Libro, Capítulo

 1    1,      II|      navegando más de sesenta grados de Norte a Sur, cuarenta
 2    1,      II|      y llegado a casi sesenta grados al Sur.~ ~¿Quién dirá que
 3    1,       V| verdadero y fijo polo treinta grados, como la estrella del norte
 4    1,      VI|      altura de cincuenta y un grados. Pero si al otro lado del
 5    1,       X|     diferencia de más de ocho grados, y aun no cabales, se tiene
 6    1,      XX|      tormenta pasó dos o tres grados arriba del estrecho. Así
 7   II,       X| distan de la línea cuasi doce grados, echan de ver alguna diferencia
 8   II,     XII|       la mar y en unos mismos grados, con todo eso no es igual
 9   II,    XIII|    mares, y aun en los mismos grados de altura, muy frescos,
10   II,    XIII| leguas, y teniendo los mismos grados, hay tan notable diferencia,
11  III,      II|     nortes en tierra de menos grados, y son fríos; y corren vendavales
12  III,      II|   vendavales en tierra de más grados, y son cálidos; y esto es
13  III,      IV|       siempre menos de veinte grados, que es ya dentro de los
14  III,      IV|       en veintiocho o treinta grados.~ ~Y es la razón, la que
15  III,      IV|      que son en veinte y tres grados, hállanse vendavales, y
16  III,      IV|      de Lima, que está a doce grados al sur, vinieron a Manila,
17  III,      IV|      altura de veinte y siete grados arriba.~ ~La misma experiencia
18  III,      IV|     también de veinte y siete grados arriba. A la vuelta reconocen
19  III,      IV|      altura de veinte y siete grados arriba. Con la cual regla
20  III,     VII| veintisiete a treinta y siete grados, aunque no son tan ciertos
21  III,     VII|      altura, como de cuarenta grados, tampoco hay más certidumbre
22  III,    VIII|      más lejos de diez o doce grados de la línea fué una nao
23  III,    VIII|       tórrida, porque de doce grados al sur que está Lima, navegamos
24  III,      XI|  halláronse en cincuenta y un grados y medio, que es la propia
25  III,      XI|  hallaron en cincuenta y seis grados, y viendo que no habían
26  III,    XIII|     altura de cincuenta y dos grados escasos al sur; tiene de
27  III,   XVIII|     altura de treinta y cinco grados al sur. Crece al modo que
28  III,   XXIII|   ella es en cincuenta y seis grados, como está arriba dicho.
29   IV,       I|     hombre, pues están tantos grados más abajo que el hombre;
30   IV,      VI|      polo antártico, veintiún grados y dos tercios, de suerte
31    6,      VI|   muchas composiciones, y los grados que hay son en estos estudios
32    6,     XXV|      gran primor en poner sus grados a los señores y gente noble,