Capítulo
1 3 | derrota de sus mortales enemigos; y aunque su esposa trataba
2 4 | común y corriente entre sus enemigos. A los almirantes extranjeros
3 4 | cañones, para que estos enemigos se maten unos a otros. ~ ~ -
4 6 | personal: el de nuestros enemigos es inmejorable, compuesto
5 7 | gran consternación en los enemigos; pero como éstos no comprendían
6 9 | se apresaban los buques enemigos... ¡qué hermosa fiesta!,
7 11| Trinidad se encontró rodeado de enemigos que le acribillaban por
8 11| que hacían los proyectiles enemigos. La metralla inglesa rasgaba
9 11| y el hierro de nuestros enemigos. ~ ~De tal suerte combatida
10 11| salvarnos de los navíos enemigos que nos asediaban. Yo pude
11 11| herir a salivazos a nuestros enemigos. ~ ~Lo que más me asombraba,
12 12| menos que nosotros. Nuestros enemigos habrán tenido pérdidas de
13 12| distinguir si eran españoles o enemigos; y cuando la luz de un fogonazo
14 12| el navío, en lo cual los enemigos demostraban más suspicacia
15 13| pero las fuerzas de los enemigos se duplicaron con la ayuda
16 13| quedado en poder de los enemigos. ~ ~ - Cuénteme usted lo
17 13| enérgicamente contra tan superiores enemigos hasta las dos de la tarde,
18 13| estrago positivo en los enemigos. A todo atendía, todo lo
19 14| juntamente con el de los enemigos, no se escapaban a la cólera
20 15| había caído en poder de los enemigos. ¡Figúrate cuál sería mi
21 15| sin que los proyectiles enemigos hicieran en sus costados
22 16| distinguiendo entre nacionales y enemigos, antes bien equiparando
23 16| victoria de sus implacables enemigos los ingleses, se contentó
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