Capítulo

  1 1 |         Llevaba corto el pelo, con dos mechoncitos sobre ambas
  2 1 |         las proezas de Napoleón I. Dos personas, ambas de edad
  3 1 |           se le remata luego en un dos por tres. En la primera
  4 1 |           y Navalagamella, que son dos pueblos como dos lentejas
  5 1 |           que son dos pueblos como dos lentejas comparados con
  6 1 |         son en mí peculiar, me dio dos reales, que guardo en este
  7 1 |       delantal sucesivamente a sus dos ojos, y Santorcaz más serio
  8 1 |          respetaba el dolor de sus dos amigos. ~ ~ - Me han asegurado -
  9 1 |            plano sobre la mesa sus dos pesadísimas manos - . D.
 10 2 |        junto a mi cama, cuando los dos ancianos se retiraban a
 11 3 |           este chico. Oye, oíd los dos: muchos oficiales se han
 12 1 |        hubo de conferenciar más de dos horas, después de cuyo tiempo
 13 1 |         tuvimos que cargarla entre dos para ponerla en el coche... ~ ~
 14 1 |            con mujer, nueve hijos, dos suegras y tres cuñadas;
 15 1 |            suegras y tres cuñadas; dos suegras, sí señor, la madre
 16 6 |   asombrado, porque nunca he visto dos cosas que tanto se parezcan
 17 6 |        mandados en persona por los dos Emperadores y por el general
 18 6 |            cristales, caen al agua dos mil rusos con sus cañones,
 19 6 |       inmenso sombrero apuntado de dos candiles, bajo el cual los
 20 7 |      marcha, pronto recorrimos las dos leguas de camino llano:
 21 8 |            en pequeñas cruces, los dos escudos de piedra oscura
 22 8 |           el resto de la casa; las dos ventanas angreladas junto
 23 8 |        cuatro patitas». ~ ~A estos dos personajes seguirán forzosamente
 24 8 |          seguirán forzosamente las dos hijas de la marquesa; dos
 25 8 |          dos hijas de la marquesa; dos pimpollos, dos flores de
 26 8 |           marquesa; dos pimpollos, dos flores de Andalucía, lindas,
 27 8 |          cantadoras por la mañana; dos avecillas que encantaban
 28 8 |       Asunción y Presentación eran dos angelitos con quienes se
 29 9 |       compartimientos ocupados por dos pistolas, un puñal y un
 30 9 |           empuñadura. Tenía en las dos fachadas del puño el escudo
 31 9 |          juntamente con un sable y dos pistolas. El bagaje se repartió
 32 9 |           al día siguiente o a los dos días. Yo le vi muy pensativo
 33 10|        señores de Requejo que eran dos puerco - espines, martirizaban
 34 10|        sabía, cuando la entrada de dos personas me interrumpió.
 35 11|           muy satisfactorios estos dos números de la Gaceta - dijo
 36 11|         Malvar. Nos conocíamos los dos, señora, y como ella era
 37 12|          bastaban para equipar los dos regimientos, uno de caballería
 38 12|      prenda de vestir se cubriesen dos: el uno llevaba los calzones,
 39 12|       correaje también servía para dos: uno llevaba la bayoneta
 40 12|        mujeres, las que al oír los dos o tres tiros disparados
 41 12|           allí; pero no había dado dos pasos, cuando me detuve
 42 12|            de mugriento cuero, con dos puertecillas laterales.
 43 12|          corporal que una cabeza y dos alas, han creado los artistas
 44 12|         atrás, deteniéndose a cada dos pasos, y vacilando luego
 45 13|            las gorras de pelo de a dos varas de alto... Bien lo
 46 13|            la cortina de éste y vi dos monjas. No sé cómo me pude
 47 13|         que asió las rejas con sus dos manos para sostenerse. Cuando
 48 13|        porque veo que no una, sino dos veces me ha devuelto la
 49 13|      besaron... lloraron mucho las dos... luego dijeron que me
 50 14|         Sevilla cinco batallones y dos regimientos de caballería;
 51 14|   movimiento millones de agujas en dos semanas. En cierto estado
 52 15| consolándonos mutuamente. Nosotros dos solos y sin dar parte a
 53 15|             En la plaza del pueblo dos frailes escapados a las
 54 16|           modo les cogeremos entre dos fuegos y no escapará ni
 55 16|            fuerzas de infantería y dos piezas pasaron por junto
 56 16|         una pequeña loma, y como a dos tiros de fusil de aquel
 57 16|         conformamos, supliendo los dos tercios restantes con la
 58 17|           arreglado todo con otras dos señoras de Córdoba, y según
 59 17|            otras más allá, y tiene dos escudos con ocho lobos sobre
 60 17|          es, señores! Sus ojos son dos luceros, como aquel grande
 61 17|        casa; su boca se compone de dos hojas de rosa; sus dientes
 62 17|           yo, tiene tres dehesas y dos casas; y los demás... uno
 63 17|          un tablero de ajedrez con dos calderitos muy monos. ~ ~ -
 64 18|          volar hicieran reír a mis dos hermanas que estaban rezando?
 65 18|        gran trascendencia para los dos. Yo me aparté del grupo,
 66 20|            la casa, seguida de los dos tiernos pimpollitos de sus
 67 20|           de sus lecciones. ~ ~Las dos muchachas salieron a las
 68 20|           lágrimas. Ninguna de las dos, ni la destinada al matrimonio,
 69 21|        tantos carros, que ocupaban dos leguas; detrás de los carros
 70 21|        después otros seis cañones, dos regimientos de coraceros,
 71 21|        precaución, custodiando sus dos leguas de convoy. Los hombres
 72 22|            día, y después de darme dos palmetazos porque tenía
 73 22|            las andadas y entre los dos haremos alguna cosa. ~ ~ -
 74 23|         saludo de cortesanía entre dos guerreros que se van a matar,
 75 23|            era la situación de los dos ejércitos, cuando la primera
 76 24|           la ofensiva al amparo de dos bocas de fuego y de la caballería
 77 24|        ardientemente disputado por dos Naciones, y que al fin quedó
 78 25|          el enemigo, amparados por dos piezas de artillería. El
 79 25|       división se conmovió toda, y dos batallones de reserva avanzaron
 80 25|         horror! Figurábaseme ver a dos monstruos que se baten mordiéndose
 81 25|           mi lado no había más que dos o tres jinetes, que se hallaban
 82 26|        resistencia enérgica de las dos piezas del ala derecha,
 83 26|         Aquel imperio compuesto de dos mal engranadas ruedas de
 84 26|            una cerrada y las otras dos abiertas, todas con sobrescrito.
 85 27|           Estreché aquella Inés de dos pulgadas contra mi corazón
 86 27|           mil hombres que formando dos grandes conjuntos, se disputaban
 87 27|           unos minutos la pieza de dos cuartos arrojada por España
 88 27|           en mí por los asuntos de dos o tres personas que no habían
 89 27|        marinos, pudieron habilitar dos piezas y desde lejos tomando
 90 27|         otros, y el espectáculo de dos compañeros muertos sin combatir
 91 27|    reconvenciones, convinieron las dos en no admitirle a Vd. en
 92 27|         legitimación. Por fin, las dos familias acordaron evitar
 93 28|       litigio que arruinaría a las dos familias. ~ ~ - ¿Qué hablas
 94 28|           antes, poniéndonos entre dos fuegos! Pero Dios, protector
 95 28|          de mucho interés para las dos familias. ~ ~ - El camino
 96 29|      hombres, llevando por delante dos criados con sendos farolillos
 97 29|     reconocí a doña María, con sus dos hijas, las tres cubiertas
 98 29|            Digo mal, porque si las dos muchachas se deshacían en
 99 29|       dieron resultado alguno. Las dos hermanitas no podían tenerse
100 31|          Entre los oficiales había dos que no me dejaban de la
101 31|           desplegó sus labios, las dos muchachitas tuvieron que
102 31|           después de casado tendré dos vinculaciones. ¡Cómo se
103 31|         borrascoso. Así es que las dos estaban muertas de miedo. ~ ~
104 31|             dirán Vds... Sobre las dos inocentes muchachas, sobre
105 31|     inocentes muchachas, sobre los dos angelitos celestiales, Asunción
106 31|            que pagaran el pato las dos niñas desheredadas. Yo las
107 32|          del encuentro de aquellas dos familias en el tortuoso
108 32|         galopaban a la zaga de los dos coches. ¡Ay! Por la portezuela