceno, y
 4 VI  |           será tonto este señorito? -pensó el clérigo.~     De repente
 5 VI  |                Porque lo primero que pensó hacer de aquel dinero que
 6 VI  |           sagrada. «¡Qué diferencia, pensó, entre aquello y esto!».~     
 7 VI  |            Aquella era la historia!, pensó Reyes desde el abismo de
 8 VI  |          levantarse y despedirse. No pensó en dar explicaciones ni
 9 VI  |              de cobrar dos veces, no pensó más en aquello y volvió
10 VII |          valor. ¿Por qué no? Es más, pensó que su pasión, su gran pasión,
11 VIII|             colonia, ¡a qué olería!» pensó. Pero olvidó enseguida su
12 VIII|                  Por lo menos calla -pensó, cuando ya estaba quieto,
13 VIII|          contestó Bonis en voz alta. Pensó lo siguiente: «En todo soy
14 VIII|                 Malditísimo marica! -pensó -; fue él, el sobón del
15 VIII|          tenía por propiamente suyo, pensó en entregarse a la reflexión
16 X   |         salir volando por el balcón, pensó, sin querer, en las brujas
17 X   |          animal es este calzonazos!» pensó, y siguió:~     -Es necesario
18 X   |           haciendo que bebía.~     Y pensó, sin querer, en medio de
19 X   |          llama la catástrofe». Y más pensó, a pesar de lo apurado de
20 X   |              cuanto tomemos el café, pensó, me voy a la zapatería a
21 X   |         presentable el tío mayordomo pensó Emma -; pero esto no quita
22 X   |             lanza al mundo otra vez -pensó ella que debían de estar
23 X   |      plutónica, a más altas esferas, pensó, y acabó por decir, a media
24 XII |       aceptaría el contrato. Tampoco pensó en teñirse las patillas,
25 XII |              acordó -por primera vez pensó en ello -, de que tales
26 XII |         tolerable y sugestivo. «¡Ay -pensó Bonis -, la paz del alma!
27 XII |          viese llorar. «Bueno sería -pensó mientras se iba serenando -,
28 XII |            vio cubierta de gloria, y pensó enseguida:~     «Parece
29 XIII|            dos o tres horas. Emma no pensó en retirarse mientras quedase
30 XIV |              se dijo asustado Bonis. Pensó de repente, como antaño-:
31 XIV |        Körner.~     -¡Dios lo sabe! -pensó Bonis.~     Emma, pálida,
32 XIV |          según él podía entenderlas, pensó en la posibilidad de que
33 XIV |       precisamente metempsicosis... -pensó -; pero puede haber algo
34 XV  |               Con que esas tenemos? -pensó don Nepo; pero se guardó
35 XV  |      lágrimas cerca de los párpados, pensó: «Lo mejor sería amar al
36 XV  |               La estricta moralidad, pensó, será para mí, como si dijéramos,
37 XV  |                   Riéndose va de mí -pensó Bonis -; ¡creerá que he
38 XVI |               Hijo o hija? Misterio -pensó Bonis, que en aquel instante
39 XVI |               El purgatorio es esto -pensó -. Yo he pecado. Yo he dilapidado,
40 XVI |             aquí salieron los Reyes -pensó Bonifacio, que desde una
41 XVI |           nombres de sus personajes, pensó Bonis: «Los cerdos y los
42 XVI |         serio más que la poesía!... -pensó Bonis -. Pero eso para mi
43 XVI | restauraciones.~     «Es una vieja», pensó Bonis resignado, sin amargura;
44 XVI |            parecía racional, si bien pensó que el clero debía tener
45 XVI |                        Pobre de mí! -pensó Bonis -. El hijo puede ser
46 XVI |       enternecido hasta lo inefable, pensó, ante todo, que estaban