Texto,  Capítulo

 1 1,1|    trabaja el bronce; otros, el oro o la plata. Y así nosotros
 2 2,2|    sucede que nos acordamos del oro ya sea con codicia o sin
 3 2,2|         la razón por la cual el oro fuera creado, esto es, para
 4 2,2|        afán por la posesión del oro sensible, indicándonos todo
 5 2,2|        no busca la posesión del oro, ni se preocupa por entender
 6 2,2|    poseerlo. Lo que decimos del oro, es válido también para
 7 2,4|          el del dinero y el del oro, si lo albergamos unido
 8 2,4|     recibido el pensamiento del oro, el pensamiento mismo del
 9 2,4|        el pensamiento mismo del oro y el oro en sí mismo y la
10 2,4|  pensamiento mismo del oro y el oro en sí mismo y la pasión
11 2,4|         vincula al concepto del oro? Nadie que tenga intelecto
12 2,4| afirmarlo. ¿Es quizás pecado el oro en sí mismo? ¿Por qué entonces
13 3,4|        estómago es dios, así el oro es el dios para éste. Por
14 3,4|        del hombre esculpidos en oro.~Ante todos estos pensamientos,
15 3,5|        ojos láminas, ya sean de oro o de plomo, éstas impedirán
16 3,5|         valor de las laminas de oro no disminuye nuestra ceguera.
17 4,1|      los otros.~Todo obedece al oro, se dice; pero las realidades
18 5,1|       esperanza, la caridad: el oro, el incienso y las piedras