Capitulo

 1 I   |      espontánea perversión del espíritu, prurito de enferma. Mucho
 2 II  |      de la letra y enemigo del espíritu y de toda interpretación
 3 II  |     tan alarmante tendencia el espíritu exaltado de Emma. El cariño
 4 III |   revelaba la existencia de un espíritu dentro de aquella flaca
 5 IV  |        era donde encontraba su espíritu más eficaz consuelo; un
 6 IV  |     las había despertado en su espíritu el diablo del habilitado
 7 VII |     vocación. Al poco rato «su espíritu se fue identificando con
 8 VII |   valor, ir al suplicio con el espíritu firme del desgraciado rey
 9 VII |       sin embargo, el alma, el espíritu puro, velaba, ¡sí, velaba!,
10 VII | anafrodítico; se le llenaba el espíritu de recuerdos de la niñez,
11 VII |        años, para albergue del espíritu sutil de la discordia y
12 IX  |  pensar con alguna fuerza. Tal espíritu, era más compatible con
13 IX  |       por lo que ella creía su espíritu singular, único, notaba
14 X   | repugnaba esta dependencia del espíritu con respecto de la materia,
15 X   |     tener fe en algo; su débil espíritu no le consentía en ninguna
16 X   |  dentro, en lo que llamamos el espíritu, porque advierto a ustedes (
17 X   |              El mal está en el espíritu, y el espíritu no se cura
18 X   |      está en el espíritu, y el espíritu no se cura con pócimas -
19 X   |        una corrupción más a su espíritu, el placer de despertar
20 XI  |        las tribulaciones de su espíritu.~     Fuera como fuera,
21 XI  |        procuraba introducir el espíritu y la práctica del orden
22 XII | contribuir al renacimiento del espíritu nacional, mediante el movimiento
23 XII |        moza que envolvía aquel espíritu repugnante, a entablar correspondencia;
24 XII |    Serafina, mi mujer según el espíritu, recuerdo de mi madre según
25 XII |  pálida y desabrida región del espíritu; oscurecidas, arrinconadas,
26 XII |       ratos se apoderaba de su espíritu, y hasta pudiera decirse
27 XIII|       y Mochi trabajaban en el espíritu de Bonis para que este no
28 XIII| tenerlo: ¡el hijo!~     Por su espíritu pasó como el halago de una
29 XIII|     que heredara su sangre, su espíritu. Tenía que ser hombre. Y
30 XIV |     aquella tibieza con que su espíritu la trataba de algún tiempo
31 XIV |  idealidad de que era capaz su espíritu cariñoso, humilde. La sonrisa
32 XIV |      Reyes. Es decir, algo del espíritu y de la sangre de su padre».
33 XIV |     contenía un feto humano en espíritu de vino.